Adelante Del 29 de setembre al de octubre de 1989 eget Del 29 Fútt Medio milenio del encuentro de dos mundos Mai El a nos fud vos que escuela faría campe cional FA) er AS con el Marco mucha ponien su crit rios pa equipo por donde El pre Primeras voces (mitos)
Al llegar los ibéricos a América, en esta parte del mundo vivía una heterogeneidad de aborígenes en diversos estadios de desarrollo. Los más atrasados, La ciudad sagrada generalmente. habitaban las Antillas y hacia las costas atlánticas. Eso estaba El tiempo motivado por las características del poblamiento de nuestra América, que se puede Wirococha, que había ahuyentado las sintetizar de la siguiente manera: como en este continente no hubo evolución en la tinieblas ordenó al sol que enviara una hija y El tiempo de los mayas nació y tuvo línea homénida, los seres humanos se introdujeron en el mediante sucesivas un hijo a la tierra, para iluminar a los ciegos el nombre cuando no existía el cielo ni había camino.
despertado todavía la tierra.
oleadas inmigratorias que tuvieron lugar a los largo de cientos de siglos.
Los hijos del sol llegaron a las orillas del Los días partieron del oriente y se echaron La primera sucedió en una época remota, cuando el estrecho de Behring era lago Titicaca y emprendieron el viaje por las a caminar.
tierra firme a causa de la gran congelación existente. través de esa provisional quebradas de la cordillera. Traían un bastón, El primer día sacó de sus entrañas al cielo franja cruzaron primitivos individuos que iban en busca de sitios de subsistencia En el lugar donde se hundiera del primer y a la tierra.
desconocidos.
golpe, fundarían el nuevo reino. Desde el El segundo día hizo la escalera trono, actuarían como su padre, que da luz, la baja la lluvia.
Después, durante miles de años, se esparcieron por todo el hemisferio en sus claridad y el calor, derrama lluvia y rocío, Obras del tercero fueron los ciclos de la constantes correrías sin rumbos, se encontraban en la baja Edad de Piedra, y eran empuja las cosechas, multiplica las manadas mar y de la tierra y la muchedumbre de las ignorantes por completo.
y no deja pasar día sin visitar el mundo, cosas.
Muchas decenas de centurias más tarde, nuevos inmigrantes llegaron a América Por todas partes intentaron clavar el Por la voluntad del cuarto día, la tierra y el bastón de oro. La tierra lo rebotaba y ellos cielo se inclinaron y pudieron encontrarse.
en frágiles embarcaciones, navegando de una a otra isla del archipiélago de las seguían buscando.
El quinto día decidió que todos trabajaran.
Aleutianas. Dichos hombres estaban ya en la media Edad de Piedra y, con un Escalaron cumbres y atravesaron Del sexto salió la primera luz.
conocimiento superior, expulsaron a sus predecesores de los lugares que les inter correntadas y mesetas. Todo lo que sus pies En los lugares donde no había nada, el esaba controlar.
tocaban, se iba transformando. Hacían fe.
sétimo día puso tierra.
Luego, a su vez, alguna generación de los descendientes de la segunda oleada cundas las tierras áridas, secaban los pan El octavo clavó en la tierra sus manos y sus fue desplazada o absorvida por una tercera corriente inmigratoria a través del tanos y devolvían los ríos a sus cauces. Al pies.
alba, los escoltaban las ocas, y los cóndores al El noveno día creó, los mundos inferiores.
Pacífico. Los recién llegados habían alcanzado ya un estadio equivalente al de la atardecer.
El décimo día destino los mundos inferiores a alta Edad Media, y en poco tiempo se escindieron en clases sociales e hicieron Por fin, junto al monte Wanakauri, los quienes tienen veneno en el alma.
brotar el Estado.
hijos del sol hundieron el bastón. Cuando la Dentro del sol, el undécimo día modeló la Por ello los aborígenes americanos de mayor desarrollo socioeconómico tierra lo tragó, un arcoiris se alzó en el cielo.
piedra y el árbol.
Entonces el primero de los incas dijo a su mayas, aztecas, quechuas se encontraban en los territorios del oeste, mientras que Fue el duodécimo quien hizo el viento.
hermana y mujer: Sopló viento y lo llamó espíritu, porque no los más primitivos estaban del otro lado. Fue ese panorama el que encontraron los. Convoquemos a la gente.
había muerte dentro de él.
europeos al iniciar la Conquista. De ese largo proceso, y sobre las peculiaridades Entre la cordillera y la punta, estaba el El décimotercer día mojó la tierra y con de las diferentes civilizaciones precolombinas, se habla en este libro.
valle cubierto de matorrales. Nadie tenía barro amasó un cuerpo como el nuestro.
casa. Las gentes vivían en agujeros y al abrigo Así se recuerda en Yucatán.
