A puntes 77 Los avances del comunismo nada prueban en favor de él. La humanidad está expuesta a sufrir las peores plagas. Lo que podemos afirmar, porque la Historia nos lo enseña, es que la casi totalidad de los grandes hombres DE TODOS LOS TIEMPOS los grandes matemáticos, astrónomos, físicos, naturalistas, poetas o filósofoshan sido individualistas. Por esto sostiene el más notable de los comunistas, que hay que comenzar la revolución por el desconocimiento de todas las grandes fig que el mundo ha admirado hasta hoy.
La tendencia al comunismo es indicio seguro de inferioridad mental, inferioridad que es orgánica en ciertos individuos o razas y puramente accidental en otros.
Hace más de veinte años que ciertos sociólogos nos hablan de la amenaza del sub hombre. quizá no anden muy descarriados en sus pesimistas predicciones. Del socialismo de Estado (impropiamente denominado a veces nacionalismo) se pasa con facilidad al comunismo y luego a la parálisis asiática. Pero viene siempre después el despertar en los pueblos que no son orgánicamente inferiores, y renace la civilización.
Se pasa del nacionalismo al comunismo con la misma facilidad con que se pasa del individualismo al anti estatismo absoluto o anarquía propiamente dicha. Supongo que el lector es bastante culto para no confundir a un anarquista tal Eliseo Reclus con un nihilista ruso o un dinamitero de suburbio. Pero las consecuencias de esos pasos son diametralmente distintas. El anarquista es buenamente un utopista. Antes que mal, hace bien, al contrabalancear con su autoridad personal la autoridad del Estado. El comunista, en cambio, es un retrógrado, perfectamente