Epoca IV Barcelona 28 de abril de 1918 Número 286.
Tierra y Libertad SES. céntimos Redacción y administración: calle Cadena, 39, 1: Paquetes de 30 ejemplares.
Suscripción: Espana un trimestre Extranjero 1 00 ptas 1900 1:50 Congreso Internacional de la Paz en el Ferrol. los congresistas. BA. VI contendientes, siendo así que ni siquie.
ra atenuantes se pueden buscar para los provocadores de esta hecatombe humana.
Oh, hombresl vosotros que os avergonzáis ante la humadidad y ante la historia de semejante igaomibia, repa.
rad que las ráfagas de los vientos traen hasta nosotros las ayes de las madres, el llanto de las viudas, las quejas de los ancianos abandonados, el lloro de los huérfanos en el arroyo, los postalgias dolorosas de los que agonizan en los campos de batalla. Oh, hombresi los que no seáis inmi.
sericordes, en nombre de la bumanidad entera, por el dolor de millones y millones de seres humanos, yo os invito, yo os emplazo, para que todos vuestros esfuerzos se encaminen a conseguir la apbelada paz.
Uoámonos todos bajo el humanitario emblema de la paz, y la victoria será de nosotros, porque tenemos el poder irresistible de las pobles causas.
Seamos los cruzados de la paz, y así baremos justicia a las víctimas que la piden desde sus tumbas cinerarias, y cuyas voces de ultratumba se elevan en un clamor iofioito, desde el fondo de los fríos túmulos.
Salga del Ferrol la Huelga General revolucionaria, capaz de imponer la paz violentamente y de transformar el mundo.
JOSÉ ARRANZ AN OG Wii MAN PALE.
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Contra la guerra burguesa 23 WW YE SON.
FO 41 20 SWARTUN TAWY TAHAN SCA Salud, heraldos de la pazi to los actuales críticos momentos para la humanidad; cuando pueblos que se titulan civilizados, proclamado.
res y sostenedores del derecho de gen.
tes, saltaodo sobre todas las consideraciones humanas, riegan con juvenil sangre los campos que en otros tiem.
pos, por medio del trabajn, produjeron exhuberantes frutos, vosotros, respon.
diendo al llamamiento del Ateneo Sin.
dicalista del Ferrol, abandonáis vues.
tros lares para laborar por la paz.
La humanidad, que se sieste extremecida de horror ante el vértigo homicida que se ha apoderado de los hombres que parecían más ecuanimes, tiene fijo el pensamiento en vosotros, esperando el resultado de vuestra altrvista labor.
Discutido ha sido este Congreso, an.
tes de realizarse, y por falta de valor 10 ha sido combatido por los eternos pesimistas, que ante el temor del fracaso, reservan sus actividades, sus energlas, para cilando las circunstan.
cins sean más favorables.
TIERRA LIBERTAD Os saluda frater.
palmente, porque, optimista como vosotros, eterno optimista, cree que la raza bubapa será feliz un día por la labor, por el esfuerzo de los soiladores, porque el pesimismo es la negacion de la actividad de la vida, en tan.
to que el optimismo es la esperaoza, la lucha.
Jamás por las columnas de estas hojas, como por puestro pensamiento, pasó la idea del fracaso. Por eso estanos identificados y acudimos a ese Coogreso para abrazar a los luchadores, a los que sin temor a las inclemen.
cias del tiempo y de los hombres van siempre adelante, verso la parte don.
de si leva il sole.
La importancia del Congreso Interracional de la Paz, está en el Congreso mismo, y vosotros, congresistas, que representáis la parte más útil de la humanidad, que sois los producto res de toda la riqueza, sois los más.
autorizados para hacer que los an.
helos de paz ileguen a las alturas donde se forja el rayo asesino, y que las palabras de amor y fraternidad se extiendan entre los que naturalmente unidos por aosias de emancipación y por el manejo de los útiles de trabajo, se encuentran hoy frente a frente con un odio ioculcado por sus tiranos y explotadores, Si lográis poneros en comunicación con los combatientes de vuestros respectivos pueblos y les hacéis sabedores de que en los países aeutrales se respira ambiente de paz, y que hasta en las naciones en guerra, el pueblo está cansado de tanto borror y que sólo es.
pera la palabra que ha de hacer ver al pueblo que nadie, y en nombre de die ni de nada, puede disponer de su vida, habréis hecho una labor tan bumana, que tal vez de al mundo el aiio ejemplo de una paz impuesta por el pueblo, que sería la única paz estable y duradera.
Que a la vez que laborar por la paz, laboréis por la creación de una nueva loterpacional, es el deseo de cuantos confian en que ha de ser el pueblo productor el destructor de todas las desigualdades.
Salud, heraldos de la paz!
