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Acta de constitución del Comité Pro Confederación Sindical Latinoamericana 1928 09 03 Todas las resoluciones y notas mandadas por este Comité a la USA deberían ser publicadas en Bandera Proletaria. Así pensamos hacerlo con las tres notas que ya hemos recibido de este Comité. Pero lo que yo mas recomiendo y sobre lo que mas insisto es de no tocar y olvidar todo aquello que no sea organización obrera. Hoy sobre todo, si se toma en cuenta la división del Partido Comunista en tres fracciones. Eso ha causado gran perjuicio a la organización. Con esta división no se sabe nada, por quien votar y como votar, si es que no se quiere rozar a alguna de las fracciones. Como dije, pues hay que evitar todo eso y concretarse al problema de la organización sindical exclusivamente.
Repito nuevamente que la USA hará todo lo posible para colaborar en la obra del Congreso.
Desde ya damos las páginas de Bandera Proletaria para informar sobre las actividades de nuestro Comité, y Contreras que tiene mas facilidad que yo para escribir, puede ir haciéndolo.
CONTRERAS. Considero que las palabras del compañero Biondi tienen mucha importancia, sobre todo en lo que se refiere a sus observaciones sobre la situación del movimiento obrero en Argentina y al aporte que la USA ha de dar a nuestros trabajos en pro de la Constitución de la Confederación Sindical Latinoamericana. En Moscú, desde el primer momento que se cristalizó el propósito de ayudar a la creación de la confederación, ya se reconoció a la USA el valor que ella representa en el ovimiento obrero argentino y por eso es que se dejo un puesto libre para ella lo ocupara en el Comité que surgió de la Conferencia de los Sindicatos Latinoamericanos.
En las tareas que nos esperan, previas a la realización del Congreso que celebraremos en Montevideo, tendremos que trabajar muy intensamente y sin mezclarnos para nada en las luchas de tendencia que se agitan dentro de las organizaciones sindicales de nuestros países y que, por incomprensión o intolerancia, han llevado a situaciones tan penos as como la que actualmente presenta el movimiento obrero de Argentina. Solo actuando en esa forma podremos agrupar en el seno de la Confederación a todas las tendencias revolucionarias que actúan en base de los principios de la lucha de clases, y luego lograr influir sobre ellas para lograr hacer efectiva la unidad de todas las fuerzas sindicales de cada país.
Es evidente que la influencia de la Revolución Rusa y de la son demasiado grandes en nosotros y en el medio sindical en que actuamos y creemos firmemente que ellas, bajo cuya guía espiritual desplegamos nuestra acción, han de ayudarnos para subsanar los errores que hayan podido cometerse hasta ahora a fin de conseguir la unidad cuya necesidad para