Vittorio Codovilla al Comintern, sobre la situación en el Partido Comunista de México y algunos partidos latinoamericanos, México, 1 de febrero de 1940. RGASPI, fondo 495, reg. 17, exp. 235.
---------
la situación existente en el P. Después que 2 hubo informado pasó una cosa extraña: durante más de 15 minutos ningún miembro de la dirección del P. se atrevió a “romper el fuego”
e iniciar la discusión. (Esa actitud nos la explicamos luego al comprobar que en el P. existía una especie de terror político y quienes se atrevían a criticar a los miembros del Secretariado o eran mal vistos o eran eliminados de los puestos de dirección). Fue necesaria una intervención nuestra para empujar a los camaradas a dar su opinión. Entonces uno por uno, durante horas, empezaron a explicar lo que pasaba en la dirección y en el P. y lo que dijeron fue una verdadera revelación: se comprobó que el P. estaba minado por los peores vicios de la politiquería burguesa y que habían perdido completamente su fisionomía de P. proletario. Eso explicaba su pasividad, su falta de autoridad, su pérdida de influencia y de efectivos. Bajo la tolerancia de la dirección estrecha del P. -hasta ahora no tenemos todavía los elementos que demuestren su complicidad, cosa que no es de excluirse, todas suertes de corrientes extrañas al comunismo desarrollaban una actividad disgregadora en el seno del P.: grupos trotskistas, agentes almazanistas, grupos masones y agentes cardenistas. Pudimos comprobar como la dirección del partido se debatía entre tendencias sectarias (representadas por 1 y su grupo) y tendencias oportunistas (representadas por y su banda) que chocaban continuamente entre sí, contribuyendo a paralizar la actividad del P. y que esas tendencias así como otros grupos enemigos del P. eran tolerados por que fingía ignorarlas o conciliarlas, apoyándose en unas y en otras para mantenerse en la dirección del P.
A través de preguntas y poniendo de relieve las contradicciones más flagrantes, pudimos poner en claro cómo los elementos trotskistas trabajaban organizadamente en el seno del P., cómo la masonería trabajaba en el mismo cómo fracción y cómo agentes de Almazán y del Gobierno de Cár-