ADELANTE San José, 28 de Febrero de 1953 EMPIRISMO OS.
CONTINUARE al frente diciones de la mayor explotación. Son (Vione de la Pág. PRIMERA)
Viene de la pág. gente combativa y dispuesta a defender sus derechos. Bstábamos trabajazdo en ción suspende la compra de granos. Los trabajadores del banano se dan la recogida de firmas para presentar a a los carnpesinos, alegando dife perfecta cuenta de que se trata de una la Compañía un conflicto colectivo de rentes razones, aunque se ha comde las muchas formas de represalia sintrabajo. Ya teníamos más de 000 firprobado que al amparo de esa susdical usadas por la Compañía con la com was. Es esta documentación, legal y aupensión de compras han interveni plicidad de las autoridades nacionales.
torizada por el Código de Trabajo vigendo los intermediarios o especu Pero las represalias no debilitan la cate. lo que se pretende sea propaganda ladores, haciendo el gran negocio. pacidad de lucha y de resistencia de los subversiva.
29 El Consejo tiene como téc trabajadores. Los trabajadores de la zo ¿Cuál es su disposición actual en nicos a una serie de muchachos que na bananera viven y trabajan en conrelación con la lucha sindical?
nada o muy poco conocen de los Seguir al frente de mi sindicato y diferentes aspectos de la produrción. Se ha dicho que se mantiede la Producción fue creado por de mi Federación, es decir, al frente de los trabajadores del banano, no imporne a esos muchachos en tales pues una ley presentada por los coniuta qué ocurra.
tos simplemenite porque pertene nistas cuando éstos teníar diputacen a la élite del partido figuerista. dos en el Congreso, Después de la. Qué le parece la solidaridad desSe ha mencionado en algunos co Guerra Civil de 1948, don José Fi. arrollada alrededor del conflicto?
rrillos un ejemplo muy eiscuente: gueres y su partido, desmemoria. Los trabajadores del banano agra.
el agricultor de San Isidro del Ge dos. anduvieron diciendo que el decen la solidaridad que se ha desarroneral, don Roberto Madrigai, su: Consejo era uno de los principales Nado a propósito de la represalia y los frió una pérdida de 45 mil colones frutos de la liberación y que ha atropellos que hemos sufrido, a nuesdebido al empirismo de los técni bia sido posible su constitución gra tros compañeros de la Zona Atlántiea, cos en ia siembra de café, que je cias a los desvelos y profundos es trabajadores del abaca, que entienden envió el Consejo de la Producción. tudios técnicos de don José. Aun muy bien el carácter de nuestra lucha, Este desbarajuste de la mercio que el pueblo sabía que csto era ya que están al servicio de la misma nada institución que como hemos mentira desde todos los puntos de Compañía, a los sindicatos de la Meseta dicho, ha sido denunciado en la vista, creyó que por lo menos el fi Central y de Puntarenas a todos nuesprensa. ha causado mucha indig guerismo conservaría el Consejo tros amigos. Como no sabemos aún el nación entre el pueblo, ya que el limpio de politiquería y de sucios remate de esta persecución, ya que el Consejo fue creado para arrancar manejos. Pero ahora viene a que compañero Meléndez continúa preso y a los campesinos pobres y medios dar claro, según las citadas denun yo estoy procesado, y en la zona contide las garras de los interniediarios, cias, que quienes se endosan dema núa un estado de inseguridad y de iny para impartirles dirección técni gógicamente la paternidad del Con timidación, estimo que la vigilancia del ca. Ambas funciones han sido des sejo, ni siquiera han sabido o que movimiento obrero debe reforzarse y esnaturalizadas.
rido defender esa conquista popu tar alerta para impedir nuevos atropeComo se recordará el Consejo lar. os.
SAN JOSE. PEKIN (Viene de la pág. 4)
El arte por el arte decía Eduardo es una tontería en un mundo que se transforma, que lucha, que sufre, ra hacer allí las conexiones rumbo a Madrid. Cuando Eduar.
y al que muy poco le pueden importar las penas íntimas del do oye que va para Madrid, se pone muy serio, y apenas, por artista, generalmente angustiado porque la novia lo descortesía, contesta con monosílabos las continuas preguntas deña.
de aquel muchachito enfermizo. Vamos también para Ams Déjeme decirle, estimado. El Greco.
terdam? En cuál hotel nos apearemos. Es viaje de vacaciones. De dónde somos. De Puerto Rico! Eduardo es Qué Greco ni que nada. Usted cree le preguntaba Eduardo apabullándolo, allí, sobre el Canada. que a un tá furioso.
trabajador, preocupado por su trabajo, por el alquiler de la Yo, a mi vez, lo interpelo. Resulta que sus padres, ha.
casa, por los hijos enfermos, por el patrón, por la comida, ciendo un sacrificio, lo mandan a España y a Italia para por el gobierno, por los preparativos de guerra que hacen que perfeccione su arte. Nos imaginamos entonces a los paen Estados Unidos, usted cree que a un trabajador así, le dres, dos ancianos, en La Habana, ahorrando, dejando de fumar y de ir al cine, para enviar a su hijo a Europa, a van a importar esas confidencias que nos hacen los artistas líricos sobre los besos que le dieron anoche a sus amaestudiar pintura, como un gusto, tal vez el último, que le das, a la luz de la luna; sobre sus esperanzas de darle otros darán a él, tan débil, tan enfermizo, tan pálido. entonla próxima noche a otra; sobre la tristeza que sienten porces, al oír aquella historia, que yo completo con imaginaque ella les negó una rosa, junto al estanque donde arquea ción, pintando a los viejitos de La Habaan, subrayando el aire de enfermedad del muchacho, Eduardo se conmueve su cuello el famoso cisne. No, amigo mío! Esas intimidacon bonachonería tica, y se muestra cordial con él. Incluso, des lúbricas, ese arte individual, intrascendente, ese fútil para hacerle agradable el rato, Eduardo se interesa, por arte por el arte, sencillamente está muerto para siempre.
momentos, con la pintura. Qué le parece si vamos a ver El pintor no se atreve a contradecir. El señor de atrás, a Rembrandt en Amsterdam. Qué opina de Murillo. de ya lavado, y al que yo, ahora sin la rencorosa saña de verPicasso. Lo sienta a su lado y es todo cordialidad con aquel me perturbado en mi complicadísimo sueño, no encuentro muchacho, al que uno se imagina metido ya en el ataúd. tan repugnante, está comiendo un banano con gula. Otelo, Pero resulta que al cabo, el muchacho se declara, in a quien lo tienen sin cuidado las cuestiones del arte, pen.
fectamente, partidario del arte por el arte, y Eduardo vol sando en sus francesas, anuncia muy contente: vió a calentarse.
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