12 LIBERACION LIBERACION 13 Incomprensión ¿Cuál fué la respuesta dada a esta tolerante política por las llamadas clases conservadoras del país? Abochorna decirlo. El capitalismo, el militarismo, el burocratismo, el clericalismo y el señoritismo pusieron el cerco a la República. Las damas católicas hacían arma politica de la misa, de la comunión y de la exhibición profanatoria de Cris.
to crucificado, al que llevaban a modo de pectoral entre los suyos naturales. Sin embargo, hacían compatible tanto catolicismo con los más desvergonzados comentarios sobre las disposiciones sexuales de los gobernantes, escupiendo conceptos y frases que jamás se habían oído a una mujer española con roción del pudor.
y en los partidos obreros. Verbo de todos ellos fué Azaña, ante el cual y para oírle se congregaron en campo abierto muchedumbres ingentes. Valencia, Bilbao y Madrid fueron testigos de las reuniones politicas más numerosas y enardecidas de nuestra historia. Sólo en Madrid acudieron al campo de Comillas 500. 000 oyentes.
Ante tan enorme presión hubo necesidad de disolver las Cortes reaccionarias y convocar elecciones nuevas. Lo que las derechas hicieron entonces no es para descrito. Lo de menos fué el inmenso derroche de dinero. Fué peor que eso una actitud de provocación y jactancia contra todos los elementos liberales y obreros. Se trataba, en fin, de aplastar al marxismo y a sus hombres. El caudillo de las derechas fué elevado a la categoría de ídolo, sentándose la peregrina, aunque no original teoría, de que el jefe no se equivoca nunca. La vesania llegó hasta el punto de que un obispo hizo poner de manifiesto el Santísimo Sacramento para que perdieran las elecciones las izquierdas.
Por fortuna el Santísimo Sacramento no hizo el menor caso de su desaforado ministro, y las izquierdas ganaron las elecciones. Adviértase que las presidía un Gobierno de marcadísimo tipo conservador.
El 10 de agosto Corroboración de esa tarea fué la sublevación en Sevilla del general Sanjurio, quien ni siquiera tuvo la delicadeza de renunciar antes a la Inspección de Carabineros, uno de los cargos mejor remunerados del país. El Tribunal Supremo condenó a muerte. El Gobierno le indultó, y él pagó esa generosidad sublevándose de nuevo contra la República hace un mes. Murió carbonizado en el avión que le traia a España.
Octubre Triunfan las izquierdas El primer éxito de esa campaña difamatoria consistió en lograr la imprudente y prematura disolución de las Cortes Constituyentes. Surgieron entonces Gobiernos dedicados a falsear la República, y el escándalo llegó a su cumbre cuando fué llamado a gobernar el partido de Acción Popular, que ni había votado la Constitución ni era republicano. Esto determinó el movimiento de protesta revolucionario de Octubre de 1934, en Asturias, en Cataluña y en otros puntos. Fué sofocado por el Gobierno, y a partir de entonces, éste se entregó a las mayores locuras. La represión en Asturias tuvo unos caracteres tales, que yo no me atrevo ni siquiera a indicarlos, porque estoy hablando para afuera de mi país. Cada uno de mis oyentes puede imaginarse lo que quiera. El ex presidente del Consejo de ministros, don Manuel Azapa, fué vilipendiado, perseguido y encarcelado durante varios meses, sin que a estas horas se sepa todavía quién le mandó encarcelar, ni por qué motivo, ya que no ha habido Tribunal alguno que llegase a dictar contra él auto de procesamiento.
Los mandos públicos civiles y militares fueron entregados a monárquicos conocidos, y con preferencia a los de tipo fascista y dictatorial. El periódico de mayor difusión y autoridad en las clases conservadoras publicaba artículos de fondo, recomendando el asesinato de 15. 000 españoles para asegurar el honor y la prosperidad de España.
Alcanzaron las izquierdas muy cerca de 300 diputados. la mejor prueba de que no fué atropellado nadie es que también consiguieron cerca de 200 actas los partidos de la derecha, un grupo que se tituló a sí mismo centrista y otros elementos sueltos. De modo que la Cámara no era una Convención ni una demagogia.
Comenzó la nueva etapa política. Separado de su cargo el presidente de la República (gravisimo tema que no se puede examinar todavía. y elevado a substituirle el señor Azaña, quedó en funciones un Gobierno burgués, típicamente burgués, más burgués que el del priner bienio, ya que no formaban parte de él elementos socialistas, que en aquél estuvieron. Los ministros eran catedráticos, abogados, ingenieros, arquitectos, militares. La obra legislativa marchaba con ritmo lento y aburguesado también. Si algún cargo cabe hacer a los gobernantes es el de no haber tenido valor para acometer las reformas sociales con la energía y la rapidez que demandaba la justicia. Hubo huelgas, muchas huelgas, demasiadas huelgas, esto es verdad. Pero todas ellas se mantuvieron en un tono de pacífica resistencia. Nada huho de tipo comunista ni revolucionario de ninguna clase. Vivíamos como cualquier país, y mejor que muchos.
Cómo mienten las derechas cerriles Pues contra ese Gobierno se han levantado en armas el Ejército español, los señoritos, los plutócratas, los fascistas de toda especie y cl clero, empezando por los obispos. Esa es la verdad y no otra. Si os dice alguien que ha habido que defender a España de un Gobierno demagógico y perturbador, contestadle que miente. Si os dice que los españoles no teníamos seguridad para nuestras vidas, nuestros intereses o nuestra conciencia, contestadle que miente. Si os dice que era necesario defendr el decoro o la dignidad de España contra cualquier peligro, aseguradle que miente y añadidle que ni él ni los que piensan Resurge Azaña La incomprensión, la ceguedad, la barbarie fueron tales, que determinaron un estallido de indignación en los verdaderos republicanos Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.