CommunismStrike

San José de Setiembre de 1954 ADELANTE a Bananera del Atlántico las charcas y los peones son tan hijos de la naturaleza como los sapos. Son los comunistas los que turban con sus odios y con sus prédicas absurdas esas vidas.
proletaria Organización y Fruit Co. La prensa burguesa huelga Honor a los caídos y necen luchando.
LA PRENSA BURGUESA LA HUELGA ATLANTICA No obstante la furiosa campaña de la burguesia roaccionaria contra los huelguistas, la Prensa de aquella época reflejó en alguna medida la justeza de la misma y el sentimiento de respaldo del pueblo costarricense.
En editorial de DIARIO DE COSTA RICA Se dijo. Reconozcamos desde el primer momento la justicia de las demandas de los trabajadores. Cabe aquí una vez más nuestra repetida diatriba cuando el capitalista cuya sordidez y cuya avaricia hace más el favor del comunismo que veinte discursos del líder Mora.
embarcan el banano y sin cuyo trabajo no podría hacer el fabuloso negocio que hace.
En la prensa de aquellos días viene una descripción de la vida en los bananales de la United, que revelan condiciones de explotación más salvajes que las actuales y que fueron vencidas en parte gracias a los movimientos que culminaron con la Huelga del Atlántico.
Los modernos siervos de la United, dice un periódico, no reciben pago en dinero efectivo sino en vales u órdenes sin circulación general. Tienen que comprar de sus propios recursos las herramientas de trabajo.
Las jornadas de trabajo son indefinidas y el trabajador no goza de ninguna protección: ni médica, ni indemnización cuando se accidenta. Se les paga cuando la United quiera, a veces por quincena, a veces por mes. Se les obliga a comprar en determinados comisariatos, pues los vales u órdenes sólo en esos comisariatos pueden ser cambiados. Arbitrariamente la Unstea les deja el sueldo de una o más quincenas a fondo; es decir, no paga y deja guardado el dinero. Los trabajadores viven amontonados unos sobre otros en estrechos e insalubres campamentos. un grupo de trabajadores huelguistas les dijeron unos finqueros: LA PRENSA LIBRE DIJO. Otros hombres nos llevan a que veamos los ranchos en que viven unos ochenta hombres, algunos con familia. Para quienes vivimos en San José y por pocas que sean las comodidades, aquello es horroroso.
Formoso, periodista reaccionario, informó entonces. Vimos también, tirado en una dura tarima, a un hombre de regular edad, atacado de calenturas, quien, según nos dijeron, lleva largo tiempo en aquella triste situación. En todos estos trabajadores hay un espíritu de combate y una energia que sólo se concibe conversando con ellos. Tenemos hambre nos dicen pero no habrán de reducirnos por eso. Vivimos en tan malísimas condiciones que es preferible que nos entierren entre estos fangales en los cuales poco a poco vamos dejando nuestra salud.
LAS CONQUISTAS DE LA HUELGA BANANERA De ahora en adelante tendremos buen cuidado de no permitir que pose sus plantas en nuestros feudos un solo comunista. Es hora ya de que se restablezca la tranquilidad en esta zona; de que vuelva a ser una realidad la armonía entre trabajadores y patrono. Esa armonía se ha roto por causa de la agitación comunista. Qué los sdlarios no suben de tres colones al día. Qué el arroz se vende a 0, 50 la libra en nuestro comisariato y la manteca a un colón. Qué paga con cupones y no garantizamos hospital a los peones. Qué el clima es mortífero y las condiciones de trabajo bárbaras? Eso no tiene nada de particular. El peón ya está acostumbrado a vivir esa vida. Está hecho a ese ambiente. Sabe ayunar, sabe sudar calenturas entre los suampos, sabe dormir a la intemperie, sabe morirse entre los ranchos pajizos. Para todo eso ha hecho su aprendizaje y está capacitado para vivir en armonia con sus patronos. Los sapes viven entre mos Todas las maniobras de la United y la presión de la policía y del gobierno se estrellaron con la unidad y la decisión de los trabajadores. El 28 de agosto de 1934 se firmó un pacto que como dijimos antes la United se resistió a acatar. En ese pacto quedaron especita cados los triunfos que podemos resumir de la siguientes.
manera: Antes de la huelga los trabajadores ganaban en labores ordinarias cuatro colones por ocho horas de trabajo. El pacto estableció cuatro colones veinte por seig horas.
En el trabajo de hacha ganaban cuatro ancheta.
Se conquistó un salario de siete colones.
En chapias de cinco meses se ganaban 12 colon.
Se obtuvo 16. Pasa a la pág, 60, Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.