DemocracyVicente Sáenz

72 LIBERACION LIBERACION 73 España en sus gloriosas jornadas de julio y agosto de 1936 Por VICENTE SAENZ Serie de 18 articulos publicados en el diario La Hora, San José, Costa Rica.
Acogidos para su reproducción en 22 periódicos hispanoamericanos y en las més importantes publicaciones y radiodifusoras de la Agencia Columbus. Menéndez Pidal, Marañón, Ortega y Gasset, los católicos sinceros como Osorio y Gallardo figura preclara del foro español los pequeños industriales y comerciantes, todos se han levantado contra los generales que hicieron traición a su patria y a su juramento de lealtad republicana.
Esos hombres, esos traidores, son fascistas. Para el pueblo español, para todo el pueblo español, ser fascista significa ser un traidor a la patria, un hombre sin honor, un enemigo de la cultura, del progreso y de la paz.
Nosotros hemos empuñado las armas al lado de nuestro pueblo.
Lo hemos hecho para defender una causa justa, la causa de la libertad.
Esto nos ha conquistado un odio feroz por parte de los rebeldes. Crue.
les con todos los vencidos se ensañan especialmente con los maestros de escuela, con los profesores. Cuando los mercenarios de Franco y Mola entran en un pueblo, preguntan ante todo por el maestro. La simple condición de republicano liberal, el mero hecho de no haber asistido regularmente a las ceremonias religiosas es suficiente para que nuestros compañeros sean fusilados, Pero proseguimos la lucha.
Queremos que se respete la voluntad popular. Queremos el triunfo de la ley y de la democracia. Queremos una España libre y culta.
Queremos que la paz reine entre todos los pueblos.
Por esto nos es difícil creer que los hombres sensibles a los grandes principios éticos de la Humanidad vacilen al condenar a los criminales rebeldes. Por esto nos es difícil comprender que ciertos pueblos democráticos coloquen en un mismo plano a rebeldes y al gobierno legítimo de la República, a traidores y a hombres que luchan por la libertad de su país y, en definitiva, por la libertad de Europa.
La única razón de este fenómeno nos parece encontrarla en la ingente propaganda que los fascistas han sabido organizar en todo el mundo, desnaturalizando por completo la realidad de los hechos. para que nadie pueda llamarse a engaño, nosotros, representantes del Magisterio de España, enviamos el presente manifiesto a maestros y profesores de todo el mundo en la seguridad de que nuestras palabras no caerán en el vacío, y en la esperanza de que las grandes asociaciones del cuerpo docente extranjero, requerirán de sus respectivos pue blos y gobiernos el apoyo decidido, incondicional, material y moral, en favor del gobierno legítimo de la República Española.
Madrid, septiembre de 1936. boca de jarro, abriendo todavía equipajes, me pide don José Marín Cañas. Director de La Hora, una serie de artículos sobre las siete semanas de revolución que viví en Madrid. Pero han de ser agrega el compañero sobre la marcha, porque los lectores los esperan ansiosamente, Mis impresiones, pues. Frases en las cuales llegue a sentirse el tronar de los cañones, el tableteo de las ametralladoras, el zumbido de los aeroplanos, el estruendo de las explosiones; y en las que cada palabra sea el eco de una protesta, de un grito de dolor, de un lamento de los heridos que se desangran en las ambulancias o sobre el pavimento calcinado de las calles.
Se desea, entonces, que narre yo lo que vieron mis ojos y oyeron mis oídos en aquellos días frágicos de julio y agosto de 1936, que llenarán páginas enteras de la historia de España. De la España viviente, sufrida y heroica, que con los puños en alto defiende sus derechos a costa de la vida. De este material humano español, tanto o más interesante que las iglesias, el Escorial y los alcázares.
Aquéllo, el dolor y la batalla hasta la muerte por mejorar la vida, es el presente que se plasma en porvenir. los monumentos, las reliquias hisfóricas, los museos, los castillos, sólo constituyen el pasado de la gran matriz española de civilización y de cultura, Esa gran matriz sangrante que con sentido humano, de alta humanidad, quiere hoy producir hombres en lugar de catedrales!
Difícil será que pueda, quitando el pie de un estribo para ponerlo en otro; con graves cuidados de familia por enfermedad de mi más pequeña hija, a quien por segunda vez debe operarse; teniendo, además, que preparar urgentamente un número doble de LIBERACIÓN, complacer al Director del popular periódico vespertino en todos los puntos que él desea. Pero van, por lo menos, a grandes rasgos y en forma sintética, las primeras cuartillas sobre la realidad española que he vivido y sentido intensamente, desde el momento en que sin dificultad alguna pude desembarcar en Santander Primeras impresiones de julio de 1936. Ya estoy en España. Un mozo de boina, alto, fornido, tostado por el sol y el viento del Cantábrico, me ayuda en la aduana y lleva mis valijas a un automóvil previamente contratado por él mismo.
En el trayecto me habla del viaje de Alcalá Zamora, a quien acabamos de ver en el muelle con sus familiares. Van todos ellos hacia el norte de Europa, en el vapor alemán en que yo vine. Todo esto es misterioso exclama La situación se hace cada día más grave. Le pido consejo sobre hoteles que no sean de alta tarifa. Llegamos a GRAN CAFE POPULAR El preferido por todas las clases sociales del país Domingo Tura Ricart Teléfono 3171 San José, Costa Rica Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.