San Jose, 24 de Enero de 1954 ADELANTE Encuentro Internacional de la Juventud Rural Ha sido convocado por jóvenes del Delta del Po, Italia San José, 10 de enero de 1954.
Señor Director de ADELANTE Estimano señor Director. Por el Encuentro Internacional de la Juventud Rural. LLAMAMIENTO TODA LA JUVENTUD DEL MUNDO un vemos La Juventud Democrática de Costa Rica recientemente recibió de las organizaciones juveniles italianas llamamiento formulado por la Asamblea Rural de San Alberto de Ráve na, para intercambiar experiencias y formular frentes de lucha por el mejoramiento de la juventud mun.
dial.
Considerando que este llamamiento tiene enorme importancia, especial mente para los jóvenes del campo de Costa Rica, nos permitimos enviarle una copia del mismo, con la esperanza de que sea publicada en su diario.
Agradeciendo altamente la atención que preste a la presente nos suscribimos de usted muy atentos servidores, Omar Brenes Acuña Secretario de la Juventuc Democráuc.
Nosotros, muchachos y muchachas, jornaleros, aparceros, hijos de pequenos propietarios, estudiantes y obreros de todos los movimientos políticos y religiosos, que vivimos y trabajamos en la Región del Delta del Po, San Alberto de Rávena, nos obligados a vivir en duras condiciones, sumidas en una explotación inhumana, ofendlios en nuestra propia dignidad de jóvenes trabajadores, desprovistos muchas veces de toda posibilidad de aprender a leer y escribir, de hacer deportes y tener descanso.
La tierra en que vivimos, en lugar de darnos trabajo, bienestar y felicidad, es bien a menudo una fuente de amargura, de miseria y de desocupación Nosotros, que estamos ligados a la tierra que trabajaron nuestros antepasados, queremos condiciones de vida más humanas, que se asegure un mínimo de trabajo y la posiblidad de aprender un oficio, queremos tra bajar con los medios técnicos que la ciencia pone a nuestra disposición, distraernos, hacer deportes, alcanzar un cierto grado de cultura, en una palabra, tener trabajo asegurado y un porvenir feliz!
Por la radio y la prensa hemos sabido que tales son también los problemas de los jóvenes del campo de otros muchos países, desde el Brasil hasta Francia, desde Holanda hasta la India, desde Argentina al Africa; sus sufrimientos y esperanzas son las mismas que las nuestras, su lucha es también nuestra lucha. Unidos se remos más fuertes; unidos con toda la juventud, jóvenes del campo del mundo entero, podremos edificar la vida hermosa que todos deseamos. Pasa a la Pág. EL TALLER tusiasta de Petates a quien Camorra en su oportunidad le correspondía de la misma manera. Pero ese día le tocaba a Goliat ser el blanco de las cuartetas y chisles de los dos graciosos. Los demás reian alegremente y se aprovechaban para terciar de cuando en cuando, con bromas subidas de tono. Goliat, que no estaba para fiestas, disimulaba su malestar fingiendo reir también a cada pulla de esas, con gestos forzados que más tenían de muecas que de risas.
Algunas veces, los zapateros habilidosamente lo graban provocar prolongados y terribles pugilatos de dimes y diretes entre Camorra y Petates. En tales ocasiones el duelo resultaba enconadigimo, pues ambos procuraban siempre superarse en ingenio y mordacidad. Se arrancaban el pellejo; decíanse las cosas más absurdas y disparatadas; se exageraban y ridiculiza.
ban, sin piedad alguna, los defectos físicos y morales; y sacaban a relucir, deformándolos, hechos ciertos y un tanto vergonzosos de la vida de ambos. Hasta las respectivas parentelas, sin respetar ni a sus progenitores, iban apareciendo poco a poco en las malignas cuartetas, cuando ya se caldeaba mucho el ambiente.
Todo el personal del taller tomaba parte en el pugilato. Unos, aplaudiendo y azuzando a Camorra; los otros, a Petates. Hasta los viejos más serios seguian con atención la pugna, e intervenían de vez en cuando. como jueces, criticando en voz alta las groserias exageradas o calificando la calidad de tal o cual cuarteta. Muy mala, Camorra! interrumpía de pronto don Pocho No tiene ninguna gracia: es puro insulto. Eso no es cuarteta! al poco rato. Muy bien, muy bien. Esa es cuarteta. Esa si que tiene chispa!
Durante esos prolongados torneos, el rendimiento del trabajo de todos y cada uno de los operarios disminuía, con la consiguiente disminución del salario que podían ganar. Los que más tiempo perdían eran los dos rivales, que mientras simulaban majar suela o recortar un avío, realmente tenían su atención pendiente de la cuarteta del otro y estaban rumiando una rápida contestación. Terminaban de zaherirse cuando el patrón, que también había estado azuzándolos y divirtiéndose con ellos, los llamaba al orden y exigia a todos que trabajaran de verdad.
Pero esas pugnas entre los dos muchachos eran raras. Generalmente ocupaban su ingenio en elaborar chistes perversos para mortificar a los demás. Petates gustábale mucho, también, provocar apuestas extravagantes, siempre con la intención de tomarle el pelo a alguno. con frecuencia su víctima resultaba ser etin, un operario muy joven todavía, pequeñito, especializado en calzado infantil; porque Betín, que era cor to de entendederas y terco como una mula, estaba em recinado en ganarle alguna vez.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.