Apuntes 315 gigantescos; al lado de la evolución progresiva de los seres, vemos surgir fenómenos de vuelta hacia atrás, de regresión a los tiempos priinitivos. Las razas superiores de hombres se van extinguiendo porque, como conocedores de todos los procedimientos anticoncepcionales, lejos de aumentar su descendencia, la limitan considerablemente por razones económicas y sociales. En cambio, los individuos inferiores viven y se multiplican a sus anchas, sin control ninguno. 1)
La Eugenesia se propone analizar los caracteres físicos, mentales, morales y patológicos del individuo y los de sus progenitores y presentar las cualidades dominantes, buenas y malas, y las recesivas o menos fáciles de perpetuarse, para que sirvan de guía a las personas que en lo sucesivo quieran efectuar uniones más de acuerdo con la razón y la ciencia.
Al formar un hogar, muy pocos estudian esta importante cuestión biológica. En las uniones entre personas racionales preside casi siempre el amor ciego, algunas veces el capricho, el interés y aun la sensualidad y el vicio; se confía, como ya he dicho, demasiado en la educación y el medio ambiente. Cuántas niñas enamoradas de hombres viciosos. de mala raza, desoyen la voz de su razón y los con(1) En un artículo que trata de este asunto, dice don Elias Jiménez Rojas. La Eugenesia en manos del Estado se hace pedazos. La ley de la selección natural se cumple necesariamente, querámoslo o no; pero lo más cuerdo para nosotros, personalmente, es ponernos de su lado y no estorbarla. La campaña contra la natalidad erróneamente restringida es más interesante que la campaña contra la natalidad malsana. La selección natural se encarga de barrer con lo que no sirve. Lo que hay que pedirle al Estado es que no aplaste a los buenos o sanos con el peso muerto de los enfermos.
La condición de la selección es la multiplicación. Hay que dirigirse particularmente a las mujeres y hacerles comprender que su ventura está en la maternidad. La influencia moral y fisiológica de la maternidad compensa ampliamente las aflicciones que puedan ser debidas al quebranto requerido por las gestaciones y los quehaceres domésticos.