ADELANTB la Acción Insurreccional Contra Trujillo Manifiesto al Pueblo Dominicano del MOVIMIENTO DE LIBERACION, con motivo del comienzo de la lucha armada El Movimiento de Liberación Dominicana, culminación feliz de la labor unitaria realizada por la Unión Patriótica Dominicana, El Frente Unido Dominicano de Puerto Rico, el Frente Independiente Democrático Dominicano de Venezuela, el Frente Unido Dominicano de Nueva York y el Partido Socialista Popular Dominicano, ha iniciado una acción insurreccional para destruir la tirania de Trujillo y crear una régimen de democracia social, politica y económica en la epública Dominicana.
En armonia con esta realidad unitaria, la revolución que el Movimiento de Liberación Dominicana auspicia se propone respetar los inte.
reses de las clases sociales lesionadas por la tiranía, con tal de que sean legitimos y justos.
e instaurar un gobierno provisional revolucionario de naturaleza democrática que organice la vida de la República a la luz de los ideales ce jugticia que proclama la revolución y que laten por donde quieran en esta hora de grandes transformaciones universales.
das cuyas manos no estén manchadas por el ro.
bo y por el crimen.
No llaman, claro está, a los verdugos del pueblo, a los que han sembrado la desolación y el luto en las familias, a los ladrones y pervertidores de conciencias. La Revolución es obra del pueblo: en ella no caben los enemigos del pueblo.
El hecho responde a un viejo anhelo. Desde que se inició en 1930, la ignominiosa tiranía que oprime al pais, el pueblo dominicano no ha ee.
sado de luchar contra ella. Cerrada la via legal, esta lucha se expresó a través de repetidos brotes subversivos y de la resistencia civica. Razones de diversa indole impidieron que culminara en una victoria definitiva. Pero ella contribuyö a acentuar el espiritu de rebeldía popular, reafirmando en todos la conciencia del ideal revolucionario. Por eso, cada año han ido aumen tando las víctimas de la tirania, y ha sido mavor el número de exilados.
Es claro que la lucha contra la tiranía de Trujillo se extiende a sus raices. Nos proponemos, en consecuencia, iniciar en la República Dominicana una nueva era histórica sobre la base de la re estructuración de las normas juridicas, políticas y económicas hoy vigentes, y del resta blecimiento de los principios y las costumbres morales que Trujillo ha quebrantado. Los primeros pasos se encaminarán a reparar las iniquidades cometidas por la tiranía. Los criminales al servicio de Trujillo recibirán el justo castige. Se procederá a la confiscación de los bienes del tirano, sus familiares y acólitos, por ser producto de latrocinio sistemático de la riqueza pública y del despojo de la riqueza privada; las víctimas de estos despojos recibirán sus propiedades o indemnizaciones adecuadas, de acuerdo con el interés nacional.
Todos los países de América se hayan solidari.
zados con el movimiento en marcha. Muchos de ellos, alentados por el mismo afán democrático y renovador que hoy nos animan, liquidaron recientemente, con valentía admirable, sangrientos regímenes de opresión y construyen hoy en forma ejemplar un porvenir grandioso. Ellos nos tienden los brazos. En su seno generoso hemos encontrado y seguiremos encontrando el apoyo moral necesario para precipitar y asegurar el triunfo de nuestros propósitos. No estamos, pues, sclos en nuestra lucha. Nuestra América la con parte y ve en su culminación triunfal una victoria americana.
El movimiento iniciado traduce la voluntad dei pueblo. él se han unido hombres valerosos y dignos que pudieron quebrar el cerco estabecido por la tiranía. a medida que se vaya extendiendo, seguirán con seguridad las incorporaciones. la postre, englobará a todos los hombres puros del país, aptos para la lucha.
Se realizará una amplia reforma tributaria y el desarrollo de la economía será objeto de estimulo, de acuerdo con una planificación en armonia con las condiciones productivas del país.
Todas las clases sociales gozarán de libertad de organización y se reconocerá el derecho de huelga. Una vasta reforma agraria dará tierra y posi bilidades económicas a las familias campesinas carentes de propiedad agricola.
