KaganóvichManuel MoraSocialismSocialist PartyURSS

0 EN LA NUEI MORA VALVERDE concepciones erróneas.
Eran sectarios y dogmáticos.
CONSIDERACIONES AL MARGEN: Así por mente con los países capitalistas; que la Unión Soviética debía mantener y ampliar su política militar aún a riesgo de que estallara la guerra; que debía mantenerse una ingerencia efectiva en la vida interna de los otros países socialistas; que era necesario mantener la centralización fé rrea del Estado multinacional soviético; que ni habia llegado el momento, por razones de seguridad, de ir a la legali.
dad socialista que proclamaba la mayoría. Pero lo grave no consintió en que siguieran pensando de esa manera, sino que usaran las altas posiciones que tenían para sabotear la política trazada por el Congreso del Partido.
ejemplo. según lo ha informado el Comité Central Soviético a la prensa mundial Molotov se opuso al mejoramiento de las relaciones de la URSS con Yugoeslavia; obstaculizó la firma del tratado de paz con Austria; y trató de impedir que se normalizaran las relaciones con el Japón.
Se pronunció contra el establecimiento de contactos personales entre los Jefes de los Gobiernos de las grandes potencias; y no estuvo de acuerdo nunca en los pasos que se daban para superar todos los obstáculos que impedían un buen entendimiento entre la URSS y los Estados Unidos.
Kaganovitch y Malenkov estuvieron siempre identificados con esos puntos de vista. se informa que Shepilov se adhirió luego al grupo. Tal fue el problema que encaró y resolvió el Comité Central en la forma explicada atrás.
Tomo de un periódico de México una frase que en mi concepto sintetiza el enjuiciamiento hecho por el Partide Soviético de la actitud de Molotov y su grupo: En gene.
ral, los miembros del grupo eran prisioneros de muchas Ni la política de la Unión Soviética, ni la de ninguna de las grandes potencias capitalistas, puede ni debe juzgarse con criterio personalista si es que se pretende que el juicio sea acertado.
La tesis de Carlyle, según la cual la Historia es obra de los grandes hombres, carece de valor científico. La verdad es lo contrario: que los grandes hombres son obra de la Historia. La Historia tiene sus leyes, como todo en la Naturaleza, y los hombres somos parte de la Naturaleza y no podemos darle leyes a ésta.
El mejor político no es el hombre que sea capaz de inventar las fórmulas económicas y sociales más atractivas para la gente ignorante, sino aquel que, conocedor de las leyes sociales que son leyes naturales, sea capaz de entender en qué dirección debe y puede caminar su país en cada momento histórico y con qué velocidad.
Cuando un Partido se dirige colectivamente, como e!
soviético, lo acertado es aceptar que la razón está en la mayoría. El cerebro humano es susceptible de envejecer de enfermarse o de funcionar mal por razones de cualquier otra indole. Por eso debe merecer más confianza el criterio de un conjunto de personas que han estudiado y deliberado que el criterio minoritario de una o dos personas.
lo que ahora va a ponerse a prueba es la línea que ha triunfado en el Comité Central Soviético y no los méritos personales de ninguno de los dirigentes que han intervenido en el debate.
MANUEL MORA Luis Jiménez de Asúa Opina Sobre el Caso de Hungría La revista Vistazo. de Santiago de Chile, ha publicado recientemente unas declaraciones del eminente jurista español, profesor don Luis Jimé.
nez de Asúa, destacdo dirigente de Partido Socialista Obrero Español, ex diputados de las Cortes y ex embajador del Gobierno de la República Española. doctor Honoris Causa de la Universidad de Costa Rica. en dichas declaraciones, después de referirse a problemas relacionados con su disciplina intelectual, expresc también su opinión sobre los acontecimientos de Hungria, en los térmi.
nos siguientes. Cuando se inició la llamada insurrección húngara, los estudiantes y obreros exigían con justicia, mejores condiciones de vida y que los es!
fuerzos de los gobernantes volcados en la formación de una fuerte in.
dustria pesada, había descuidado el otro aspecto, fundamental para la marcha de la sociedad. Pero esta justa petición inicial fue aprovechada, a mi juicio, posteriormente, por lo más representativo de la reacción húngara, aún no desaparecida en el régimen socialista.
El movimiento de carácter eco nómico, jamás fue, en su origenes.
anti socialista. Pero, no hay que olvidar que los países más reaccionarios antes de la guerra, fueron Hun.
gría y Polonia. Si le sumamos la descarada intervención foránea (léa.
se Radio Europa Libre, los centena.
res de millones que el Congreso de los Estados Unidos aprueban anualmente en su presupuesto para Ayu dar a los países esclavizados de la Furopa Central. podemos colegir la dimensión de una intervención aumentada por la prensa a través del mundo.
Tengo experiencia de nuestra España. Hablan de libertad de pren.
sa. Yo pregunto: qué libertad puede haber, si todas las agencias noticiosas pertenecen a los intereses financieros de los Estados Unidos, que justamente son los que agitan estas intervenciones armadas? Nos.
otros conocimos muy bien esta li( Pasa a la Pág. 62. Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.