Marchena reconoce su culpabilidad Confiesa que por haberse dejado impresionar por los personeros del Gobierno, ordenó que se le pusiera fin a la huelga.
Aclara que la FOBA acordo rechazar el arreglo y que él violó ese acuerdo.
Considera que no debe seguir en la dirección de la FOBA y llama a los trabajadores a mantenerse firmes en esta organización MANIFIESTO LOS TRABAJADORES BANANEROS Después de la terminación de la huelga de Puerto González, no me siento digno de seguir al frente de un movimiento tan puro y combativo como el de los bananeros.
Tengo que confesarles que por haberme dejado impresionar por los personeros del Gobierno, ordené cobardemente que se le pusiera fin a la huelga con ventajas tan miserables.
Después de lo ocurrido he examinado bien la cosa y no encuentro razón para haber procedido así, pues las amenazas de que fuimos objeto por parte del Ministro de Seguridad Pública y de Domingo García no sólo no justifican una actitud débil como la que asumi, sino que, por el contrario, debieron hacerme comprender que era indispensable redoblar nuestra combatividad.
Deseo aclarar que la Dirección de la FOBA acordó rechazar de plano el arreglo propuesto; que el compañero José Meléndez hizo todo lo posible para que yo acatara acuerdo y que los representantes legales de los trabajadores firmaron el el arreglo sin estar conformes, porque Brenes Castillo de la FETRABA y yo insistimos en que firmaran, ya que nos cerramos en que lo mejor era terminar el movimiento. Así también puse mi influencia para que los trabajadores ratificaran el arreglo y asi contrarié un acuerdo justo de la Dirección de la FOBA.
Por esta actitud mía, imperdot. able, no me siento moralmente digno de seguir al frente de la querida FOBA.
Sé que nuestros enemigos y la United Fruit Co tratarán de sacar tajada de esta declaración y buscarán los medios de infundirles desconfianza hacia el movimiento obrero. Yo espero que los compañeros se mantengan firmes y redoblen su lucha. Yo no hago en este caso, más que confesar, con toda sinceridad, una terrible realidad en un error que puede ser reparado por ustedes mismos manteniéndose siempre unidos.
No obstante lo dicho, quiero dejar claro que soy incapaz de traicionarlos premeditadamente, y que como he dicho, se trata de que actué con demasiada vanidad y personalismo y con exceso de cobardía frente a las amenazas y maquinaciones de los personeros del Gobierno.
Creo que yo debo permanecer alejado de la dirección del trabajo sindical durante un largo tiempo en el cual me empeñaré en poner de manifiesto mi lealtad a la clase obrera y mi disciplina para volver a ganar la confianza de los trabajdores, y si después de ese período ustedes consideran que en algo les sea útil, ahí me encontrarán.
Pienso que confesando públicamente a ustedes mi falta, hago mejor que callándola.
Ruego a todos los compañeros que me perdonen y les pido que sigan unidos hasta el fin. los compañeros de la División de Golfito les pido que no firmen el convenio de González que tan afanosamente andan buscando los mandadores que firmen y que es mejor que se dispongan a plantear el conflicto, con lo cual lograrán mejores ventajas.
Mi trabajo, mi conducta y los hechos dirán si algún día puedo tener el mérito de luchar nuevamente al frente de ustedes. para terminar esta declaración que con todo dolor hago a mis queridos compañeros, pero que es de mi obligación, quiero recomendarles que se mantengan firmes en la FOBA, que es la única organización obrera auténtica, y que la experiencia vivida ahora sirva para que su filas se refuercen.
Después de mi error mi mayor alegría será cuando la FOBA, agrupando a todos los bananeros, haya concertado la convención colectiva le trabajo con la United, de que tanto hemos hablado.
De los compañeros atentamente, ISAIAS MARCHENA MORAGA Golfito, octubre de 1955 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.