CommunismCommunist PartyFascismSocialismTrotskyTrotskyismURSSultraderechistasReformista

Resolución sobre situación y tareas del Partido Comunista de la Argentina 1932 03 25 que todos los Estados capitalistas desatan el terror por la pulverización del movimiento comunista y organizan la agresión armada contra la Unión Soviética) hace que el trotski smo no sea mas el simple semi menchevismo de hace veinte años, sino la avanzada de la contrarrevolución. Así, la tolerancia con el trotskismo es simplemente una forma de lucha contra la IC y contra la URSS. Por eso el Partido debe organizar la lucha contra el trotskismo, armando a la masa trabajadora en general contra esa ideología. Por eso, las manifestaciones políticas e ideológicas ligadas, en mayor o menor medida con la ideología trotskista, son particularmente peligrosas en el seno del Pa824 tido, y deben ser batidas sin piedad. La proposición del compañero sobre la conveniencia de un gobierno socialista, es una proposición netamente trotskista; es la reivindicación central de los trotskistas españoles (grupo Nin. que reclaman todo el poder para los socialistas. Toda la podredumbre ultraderechista de la ideología trotskista, su contenido nacional reformista que en las condiciones presentes deviene rápidamente nacional fascismo, quedan probado con la posición de Sib. 82, que acaba de declararse abanderado del trotskismo.
Laguna organizativo En el terreno de la organización, urge un cambio fuerte. Hay enormes debilidades orgánicas. La desproporción entre la influencia y la organización es enorme; ya es fuente de grandes fallas, mañana puede sernos fatal. Eso proviene sobre todo de un menosprecio del factor Partido. Se lo toma al partido como un grupo de propagandistas, simplemente; por eso, todo trabajo se hace bien desde el punto de vista propagandístico, pero mas. Una compaña por ejemplo, termina sin re sultados orgánicos; y es que ella se planteó sin darse un programa orgánico: tantos nuevos afiliados, tantas células nuevas etc. Todos los órganos del Partido, al abocarse a un trabajo, deben establecer los resultados orgánicos que se proponen obtener, y controlar su cumplimiento. Al mismo tiempo, hay que afianzar la organización ilegal, muy ébil, aprendiendo a combinarla con la actividad legal. Aquí hay que desterrar la idea de que la legalidad será dada por alguien: la legalidad para el movimiento revolucionario será conseguida únicamente en la lucha, mediante un vasto movimiento de masas. Utilizando cada posibilidad legal para desarrollar al Partido, adentrándolo en las grandes empresas e impulsando el movi824No identificado.
825Véase la nota 60.
826David Siburu, militante rosarino que romperá con el PC a comienzos de la década de 1930 para animar las formaciones trotskistas.