Tomado del Libro Memorias del fuego. La Habana, Casa de las Américas, 1988 de las rocas comiendo raíces, y no sabían tejer el algodón ni lana para defenderse del frío.
Todos los siguieron. Todos les creyeron.
Por los fulgores de las palabras y los ojos, Nadie se salvó. La serpiente rescató el todos supieron que los hijos del sol no estaban mintiendo, y los acompañaron hacia el lugar cuerpo de su padre y creció hacia arriba.
El amor Allá se ve, ondulante, erizada de flechas donde los esperaba, todavía no nacida, la gran ciudad del Cuzco.
luminosas, atravesando la noche.
En la selva amazónica, la primera mujer y el primer hombre se miraron con curiosidad.
Era raro lo que tenían entre las piernas. Te han cortado? preguntó el hombre. No dijo ella. Siempre he sido así.
El la examinó de cerca. Se rascó la cabeza.
La vía láctea Allí había una llaga abierta. Dijo. No comas yuca, ni plátanos, ni ninguna fruta que se raje al madurar. Yo te curaré.
El gusano, no más grande que un dedo Echate en la hamaca y descansa.
meñique, comía corazones de pájaros. Su Ella obededeció. Con paciencia tragó los padre era el mejor cazador del pueblo de los menjunjes de hierbas y se dejó aplicar las mosetenes.
Los colores pomadas y los ungüentos. Tenía que apretar El gusano crecía. Pronto tuvo el tamaño de los dientes para no reírse, cuando él le decía: un brazo. Cada vez exigía más corazones. El Eran blancas las plumas de los pájaros y No te preocupes.
cazador pasaba el día entero en la selva, blanca la piel de los animales.
El profeta El juego le gustaba, aunque ya empezaba matando para su hijo.
Azules son, ahora, los que se bañaron en a cansarse de vivir en ayunas y tendida en una Cuando la serpiente ya no cabía en la Echado en la estera, boca arriba, el sacerun lago donde no desemboca ningún río, ni hamaca. La memoria de las frutas le hacía choza, la selva se había vaciado de pájaros. El ningún río nacía. Rojos, los que se sumergie agua la boca.
dote jaguar de Yucatán escuchó el mensaje padre, flecha certera, le ofreció corazones de de los dioses. Ellos le hablaron a través del ron en el lado de la sangre derramada por un Una tarde, el hombre llegó corriendo a jaguar.
niño de la tribu kadiueu. Tienen el color de la través de la floresta. Daba saltos de euforia y tejado, montados a horcajadas sobre su casa, La serpiente devoraba y crecía. Ya no en un idioma que nadie más entendía.
tierra los que se revolcaron en el barro, y el de gritaba: había jaguares en la selva.
la ceniza los que buscaron calor en los fogo. Lo encontré!
Chilam Balam, el que era boca de los Quiero corazones humanos dijo la nes apagados. Verdes son los que frotaron sus dioses, recordó todavía lo que no había ocu. Lo encontré!
serpiente.
rrido. cuerpos en el follaje y blancos los que se Acababa de ver al mono curando a la El cazador dejó sin gente su aldea y a las quedaron quietos. Dispersados serán por el mundo las mona en la copa de un árbol.
comarcas vecinas, hasta que un día, en una aldea lejana, lo sorprendieron en la rama de. Es así dijo el hombre, aproximándose mujeres que cantan y los hombres a la mujer, y todos los que cantan. Nadie se librará, un árbol y lo mataron.
nadie se salvará. Mucha miseria habrá en los Cuando terminó el largo abrazo, un aroma Acosada por el hambre y la nostalgia, la espeso, de flores y frutas, invadió el aire. De años del imperio de la codicia. Los hombres, serpiente fue a buscarlo.
esclavos han de hacerse. Triste estará el rostro Enroscó su cuerpo en tomo a la aldea los cuerpos, que yacían juntos, se dedel sol. Se desplomará el mundo, se hará culpable, para que nadie pudiera escapar. Los sprendían vapores y fulgores jamás vistos, y hombres lanzaron todas sus flechas contra era tanta su hermosura que se morían de pequeño y humillado.
aquel anillo gigante que les había puesto sitio.
vergüenza los soles y los dioses.
Mientras tanto, la serpiente no cesaba de crecer.
Ma entren dia. El donde acumu De para e Escue la Un teó el fútbol donde más este do las esc zar de char.
tener NAFA dad se In pi que cantan EL comt do sa Carro 800I lóme fanti de o Gon Depo paro llos tro.
las atlet NE Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.