Vittorio Codovilla, intervención en los trabajos preparativos para organizar el Congreso Extraordinario del PCM, México, 14 de diciembre de 1939, enviado al Comintern. RGASPI, fondo 495, reg. 17, exp. 122.
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Al representar Almazán a las capas enemigas del pueblo y de la revolución, es justo decir que él es su enemigo principal. Es justo alertar a las masas para prevenir maniobras criminales de Almazán, quien con la ayuda del imperialismo yanqui prepara una insurrección armada antes de las elecciones o después en caso de que éstas le sean adversas; sobre todo si las elecciones demuestran una participación activa de las masas obreras y campesinas y toman un verdadero carácter de lucha contra el latifundio y contra los imperialistas. Pero la lucha contra el golpe reaccionario de Estado de Almazán no debe orientarse solamente en el terreno de la preparación técnica de la defensa armada para evitarla o para estrangularla si ésta estalla. Lo que hay que hacer es explicar al pueblo que tales levantamientos reaccionarios son y serán siempre posibles si es que no se liquida la base material de la contrarrevolución: los grandes latifundistas, los grandes comerciantes, los especuladores, las empresas extranjeras, etc., y no se expulsa a sus agentes del aparato estatal, del ejército y de la policía. ¿Eso que requiere? Eso requiere una campaña de masas para que se haga una limpieza a fondo de los enemigos del pueblo que están incrustados en el aparato estatal, en el ejército y en la policía; eso requiere una campaña de masas contra la prensa reaccionaria -que es la casi totalidad de la prensa del país-, que hace una campaña abierta de descrédito de la revolución, que predica abiertamente la insurrección armada, que se ha transformado en un centro de convergencia y de organización de todos los enemigos del pueblo. Eso requiere no sólo denunciar ante las masas al trotskismo, a esa banda de espías y contrarrevolucionarios que trabajan por cuenta de la contrarrevolución, sino movilizar a las masas, para que terminen con el ambiente de tolerancia con los enemigos del pueblo y obtener que sean arrojados del aparato estatal, de las organizaciones obreras y campesinas, etc. Eso quiere de-