302 puntes sus patas anteriores y tres en las posteriores; con el transcurso de los siglos, el caballo ha aumentado de corpulencia y velocidad, y sus dedos débiles se han convertido en el fuerte casco que posee el actual. Las aves de dulce canto y hermoso plumaje que hoy se ciernen en el azul del cielo, fueron en un tiempo repugnantes reptiles. En épocas muy remotas, los helechos parecían árboles por su corpulencia y altura.
Así como las especies de hoy difieren tánto de las que les dieron origen, así las especies venideras se diferenciarán de especies actuales, porque nada nos indica que la naturaleza haya puesto punto final a su obra, siempre potente y creadora.
Estas transformaciones de los seres vivientes que ocurren sin cesar bajo el impulso de las fuerzas de la Naturaleza, se conocen en la ciencia con el nombre de Evolución.
La evolución es la resultante de cuatro grandes factores: variación, adaptación, selección y herencia.
Todos los seres varían con respecto a sus antepasados; todos los seres producen descendientes que no son idénticos a sus padres; neredan los caracteres de la pecie, pero difieren en cuanto a los caracteres individuales.
Es esta individualidad la que constituye la variación, que es la base de la evolución.
Si esta variación no se adapta al medio ambiente, la Naturaleza suprime al individuo.
Pero si la variación está en armonía con los agentes que la rodean, la naturaleza selecciona a los seres sobrevivientes.