Carta de Ghioldi al Secretariado Sudamericano de la Komintern [1926-08-07]
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nimemente la resolución que dejo mencionada. Pero creo deber decir algunas palabras sobre el desarrollo de los trabajos en el Ampliado. Las sesiones realizadas fueron cuatro, y de ellas únicamente las dos finales han realizado una buena labor política; las primeras se perdieron lastimosamente gracias a la actitud de Mibelli, que en forma demagógica huía de las cuestiones políticas fundamentales, para hacer grandes debates alrededor de las cuestiones secundarias, mezquinas, formales. hay que decir que si Mibelli pudo hacer tanta chicana, se debió en parte a que el extenso informe del Comité Central no solo comprendía los cargos esenciales y políticos, sino también asuntos de menor importancia y de orden evidentemente secundarios. Después de la segunda sesión del Ampliado, el Central aceptó una indicación del camarada Raymond[^4]. que sostuve en mi calidad de representante del Secretariado, y por la cual se invitaría al Ampliado a separar el asunto general en dos partes: las cuestiones políticas, que serían debatidas en el mismo Ampliado, pues eran las cuestiones fundamentales, y las de orden disciplinario; que serían estudiadas por una Comisión de Control emanada del mismo Ampliado; esa Comisión de Control elevaría su informe al Comité Central, y este quedaba facultado para aplicar sanciones disciplinarias si esa necesidad surgiese del informe. Naturalmente, este método de trabajo trajo la normalidad al Ampliado, y de este modo Mibelli no tuvo ya ocasión de hacer chicanas: debió responder concretamente a graves acusaciones políticas. Empero ese metodo de labor se aceptó sin gran entusiasmo; luego, ante los resultados obtenidos, todos estuvieron contestes en pensar que era el más indicado y propio para un Ampliado.

Una observación que yo podría hacer de las sesiones del Ampliado, es la siguiente: el Partido Comunista del Uruguay está dominado por un sano sentimiento proletario y comunista, que es el que en definitiva le ha permitido tratar el caso Mibelli con justeza, a pesar del prestigio que dicho parlamentario se había conquistado en años anteriores, a raíz de la defensa valiente que hiciera, en primer termino, de la vida del diario comunista. Mibelli tiene prestigio, sin duda; pero la explicación clara de la resolución del Ampliado lo aislará completamente de las capas obreras, que podrán comprobar las serias desviaciones socialdemocráticas por él cometidas y defendidas calurosamente, tanto en el como en el El Comité Central cometió, a mi juicio, un error de cierta importancia: el de no haber llevado la cuestión Mibelli a la discusión de las célu las y de las agrupaciones del Partido, antes del Ampliado. Los compañeros uruguayos reconocen que ese debió ser el

[^4]: Seudónimo de Boris Mijailov. Véase la nota 66.