Profintern

Carta del BSA al SLA 1932 11 15 Con eso concluyo esta parte de mi carta. Con el correo próximo les enviaré el plan de nuestro trabajo en general, sobre el trabajo contra la guerra etc. Ahora me he de referir a algunas cues tiones secundarias, tocándolas a modo de postscritpum, por que no quería que los asuntos de orden principal se mezclaran con estas: En general, recibimos de ustedes una o dos cartas por año, en las que desde una distancia muy grande se nos critican nues tros errores, a menudo muy serios. Considero que ello no basta para prestarnos una ayuda, tanto mas que debemos reaccionar diariamente frente a todos los problemas. Los partidos y los sindicatos saben de vuestras discusiones cuatro o cinco meses antes que llegan los documentos elaborados por ustedes, y aun antes que nosotros tengamos la menor información sobre esos asuntos (y es todavía mas grave que estas informaciones extraoficiales y semioficiales llegan a menudo bastante desfiguradas y sirven perfectame nte para que los descontentos los que luchan contra la línea de la se aprovechen de ellas. Ustedes nos dicen que nadie del aparato nos ha escrito. He ahí precisamente en que consiste el mal; no se escribe ni al Buró, ni a mí personalmente, pero se escribe a todas las organizaciones y a todo el mundo, incluso a niñas de 15 años (Álvarez a la hija de Ramírez 26. Confió en que ustedes mismos comprenderán que esa situación no es nada normal. Protesto enérgicamente en nombre del Bureau y en el mío pr opio contra la acusación de que nosotros sostenemos la pasividad (en cualquier forma que sea) y que no cumplimos con nuestras tareas. Esta afirmación revela muy poca objetividad en la apreciación de nuestro trabajo, es muy tendenciosa y, sobre todo, debilita mucho el contenido de la crítica en las cuestiones mas importantes. Llamamos vuestra atención sobre el hecho de que los camaradas que regresan de la Escuela y del Profintern, vienen en muy mal estado de espíritu. Retornan con el prop267to de conquistar al partido o de luchar contra su dirección. Gubinelli. por ejemplo, le hemos podido ganar después de un año de luchar contra su estado de ánimo. Una parte de los vuelven, vienen influenciados por las agrupaciones derechistas izquierdistas que sin duda alguna hacen un gran trabajo entre ellos. No podemos explicarnos porque no se presta suficiente atención al trabajo educativo de esos elementos y porque no se trabaja previamente con cada uno de ellos antes de su regreso a su respectivo país. La mala elección de esos compañeros por los partidos todavía 267Véase la nota 200.
Seudónimo de Mario Grazini, véase la nota 119.