A puntes 399 problema nuevo. Pareciera que las condiciones consideradas como más favorables para preparar el descubrimiento, tales como riqueza en materiales de estudio, en medios económicos, aparatos y personal, contrariasen la caprichosa iniciativa del genio. De hecho es ciertamente raro que de estos Institutos fundados a costa de grandes sacrificios surjan descubrimientos de importancia: con harta frecuencia sólo dan ocasión a elocuentes discursos y al encumbramiento de ciertas personalidades a situaciones más elevadas y a distinciones honoríficas mayores. Las ventajas particulares que proporcionan no son siempre extrañas a su fundación y a su preponderancia.
Lo mismo cabe decir de los Comités, las Ligas, las Asociaciones, a veces ricamente dotados e instituidos con el fin de combatir científica y materialmente ciertas plagas. Estos institutos, que disponen de capitales a veces considerables, pueden ciertamente socorrer muchas miserias, pero con frecuencia no suelen adelantar gran cosa en la solución de los problemas a que se consagran, y responden muy débilmente a las esperanzas que pudieran fundarse en su creación. Cómo puede ser esto? Sin embargo, al frente de tales Institutos, de tales Comités, se han puesto los sabios mejor calificados en las cuestiones que se trata de resolver. Por qué, en suma, los descubrimientos científicos de importancia no proceden en general de los que llevan consagrada toda su vida al estudio de la rama respectiva. Es un hecho ciertamente curioso, opina NICOLLE, pero que se explica, que a fuerza de vivir en presencia de una dificultad, el hombre se vuelve cada vez menos apto para resolverla.