CommunismFascismSoviet

LIBERACION LIBERACION Pero quienes no sean tontos de capirote están curados de espantos y de fantasmas comunistas.
memorándum los hicieron objeto de mofa el New York Times. el New York Graphic. The World. The Nation y otras publicaciones de la Federación anglosajona.
Lo de 1926 y 1927 vuelve hoy a repetirse. La tragedia de España se aprovecha, desfigurada, como caballo de batalla. Todo és comunismo y todos somos comunistas!
Con excepción, por supuesto, de las muy prestigiadas figuras campanarias que están siempre al servicio de los gobiernos.
Con excepción de los intelectuales neutros.
Con excepción de los abogados que medran a la sombra de las compañías extranjeras.
Con excepción de toda esa espuma heterogénea que encharca el territorio de estos pueblos.
El comunismo de México en 1926 y en 1927 Los hispanoamericanos tenemos ya larga experiencia con esta clase de propagandas. Cuando en los Estados Unidos gobernaban Coolidge y su Secretario de Estado, Frank Kellogg, todo intento que se hiciese en estas repúblicas para acabar con tiranías ignominiosas, o para defendernos dei voraz imperialismo de los grandes succionadores norteamericanos, era inmediatamente calificado de movimiento comunista. el oro de Rusia, naturalmente, andaba por allí a raudales, entre pobres y abnegados patriotas que exponían su vida atacando a sargentones y a vendepatrias!
Hasta la revolución constitucionalista de Nicaragua, aquella mal llamada revolución que para quitarle el presupuesto a Chamorro y a Díaz hicieron el general Moncada y el medroso, perfido y aprovechado doctor Sacasa; hasta eso, que era una baja lucha de apetitos vulgares, sirvió de pretexto a Kellogg para desembarcar marinos que iban a evitar la implantación del comunismo mexicano en Centro América. Cosas muy divertidas, desde luego! Porque México estaba en dificultades con el Soviet, las que culminaron con el rompimiento de relaciones entre ambos países. Calles, a poco andar, fué señalado como reaccionario. Sacasa y Moncada, hermanos gemelos, ocuparon sucesivamente la presidencia de Nicaragua bajo la protección, no de los aztecas ni de los rusos, sino precisamente de la Casa Blanca que los armó caballeros y los puso a la par de los Díaz y de los Chamorros.
Ahora, entonces, el comunista es Cárdenas. contra el actual Gobierno de México arreciará el fascismo su difamación y sus ataques, por la actitud verticalísima que ha mantenido en el caso de España.
Actitud que, por encontrarse dentro del derecho de gentes, debe enorgullecer a Hispano América y servir de ejemplo a poderosas naciones cuya mala memoria comenta el mundo. Se les ha olvidado que existe el Derecho Internacional!
La reelección del Presidente Roosevelt, al que también se le llama comunista En abierta lucha contra la plutocracia de su país; llamando explotadores sin Dios ni conciencia a banqueros e industriales, Franklin Roosevelt ha sido reelecto para un segundo período presidencial en los Estados Unidos. Le dió el triunfo una mayoría aplastante de 523 votos electorales, habiendo salido victorioso en 46 Estados de la Federación. su contrincante, el candidato republicano Landon, sólo le quedaron votos electorales y dos pequeños Estados, refugio de viejos puritanos y de individualistas a todo trance.
Naturalmente que también a Roosevelt lo llamaron comunista. según cablegrama de Nueva York, fechado el de noviembre en curso y publicado en todos los periódicos, llegaron a decir sus enemigos que era un instrumento del Kremlin. Pero los ciudadanos norteamericanos, como los senadores en tiempo de Kellogg, se soltaron a reír. respondieren a las acusaciones de la propaganda reaccionaria con la más fenomenal derrota que se hayan llevado los detentadores y los cavernarios al norte del Río Bravo.
Es de advertir que el triunfo de Roosevelt lleva en sí mismo una transformación social de antemano planeada, pues durante su jira poJítica declaró que para llevar a cabo su programa, para que la política del nuevo trato fuera efectiva, sería necesario acabar con la le gislación reaccionaria que le ata las manos, y con la estructura de la Corte Suprema de Justicia por sus vetos legales a los más importantes proyectos de la administración demócrata. Esa Corte presidida por Charles Evans Hughes, el abogado a sueldo de los Morgan y de los Rockefeller que, según anunció crudamente Roosevelt, tendrá que renovarse para evitar que sigan aprovechándose del prójimo los grandes succionadores del trabajo colectivo!
Grandes risas en el Senado norteamericano por el peligro rojo Pero lo relatado no es lo más interesante. Lo que causa hilaridad, y lo que hizo reír mucho a los propios senadores norteamericanos, fue el memorándum que les presentó Kellogg el 12 de enero de 1927. En ese memorándum, remitido con gran misterio al Comité de Relaciones Exteriores del Senado, se justificaría ampliamente el pánico del Gobierno de Washington ante el peligro comunista.
Pero vino a parar la lectura del celeberrimo documento en que allí, en el Senado, se le dijera a Kellogg alma de Dios. pobre espíritu. viejo nervioso, inadecuado y decrépito. defensor de petroleros. hombre sin la fuerza mental ni la entereza de carácter necesarias para no ser instrumento de los poderosos capitalistas que quieren dominar a Nicaragua y a México.
Como si lo transcrito no fuere bastante para que Coolidge y su Secretario de Estado se pusieran en evidencia, también a ellos y a su La Conferencia Panamericana de Buenos Aires La lección que ha dado el pueblo de los Estados Unidos a los defensores de la injusticia social y de la vieja estructura política y económica del siglo XIX, es una lección que debieran aprenderse de memoria las naciones hispanoamericanas. La cuestión es abrir los ojos y aprovecharla. Pero, desgraciadamente, no hay indicios de que eso se haga. no podemos esperar que el Gobierno de Washington se Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.