Nuestro movimiento responde a los postulados unitarios y democráticos de Bolivar, Luperón y Martí, enriquecidos por los aportes de las corrien tes más justicieras de la época. El propugna frente a la ya superada concepción de la Patria chica, la tesis de la confederación de nuestras nacionalidades, como exponente de la solidaridada que nace de su origen común, la similitud de sus problemas y la identidad de sus destinos.
Para el logro de estos altos fines el pueblo dominicano ha tomado las armas y con ellas lucha, fiel a la consigna de SER LIBRE MORIR. Con la cooperación de todos la tiranía será aplastada.
Para todos, la hora de la liberación ha llegado.
Pronto habrán de cesar las lágrimas nacidas de la explotación y el crimen. Quedarán atrás la espera interminable y las acciones subversivas infructuosas Doloroso es tener que recurrir a la violencia para cristalizar el noble empeño que nos anina.
Pero no queda otro camino. El régimen de T: jillo, nacido de la usurpación, creó para conso. idarse y mantenerse, un aparato terrorista de prcyecciones espantosas, nunca visto en América, y sobre su criminal eficacia se ha sostenido.
Ese régimen conculcó todas las libertades públicas, elevó la escoria de la sociedad a las más altas posiciones, transformó la República en un feudo personal, ahogó las manifestaciones de la cultura y sumió a la comunidad en la esclavitud. El no ha respetado jamás los tratados y las normas internacionales, ha utilizado el genocidio como método político y proyectó el terror Tuera de las fronteras del pais.
La realización de estos fines entrañará la trares formación integral de las condiciones de vida del pueblo; significará destruir una estructura poli tico social injusta y corrompida y levantar sobre sus ruinas una realidad nueva, estremecida de alientos justicieros: significará la superación definitiva del cesarismo trujillista y de la servidumbre en que han vivido bajo la tiranía las grandes masas campesinas y obreras; significará, en suma, colocar las bases para que el hombre dominicano pueda realizar libre de toda clase de coyundas, y para que la Patria se levante so.
bre su propia dignidad sin la menor mengua de su soberanía.
Ante el asombro y la cobardia del tirano, el pueblo dominicano, que conquistó a golpes de heroismo su Independencia y supo reconquistarla cada vez que fue despojado de ella, se ha lanzado, con valor y tesón inquebrantables, a la lu.
cha por su libertad y su bienestar. Por la voluntad de ese pueblo desaparecerán para siempre la humillación, el atropello, el robo, y el crimen de que ha sido víctima bajo la tiranía.
Florecerá de nuevo la cultura, y hermanada a la América democrática, la República Dominicana se encaminará hacia el cumplimiento de sus altos destinos.
NOVIMIENTO DE LIBERACION DOMINICANA Frente a él no cabe otro instrumento de lucha que el de la fuerza. ésta, pues, hemos recurrido, interpretando el llamado de nuestro pue blo.
Nunca vivió este pueblo una época de mayor.
vergüenza y martirio que la que se ha desenvuelto bajo la tétrica sombra de la tiranía de Trujillo. Los bienes de las familias fueron pasando, unos tras otros, por obra del dolor y del despojo, a la posesión del déspota. Todas las tierras fecundas del país están hoy de hecho en sus manos: suyas son las industrias más importantes: y el comercio, cuando no es suyo, tiene que compartir con él sus utilidades.
Ello explica que el pueblo se haya unificado en el afin pcr desiruirlo, y que esta unidad desemboque ho en la insurrección ya en desarrollo, garantizando su victoria definitiva.
Comité Central Ejecutivo Es obvio que el paso inicial y básico para la ejecución de tal obra es el triunfo de la insu rección ya iniciada. Diversoso focos insurrecionales se han establecido en distintas zonas del país, y en ellos luchan día y noche, con alto espí ritu de sacrificio, los soldados de la libertad y la justicia. Hijos de la entraña del pueblo llaman para que se incorpore a su lucha. Llaman a los hombres y mujeres dignos de todas las clases sociales; al campesino, al obrero urbano, a los profesionales, a los estudiantes, al comerciante, ai clero dominicano probo, al empleado público y privado y a los miembros de las Fuerzas ArmaDr. Juan Isidro Jiménez Grullón Dr. Luis Aquiles Mejía Cecilio Grillón Dr. Francisco Castellanos Dr. Francisco Canto can Comandante, Enrique Jiménez Moya Jefe del Ejército de Liberación Dominicana Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.