390 puntes Seis siglos antes de la era moderna, Bouddha Gautama, en su lecho de muerte, exclamaba: No busquéis refugios exteriores. No busquéis ayuda exterior.
Sed vuestro propio refugio. Alumbrad como si fuerais vuestra propia lámpara. Id por el mundo y enseñad la buena vía. Sed siempre vosotros mismos y seréis felices!
El estatismo o arquismo es indispensable para que las gentes sin carácter e incapaces de vivir con toda independencia de espíritu, puedan hacer frente a las contingencias múltiples de la vida. Los débiles, los entecos, los anormales, los amorfos, los desorientados, los inconscientes, los enfermos, los valetudinarios, todas esas gentes cuya psicología postula toda suerte de represiones y de redes complejas, todos esos espíritus hechos para recibir dócilmente el yugo de algún tirano, todos los que tienen un cuerpo preparado para el látigo de un amo, Xo Z, toda esta multitud necesita un sistema arquista. ellos son los elementos de toda colectividad. Vivir en manada es lo propio de su naturaleza, de su contextura psico biológica. Si el arquismo no existiera en esos constituyentes inferiores de la especie humana, los espíritus fuertes no podrían vivir libremente según su aspiración. En filosofía pura, debemos por consiguiente admitir que el colectivismo es una forma de vida inferior al individualismo, pero que éste depende en mucho de aquél.
El budista es un heimatlos. en francés: un en dehors fuera de la manada, por su excelencia mental; pero esto no implica para él un casus belli frente a la sociedad. En esto difiere el budista del anarquista. El budista no se opone al arquismo; prefiere imponérsele. Hace triunfar la calidad del individualista consciente y de contextura mental supe