Carlos Luis FallasFootballMilitantes del PCCRStalinURSS

Apuntes Sobre mi Viaje a la NUEVA CHINA por CARLOS LUIS FALLAS UN DIA EN LA CIUDAD DE CHAN TCHUN: Esta ciudad, fundada en 1865, cuenta hoy con 840. 000 habitantes, dos universidades, tres institutos de enseñanza secundaria y tres institutos de investigación cientifica. Al Instituto de Geologia, con una magnífico edi ficio de bellísima arquitectura moderna china construido en 1953 55, concurren 347 estudiantes.
El desarrollo industrial de Chan Tchun se ha acelerado notablemente en los últimos años. Ahora existen alli 130 empresas importantes, muchas de ellas verdaderos gigantes de la industria. Estas últimas, las más poderosas, fueron organizadas todas después de la Libe.
ración.
Nosotros, esa mañana, aprovechando el automóvil en que acabábamos de trasladarnos de la estación ferroviaria al hotel, nos apresuramos a echarle un rápido vistazo a la ciudad. Recorrimos parte de la Avenida Stalin, dejamos atrás la hermosa Plaza del Pueblo y minutos después, internados ya en un barrio popular, nos detuvimos frente a una inmensa Guardería Infantil. En sus amplios patios interiores, muchos aparatos para entretención de la chiquillería, la que al vernos entrar corrió hacia nosotros en un torbellino de gritos y de alegres balbuceos. en los edificios, cocina, enfermería, salas de juego y comedores y dormitorios colectivos. Al retirarnos, centenares de risueños enanillos de ojos oblicuos nos acompañaron hasta la puerta de salida, y allí, bajo la dirección de sus cuidadoras y maestras, nos despidieron con una canción.
Por la tarde fuimos a visitar la gigantesca Fábrica de Camiones Nº 1, de Chan Tchun, cuya construcción se inició en 1953, en lo que antes fueran extensos campos de cereales. Es de verdad enorme, con 34 talleres inmensos, 28 secciones especiales y varios departamentos de administración. Maquinaria modernísima y técnica muy avanzada, con mucha automatización. Produce camiones de toneladas. 18. 000 obreros (16 por ciento de mujeres. de los cuales el 80 por ciento eran jóvenes con menos de treinta años de edad. Aunque a la fecha de nuestra visita (6 de octubre del 56) la fábrica estaba en ensayo todavía, ya pudimos ver allí centenares de hermosos camiones terminados y listos para entrar en acción. El Director nos dijo. Hemos construido esta fábrica con la fraternal ayuda soviética. Ahora colaboran aqui 80 especialistas soviéticos. Contamos, además, con quinientos técnicos chinos que hicieron sus cursos en la Unión Soviética. allá se están preparando otros muchos más. Todavia no hemos aprendido a trabajar bien ni a administrar bien la fábrica; pero poco a poco, en el trabajo diario, vamos superando nuestras fallas. Actualmente, varias piezas tienen que ser elaboradas en otras fábricas; pero pronto las podremos fabricar aqui también. entoces, ya en su pleno rendimiento, esta fábrica, tal y como se ha planeado, producirá 30. 000 camiones por año.
En los alrededores se estaba terminando ya de levantar, para los obreros de la fábrica, toda una verdadera ciudad, bien urbanizada, con agua potable, luz eléctrica, sorvicio de autobuses, grandes edificios de apartamentos (8 yuanes mensuales cada apartamento. almacenes hospital, baños públicos, oficina de correo, guarderías infantiles, escuela primaria, etcétera. más de 11. 000 obreros de la fábrica estudiaban, en sus horas libres, en la Escuela Técnica y en la Escuela Cultural.
Ya de regreso, uno de mis compañeros comentó. Hum. Dentro de muy pocos años estos chinitos estarán compitiendo ventajosamente con los yanquis, en calidad y en cantidad de carros fabricados.
Por la noche, gran banquete de despedida. Vinos chinos y comida china, en un interminable desfile de exóticos platos, todos deliciosos y artísticamente presentados: aletas de tiburón, yemas de bambú, pato laqueado, huevos negros, camarones en miel, hongos, oloturias, aromáticas golosinas, etcétera. continuación música danzas, por la orquesta y los artistas de los estudios cinemetográficos de la ciudad. luego baile general, en el que obligadamente tuvimos que participar to dos los visitantes extranjeros.
EN MUKDEN SUS ALREDEDORES: Según una vieja leyenda, esta ciudad, cuya área es de 680 kilómetros cuadrados, tiene 100 años de existencia.
Cuando fue liberada, en noviembre de 1948, tenía millón 300 mil habitantes. Actualmente su población asciende a dos millones ochenta mil habitantes. Es un importante centro industrial, con 342 fábricas y 300 mil obreros. Cuenta con 10 universidades e institutos técnicos (de Medicina, de Pedagogía, de Arte, de Música, de Agrotécnica, de Economía, etcétera. 22 escuelas secundarias técnicas y 46 escuelas secundarias comunes. con 174 grandes edificios viviendas, donde se alojan 26. 000 obreros y sus familias.
Nuestro tren llegó a Mukden a las dos de la tarde.
Nosotros, los costarricenses, salimos del hotel poco después, en compañía de Confucio y de un alto funcionario local, a pasear en automóvil por los pintorescos alrededores de la ciudad. Asi tropezamos con el inmenso Instituto Politécnico del Nordeste, parte del cual todavia estaba en construcción. Terminados y en uso, hermosos edificios, ocupados por otras y tantas facultades; y varios edificios viviendas, para profesores y estudiantes. bellos parques e inmensos campos de deporte, con canchas para tennis, basquet, bolybol, fútbol, etcétera, poblados a esas horas por una Júbilosa multitud de jóvenes de ambos sexos. Allí vivían y trabajaban ya 000 profesores y maestros, con 000 alumnos que, al completarse el Instituto, ascenderían a 10. 000.
Continuamos nuestro vagabundeo. y ya oscureciendo llegamos a la zona de Pelin. o de Los Paisajes. como la llaman las habitantes de la ciudad, un maravilloso sitio de ensueño, de aromas y silencio. Allí le echamos una ojeada a la Tumba del Emperador cuya imponente arquitectura apenas pudimos adivinar entre las sombras con sus dormidos bosques de cipreses y con su larga avenida poblada de inmensos monstruos de piedra. en sus románticos alrededores, por la orilla de los lagos y entre la oscuridad de las arboledas, multitud de silenciosas parejas de enamorados que ya regresaban en busca de sus autobuses.
Nosotros regresamos también y, antes de llegar al hotel, dimos una vuelta y cruzamos todo el iluminado y concurrido centro comercial de la ciudad. CONTINUARA)
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