ADELANTE 26 de Octubre de 1952.
Hacia el fascismo ha derivado el Gob. de Osorio Bajo el pretexto de frenar un golpe comunista ha desatado una ola de terror contra las fuerzas democráticas Los recientes acontecimientos ocurridos en Ei Salvador han venido a caracterizar al Gobierno del coronel Osorio como un régimen tipicamente fascista. Frente al creciente escenso de las fuerzas democráticas, ei Gobierno del coronel Osorio se encontró en una encrucijada: o cambiaba su polí.
tica, virando hacia la democracia, o continuaba llevando toda su política anterior hasta sus últimas consecuencias, aplastando el movimiento democrático. Los hechos ocurridos en los últimos días comprueban que el actual régimen salvadoreño optó por el segundo camino mencionado.
Hacemos a continuación una relación de lo sucedido, as confirmar lo anteriormente dicho. En la madrugada del dia 26 de setiembre próxim) pasaio, agentes de la Poli.
cia Tudicial salvadoreña empre dieren una redada. capturando a personas de distintos sectores: profesionales, estudiantes, obreros, los cuales después de ser capturados arbitrariamente por el allanamiento de sus domicilios fueron conducidos a las cárceles de la Policía Nacional algunos, y otros fueron distribuidos en la Penitenciaria Central, Guar.
dla Nacional y en la Penitenciaría de Santa Ana. Pocas horas después la Asamblea Nacional Legislativa, atendiendo al requerimiento del Ministro iei Interior, decretaba el Estado de Sitio en todo el territorio de la República por el término de 30 días, aduciendo como motivo de tal proceder la existencia de un movimiento subversivo que preparaba un golpe de Estado para implantar en El Salvador un régi.
mei de carácter comunista.
Con el objetu de justificar la suspensión de las garan.
tias constitucionales en los dias subsiguientes, las autorida.
der dieron amplia información a la Prensa salvadoreña so.
bre el pretendido movimiento comunista. En las oficinas de la Policia Especial de Investigaciones fueron mostradas a los periodistas ametralladoras, fusiles, revólveres, granadas de mano, bombas, etc. que, segúa la versión oficial, habían sido decomisadas a las personas detenidas. Asimismo el Fis.
cat General de la República anunció que a más tardar el le setiembre presentaría una acusació contra las personas omprometidas en el movimiento comunista.
Mientras tanto, tras los muros de la Policia Nacional estaban sucediendo cosas que la opinión pública desconocia.
Ya desde las primeras horas del 26 de setiembre la Policía Judicial había comenzado un pretendido interrogatorio de os detenidos. Entre ellos los obreros Pedro Grande, Salva.
For Cayetano Carpio, Miguel Angel Coa y otros fueron some.
idos a bárbaras torturas para obligarlos a declarar que te ian armas y preparaban un golpe de Estado. En el trans furso dej mismo día 26 continuaron llegando a la policia Jacional más detenidos procedentes de Santa Ana, y siguie.
on los interrogatorios y las torturas. El bachiller Salvador areynaga Rivera fué golpeado por los agentes que lo in.
errogaban y el Dr. Carlos Canuza Morán se le amenazó con orturarlo. En los dias que siguieron fueron nuevamente orturados atrozmente los ya mencionados obreros Salvador ayetano Carpio y Miguel Angel Coa lo mismo que jas oreras Tula Alvarongo y Fidelina Raimundo.
Debido a que se presentaron solicitudes de exhibición personal a la Corte Suprema de Justicia a favor de varios detenidos, las autoridades de Policia decidieron hacer una burla descarada de los procedimientos legales, realizando un verdadero secuestro de los deteailos para que no fueran localizados por los Jueces Ejecutores nombrados por el Su.
premo Tribunal de Justicia.
Comenzó desde ese momento el peregrinaje de las perso.
nas detenidas de una cárcel a otra. Los reos eran trasladados continuamente de una ciudad a otra. En esas traídas y llevadas fueron distribuidos en las cárceles de Santa Tecla, Cojutepeque, San Vicente, San Miguel, Santiago de Maria y Usultán. De manera que cuando los Jueces Ejecutores bus caron a las personas favorecidas con la exhibición personal no pudieron encontrarlos, afirmando a las autoridades de policía que desconocían completamente el paradero de las personas buscadas. Es importante hacer notar que los nombres de los detenidos fueron proporcionados a los periódicos por las autoridades, que reconocieron públicamente haber realizado las capturas de las personas que ellos mencionaron y que después manifestaron ignorar el paradero de los detenidos, lo mismo el hecho de que cuando el Juez Ejecutor buscó al Dr. Mario Salazar Valiente en las cárceles de la Policía Judicial, fué informado por varios reos de que efectivamente dicho bachiller había estado en esa cárcel, pero que el dia anterior fué sacado de ella y conducido a otro lugar que ellos ignoraban; todo lo cual bastaba para que el funcionario que había efectuado el secuestro del Dr.
Salazar Valiente fuera procesado por abuso de poder. Sin embargo, nada se hizo en ese sentido quedando impune la violación de las más elementales garantias constitucionales y la Corte Suprema de Justicia colocada en una posición ridicula y de complicidad con las arbitrariedades cometidas.
Con fecha 14 de Octubre dieciocho personas detenidas fueron conducidas a bordo de cinco camionetas con placa particular a través de la República de Honduras hasta la ciudad de Managua, República de Nicaragua, donde fueron internados en las cárceles de La Aviación (48 Sección de Po.
licia. En dicho lugar permanecieron detenidos hasta que el día 20 de Octubre ocho de los detenidos fueron llevados por las autoridades nicaragüenses al aeropuerto de Las Mercedes, en Managua, donde tomaron el avión que los condujo a esta ciudad, quedando detenidos en las cárceles mencionadas diez de los restantes exilados.
Como puede deducirse de la anterior información, úni.
camente dieciocho personas han salido exiladas de El Salvador, continuando prisioneras muchas personas más como el Br. Manuel Atilio Hasbún capturado desde mediados del mes de setiembre cuando regresaba del Congreso Centroame ricano de Estudiantes celebrado en la ciudad de Guatemala, y varios obreros entre ellos: Salvador Cayetano Carpio Coa, Orfilio Monterrosa, Miguel Angej Zepeda, Edmundo y Osval do Córdova.
En resumen la lógica conclusión que se deduce de lo acontecido en El Salvador es que el supuesto movimiento co munista no fué más que una mera creación imaginaria del Gobierno del coronel Osorio para tener una base que justificara la represión del movimiento democrático salvadoreño Es decir, que el procedimiento empleado fué de corte tipicamente fascista y muy semejante al utilizado por Hitler en Alemania cuando el incendio del Reichstag.
El saldo de todo ha sido el destierro por una parte y por otra la dificij situación en que se encuentran todos los reos que aún no han sido puestos en libertad, sujetos a todas las arbitrariedades y violencias de la policia que pueden lle gar a poner sus vidas en serio peligro.
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