Vittorio Codovilla al Comintern, sobre la situación en el Partido Comunista de México y algunos partidos latinoamericanos, México, 1 de febrero de 1940. RGASPI, fondo 495, reg. 17, exp. 235.
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kistas, es la siguiente: en los Sindicatos dirigidos por los comunistas en donde el trotskismo ha hecho los más grandes avances, hasta lograr puestos en las direcciones. (Sindicatos de Maestros, de Tranviarios, de Electricistas y de Ferrocarrileros que son los obreros mejor pagados). En esos sindicatos los comunistas ni luchan, ni movilizan a las masas para luchar contra los espías trotskistas. Sin embargo, cuando se le explica a los obreros el papel contrarrevolucionario de los trotskistas, estos reaccionan con energía y repulsión contra los mismos. Como ejemplo característico, ilustrativo, puede servir el siguiente: en el sindicato de electricistas uno de los que tienen más fondos en caja, los trotskistas plantearon en una asamblea la necesidad de que el sindicato ayudase a Finlandia y con ese motivo uno de sus líderes, Breña Alvires, hizo un ataque calumnioso contra la URSS y el camarada Stalin. Algunos de los comunistas presentes intervinieron en defensa de la URSS, pero en forma muy débil. Un obrero sin Partido indignado ante esa baja actitud de los trotskistas, pero no sintiéndose políticamente preparado para poder refutar al líder trotskista, pidió y obtuvo que se leyera en la asamblea un artículo publicado por Villaseñor en la revista “Futuro” –revista que edita Toledano y sus amigos con la colaboración de algunos comunistas, en que se defendía la política exterior de la URSS, particularmente en el caso de Finlandia, diciendo que en ese artículo se expresaba lo que él pensaba pero que no sabía decirlo. Después de esa lectura y de una larga discusión, los trotskistas que daban ya por ganado el asunto, lo que les hubiera servido para reforzar su campaña antisoviética, fueron batidos [sic] y la asamblea rechazó la ayuda a Finlandia. Esa lección tampoco fue asimilada por nuestros camaradas.
Otra de las formas sutiles y canallescas que utilizan los trotskistas en su lucha contra nuestra ideología, es la de presentarse como defensores del marxismo-leninismo pero, en