San José, 23 de Agosto de 1953. DELANTE EDITORIAL Que propongan los señores Orlich, Oduber y Masís, una verdadera solución al problema agrario del del Pacífico Que las tierras no cultivadas por la United sean expropiadas y distribuidas gratuitamente El figuerismo ha nombrado diversas comisiones para el estadio de los problemas, nacionales.
Sobre la base de los informes de estas comisiones prentende formular el plan integral de gobierno de Figueres. El la campaña electoral Figueres esbozć una serie de puntos programáticos de manera vaga. Ahora se trata de concretar.
Situadas las cosas en este terreno, el plan integral de gobierno de Figueres es algo así como una quimera, algo hipotético. Sinembargo, más que las comisiones encargadas del estudio de los problemas, serán las masas populares las que digan la último palabra en torno a cada problema nacional. Aquí como en todas partes, es el pueblo, con su actitud vigilante y combativa, quien resuelve si tal o cual problema se resuelve conforme a sus intereses, con arreglo a los intereses nacionales, o conforme con los intereses de las clases retardatarias y con arreglo a inconfesables intereses de las compañías extranjeras.
Tlenemos a la vista un ejemplo de actualidad. Una de las comisiones de marras, integrada por don Francisco Orlich, don Bruce Masis y don Daniel Oduber, visitó en estos días la zona bananera del Pacífico. Dicha comisión todavía no ha formulado su informe, pero el señor Orlich adelantó a los periodistas algunas ideas sobre el mismo.
Sin concretar nada. don Francisco Orlich dijo que habían estudiado sobre el terreno el proble na de la población civil de Golfito para el cual tenían pensadas ya dos soluciones, una transitoria, y la otra definitiva. No dice el señor Orlich en que consiste cada una de estas soluciones. Nosotros, que medio conocemos el proble ma, queremos decirle a los miembros de la Comisión que el citado problema tiene una solución muy sencilla, semejante al huevo de colón. Todo consiste en que el Estado haga uso de sus poderes soberanos, expropie a la United los terrenos que necesite para ubicar la población civil del puerto, y luego encargue a ingenieros la formulación de los planos. Lo demás consiste en repartir los lotes en que se van a construir las casas de los habitantes de la población.
El señor Orlich también hizo alusión al problema de los servicios sociales de la región bananera. propósito expresó la idea de que tales servicios debían pasar a manos del Estado. Entendemos nosotros que se refiere este señor al caso de los servicios hospitalarios y de la atención médica, servicios que son prestados en hospitales de la compañía y por médicos pagados por la compañía. Naturalmente, son los trabajadores los que en definitiva los costean, pues la United les descuenta de sus salarios un tanto por ciento para sufragar esos gastos.
Durante mucho tiempo los sindicatos independientes, antes afiliados a la y hoy a la han planteado la demanda de que se extiendan los servicios de la Caja del Seguro Social a la zona bananera. La United ha alegado que los servicios que ella presta en sus hospitales y dispensarios son superiores a los que presta la Caja del Seguro Social. Natutalmente alle eso no es así. Los servicios que en la materia disfrutan los trabajadores bananeros son pésimos y todo el mundo sabe que cuando un trabajador se enferma seriamente, entonces todo lo que hace la compañía es mandarlo con una colilla al Hospital San Juan de Dios.
De manera que el problema de la atención médica en el Pacifico Sur, se resuelve de dos maneras: a) extendiendo los servicios del Seguro Social a los obreros bananeros y b) extendiendo la protección de la ley de accidentes de trabajo a los obreros agrícolas.
El señor Orlich habló a los periodistas también de hacer colonias agrícolas en la zona, al efecto de abaratar las subsistencias. Esta formulita nos huele mal. Pareciera que, en lugar de orientarse por el camino verdaderamente progresista de expropiar las tierras incultas y que da en arriendo la compañía, para distribuirlas entre campesinos pobres y jornaleros, piensan darle a los campesinos atolillo con el dedo promoviendo algunas de las llamadas colonias agricolas. las cuales no resuelven el proglema campesino, ni menos ponen término a la propiedad latifundaria de la tierra.
En el Pacífico, como en el Atlántico, hay centenares de miles de hectáreas de tierras pertenecientes a la United, que nunca han sido cultivadas, o que lo fueron y ahora están abandonadas (caso del Cantón de Aguirre) o que la compañía da en arriendo a agricultores costarricenses (caso también corriente en Aguirre y en la zona Atlántica. Este problema tiene una sola solución. La que le dió el Gobierno de Guatemala a un problema similar. Expropiar a la United tomando las tierras por su valor declarado en Tributación, y distribuirlas gratuitamente entre los campesinos y los jornaleros. En otras palabras, el problema de la tierra tiene ana misma solución en Costa Rica y en Guatemala: la Reforma Agraria.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.