El Secretariado del Caribe al Comité Central del Partido Comunista de México, 15 de febrero de 1934. RGASPI, fondo 495, reg. 108, exp. 169.
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el pésimo método de transmitir órdenes desde arriba a determinados miembros de los organismos inferiores para el cumplimiento de sus tareas, que mata la iniciativa de la base y sustituye el trabajo de organización. Por esta falta de organización y el método de alto comando la dirección central del P. es absolutamente responsable de todas las debilidades, fallas y errores del P. El P. debe organizar en forma más seria y efectiva los cursos especiales en las regiones, y una escuela nacional, asegurando la asistencia y participación de obreros de las industrias básicas de los lugares de concentración y de los mejores elementos del campo garantizando la capacitación de nuevos cuadros para el P.
El órgano central del P. alcanza un número muy reducido de trabajadores y aún el contenido -muy limitado por el tamaño del periódico, no clarifica a las masas sus problemas y perspectivas. Es necesario ligar más estrechamente los aspectos de información y las directivas políticas que se dan en sus columnas, y el lenguaje, especialmente de los artículos de fondo, debe hacerse más sencillo, más comprensible para las más amplias masas, tal como lo establece el XIII Pleno de CEIC, convirtiéndose de este modo “El Machete" en un organizador efectivo del P.
La dirección del P. se resiste por falta de un contacto directo con sus propias fuerzas. Hay un exceso de dirección por medio de circulares, que determina la ignorancia de parte de la dirección de una serie de problemas palpitantes y pequeños que encaran diariamente los miembros del P., en su trabajo de masas. Esta falla sólo puede corregirse mediante el envío de instrucciones de la dirección a las regiones y secciones, instructores que deben proceder no sólo del CC, sino inclusive del Secretariado, al grado de que todos los miembros del cc salgan del centro -por turnos que desde luego eviten la paralización del trabajo en el centro, para hacer el contacto cuya falta, como decimos, es causa de mu-