Communism

18 sabios atomistas alemanes lanzan grito de alarma Un nuevo grito de alarma, una che va advertencia, ha sido lanzada poi dieciocho sabios atomistas alemanas, cuatro de los cuales han recibido e Premio Nobel. Sus nombre vienen. agregarse a la lista, larga ya, de los investigadores, de los que saben y que han puesto en guardia a los pueblos y a los gobiernos contra las experiencias de las armas nucleares y contra las amenazadoras consecuencias tendría lugar el empleo de tales armas.
Los hombres de ciencia alemanes se inquietan por la suerte que pueden correr su patria y el mundo entero. Por ello alertan a la opinión pública. Su advertencia cobija un territorio mucho más vasto que el contenido dentro de las fronteras de la República Federal Alemana. Como Einstein, como Jolot Curie, como Bertrand Russell, como tantos otros, han asumido su responsabilidad de sabios, oponiéndose a que, contra su voluntad, el resultado de largos años de investiga ción, desviado de su objetivo inicial y despojado de su espíritu de progreso sirva ahora, a la destrucción en masa HE AQUI EL TEXTO. DE LA DECLARACION DE LO SABIOS ATOMISTAS acarrea una grave responsabilidad, dadas las posibles consecuencias de nuestras investigaciones. He ahí la razón por la cual. enfrentados a tales problemas políticos, no podemos guardar silencio. Los planes para equiparar a la Bundeswehr ejéreito de la República Feneral lemana con armas ató.
micas, suscitan graves preocupaciones a los sabios atomistas signatarios. Hace algunos meses, algunos de ellos dieron a conocer sus temores a los ministros federales competentes. Hoy se desarrolla un debate público. Por lo que toca a los firmantes, todos ellos sienten la obligación de subrayar ciertos hechos, conocidos por los especialistas, pero sobre los cuales la opinión pública no parece haber sido suficientemente informada.
Nuestra profesión es la libertad, representada hoy por el mundo libre contra el comunismo. No negamos que, de una y otra parte, el temor a las bombas de hidrógeno es actualmente una garantía esencial para la paz en el mundo entero. No obstante, ese método para asegurar la paz y la libertad no nos parece suficientemente seguro ni durable, Los peligros derivados de su fracaso serias mortales.
En primer término: la armas atómicas tácticas tienen un poder destructivo comparable al de las bombas atómicas normales. Esas armas reciben el nombre de tácticas para demostrar que no deben ser empleadas solamente contra las aglomeraciones civiles, sino también contra tropas comprometidas en un combate terrestre.
Cada bomba u obús atómico táctico posee un poder destructor comparable al de la primera bomba que destruyó a Hiroshima. Como actualmente existe un número mucho mayor de armas atómicas tácticas, su poder destructivo es proporcionalmente más grande. Tales bombas son denominadas pequeñas en comparación con el poder destructivo de las bombas estratégicas. desarroladas entre tanto y, particularmente, las bombas de hidrógeno.
No somos competentes para hacer proposiciones concretas a las grandes potencias. nuestro entender, un pequeño país como la República Federal Alemana podrá garantizar mejor su propia seguridad y servir la paz mundial, renunciando solemne y libremente a las armas atómicas de toda especie. Por lo que hace a los signatarios, ninguno de ellos participará en forma alguna en la construcción, experimentación o empleo de las armas atómicas.
Al mismo tiempo, insistimos en la necesidad de preseguir las experiencias conducentes a la utilización pacifica de la energía atómica, objetivo que continuaremos sirviendo, como en el pasado.
Los firmantes: En segundo término: la capacidad de aumento en el poder destructivo de las armas atómicas estratégicas no tiene ningún límite natural. Una bomba atómica táctica puede destruir hoy totalmente, una ciudad de tipo medio. Una bomba de hidrógeno puede hacer inhabitable por cierto tiempo una región tan extensa como el Ruhr.
En la etapa actual, la radiactividad de las bombas de hidrógeno podría destrair a la población entera de la República Federal Alemana. En la actualidad, no conocemos ningún medio técnico de proteger a las poblaciones contra tal peligro.
Sres. Profesores Sabemos que en la actualidad es muy difícil sacar las cenelusiones políticas de tales hechos. Nuestra competencia será discutida, si se tiene en cuenta el hecho de que no somos políticos. Nuestra actividad, nos permite eumunicar nuestros conocimientos a muchos jóvenes y nos Fritz BOPP, Universidad de Munich, Max BORN, Premio Nóbel 1954; Rudolf FLEISCHMAN, Universidad de Hamburgo; Walter GERLACH, Universidad de Munich; Otto HAHN, Premio Nóbel 1954, Presidente del Instituto Max Planck, Universidad de Gotinga; Otto HAXEL, Universidad de Heidelberg; Werner HEISENBERG, Premio Nóbel 1932, Universidad de Gotinga; Hans KOFFERMAN, Universidad de Heildelberg; Max von LAUE, Premio Nobel 1914, Director del Instituto Fritz Herber; Hans MAIER LEIBNITZ, Universidad de Munich; Josef MATTAUCH, Universidad de Mayenza; Friedrich Adolf PANETH, Universidad de Mayenza; Wolfgang PAUL, Universidad de Bonn; Fritz STRASSMANN, Universidad de Mayenza; Wilhelm WALCHER, Universidad de Marburgo; von WEIZSACHER, Universidad de Gotinga; Kar! WIRTZ, Universidad de Gotinga.
página CUATRO Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.