2 ADELANTE San José, 15 de Noviembre de 1953 El engaño de las las torturas y atrocidades de los prisioneros en Corea del del Norte Durante la semana próxima pasada las agencias noticiosas internacionales le han dado una importancia primordial a las llamadas atrocidades cometidas por los chinos y norcoreanos con los prisioneros de gueTra. y al hecho de que Mr. Cabot Lodge ha pedido una investigación de las Naciones Unidas sobre las denuncias preparadas de antemano. Para que los lectores de ADELANTE se formen una idea del engaño tramado con las torturas a los prisioneros y de los objeti.
vos que el Departamento de Estado norteamericano persigue con estos escándalos periodísticos, reproducimos a continuación parte de un interesante artículo de un famoso comentarista internacional: Dejando a un lado todo cuanto pudiera tener aunque fuese una relación remota con la verdad, algunos órganos de prensa de Hearst, de Scripps. Howard y demás empiezan a publicar bajo sensacionales titulares falsas noticias acerca de las ferocidades cometidas en los campos de Corea del Norte. Dos mil prisioneros de guerra norteamericanos muertos en el cautiverio. gime la revista United States News and World Report. Cinco mil prisioneros de guerra ilevados a la muerte. sollosa el gritón periódico de Hearst New York Journal. American. Sin saber a cuál de estas cifras fantásticas dar preferencia, el periódico de ScrippsHoward Naw World Telegram and Sun clama Los prisioneros de guerra yanquis han sido convertidos en esclavos por los rojos.
El mismo objetivo persigue también otra campaña de prensa, basada en la afirmación de que la parte coreo. china oculta a cierto número de prisioneros norteamericanos con el fin de retenerlos en sus manos.
El perfido carácter de esta absurda campaña es subrayado por la circunstancia que en ella, al lado de la prensa, toman parte algunos senadores y el Secretario de Estado, Dulles.
Un belicioso senador llamado McClellan ha exigido al punto que se retenga a la mitad de los prisioneros coreanos y chinos hasta que los rojos nos rindan cuentas del número total de prisioneros norteamericanos en su poder. Pero se sabe que estos fueron presentados ya hace mucho tiempo por la parte coreo. china.
El Secretario de Estado, Dulles, ha creído oportuno, a su vez, amenazar en una conferencia de prensa con la reanudación de las operaciones militares en Corea fundándose valga la palabra en que los norcoreanos posiblemente. traten de retener a los prisioneros de las Naciones Unidas. De dónde emana tal posibilidad, continúa siendo un secreto.
Así, con la participación activa de los círculos gobernantes norteamericanos, se forja a toda prisa la malvada leyenda de la existencia de muchos centenares de norteamericanos supuestamente retenidos en Corea del Norte. Los provocadores persiguen objetivos de largo alcance. La ogencia United Press comunica ya que los Estados Unidos quizá llamen a la ONU a acusar a los comunistas de infringir el armisticio, si no devuelven a todos los prisioneros.
Después de fracasar en sus tentativas de frustrar el armisticio en Corea, los enemigos de la paz llevan ahora a cabo una nueva tentativa de socabar sus cimientos. Enajenados por la guerra caiiente. la fría o, en último caso, aunque no sea más que la psicológica. las esferas agresivas de los Estados Unidos no se detienen antoja mentira, la calumnia y el fraude en sa afán de envenenar las relaciones internacionales.
Los fines que persigue esta deliberada historia pueden ser conocidos leyendo los misnios periódicos norteamerica. os. El de agosto el paricco neoyorkino Daily News proponía que los Estados Unidos exigieran a la ONU que investigase municiosamente con ti da decisión esas ferociuades (in. Persuadido de que cualquier periodicucho yanqui tiene derecho a chanta jear a las Naciones Unidas, el Daily News amenaza con que los Estados Unidos saldrán de la ONU si oscurece esta cuestión. con prolongadas y corteses (i)
conversaciones.
No es difícil comprender lo que buscan los difama dores que propalan infundios de toda clase acerca de los campos de prisioneros de Corea del Norte. Quieren desviar la atención de la opinión pública de los verdaderos casos de ultraje a los prisioneros en los campos norteamericanos, conocidos hoy por todo el mundo.
Quieren crear un nuevo pretexto para infringir el armisticio de Corea y seguir reteniendo a los prisioneros de guerra coreanos y chinos. En un plano más amplio, el criterio a cuenta de los imaginarios asesinatos de prisioneros en Corea del Norte tiene por objeto impedir el atenuamiento de la tención internacional, consecuencia del cese de las operaciones militares en Corea.
por el contrarlo, el aspecto saludable de los prisioner de guerra llegados de Corea del Norte, como han pou do observar los corresponsales extranjeros presentes en canje, evidencia que los prisioneros habían estado en el diciones adecuadas.
Uno de los tativos norteamericanos más importantes, el New York Herald Tribune. se ha visto obligado a reconocer el buen estado de salud de los prisioneros de guerra liberados por la parte coreo china. Al reconocer a los prisioneros de guerra, los médicos declaran que se halian en buena salud y son una prueba de cu aado racional y de atención por parte dei personal médico. recalca el periódico australiano Sye ney Morning Herald.
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