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CZ SO TES KAN os Et re ES umana Sería de lamentar que la guerra tual, como, por otra parte, ha sucedido con todas las guerras, terminara sin que en ello haya intervenido la voluntad del proletariado para darle fin, observando la misma indiferencia que cuando los gobiernos decidieron lanzar los pueblos en el pavoroso cor flicto.
Es triste que todavía los gobiernos tepgan el poder de declarar la guerra, y más triste a un es que los pueblos no ten.
gan el de imponer la paz contra la de.
terminación de los poderes del Estado. es este un hecbo que para nosotros constituye una lección. Lección que entre otras muchas, es la principal que la guerra ha proporcionado a los revolucionarios, poniendo en evidencia bas.
ta qué punto conservan fuerzas estados de ánimo, prejuicios, sentimientos, que creíamos muertos y sepultados para siempre; hasta qué punto continúar siendo rebafios pueblos que teníamos por más adelantados, y cuánta labor educativa será todavía necesaria para crear la personalidad consciente en los individuos.
Pero si nos encontramos con que ei retraso de las multitudes es mucho y nos causa pena constatarlo gracias a circuastancias tan dolorosas. cómo justificar la actitud de los revolucionarios que se comportan como esas mismas multitudes fáciles a la sugestión y prendadas del brillante florilegio de los sofistas que pululan, o peor, como los gobiernos que las dirigen? Podemos entonces exibirnos de toda responsabilidad? Casi resulta pueril la pregunta: Hemos hecho todo lo que podíamos, todo lo que debíamos para que la guetiranos llegara a un metro de altura en rra encontrara la oposición de los pue.
las calles, es preciso más, es preciso blos? No, ciertamente.
basta desenterrar a los cobardes enca ya que no lo hemos hecho antes, pallados que murieron antes de tiempo. por qué no hacerlo ahora en lo que sea para fusilar sus restos.
posible? Aunque sólo sea intentarlo, La paz, la paz, palabra hermosa que servirá de provechoso ejemplo. este se mancba ob labios de cobardes, tira. respecto la iniciativa del Congreso del nos, de tartufos, de mercacbifles, sin Ferrol reviste transcendental Imporconciencia y sin entrafias, pero que tancia desde que intentar ponerse de sale del corazón de muy pocos, porque acuerdo para imponer la paz es dar un el seatido moral está atrofiado y por paso revolucionario. La paz impuesta que las facultades pensantes están por el proletariado de conseguirse anestesiadas con la ipfluencia del me sería descargar un golpe formidable dio criminal en que se vive.
contra el régimen y la verdadera deLa paz, sublime concepción que nos.
rrota del militarismo. He aquí por qué otros ideológicos de la anarquía, pro.
seria de lamentar que los gobiernos y pagamos sin tregua di desCARSO, pero no los pueblos decidieran de la paz.
que epcontramos la general igporancia un lado y la interesada obra de los tiranos, reforzados con las capciosida. Nuestro pacifismo actual no es prodes de sabios de relumbrón, que en piamente el pacifismo. No somos parteoremas abstrusos vienen a querertidarios del estatu quo del régimen, convencerpos de que la guerra es el del mismo modo que sin estar de esta producto fatal de la bestialidad bum ola otra parte de los beligerantes, tam.
da, y para mayor dolor, los que no tu. poco somos neutrales.
vieron el valor moral de ep estas ex. No podemos ser neutrales en un con.
cepcionales circunstancias seguir lla ficto en que se trata de puestros inte.
månduse adaiquistas, vienen a volcar reses y de nuestra vida, pipodemos su peso es en la balanza de Astrea, Ser pacifistas los que vamos contra la para demostrar que la razón y la jus. guerra no por la paz, sido para contiticia están de parte de uno de los dos quar la guerra de nuestra liberación, la LA PAZ En todos los tiempos, en todas las épocas y por los hombres de todas las ideas y creencias, se ba proclamado la paz como base constitutiva del equili.
brio universal La paz de la familia. La santa paz del matrimonio. La paz so.
dal. La paz de la conciencia. La paz del alma, NO MATARÁS, repercute el eco de la religion cristiana. La vida de un semejante es tan sagrada como la puestra, repiten los materialistas.
Parece ser que todos odian la lucha kutal en que la saogre humana se vierte, y no obstante, en fragante absturda contradicción, existe la guerra, la guerra bárbara que se libra en los ampos de batalla, donde se hienden oráneos, se matas niños, se incendian campos, se destruyen ciudades. Existe ha guerra bárbara, cruel, horriblemen te trágica, la guerra social de todos los dlas, de todas las horas, de todos los minutos; guerra sin tregua di armisti. y hombres que se llamaron ecuápi cios que engendra los dramas horribles mes, sepsatos y justos, amantes de la de la miseria, que tiene por epílogo bumapidad y defensores de la paz, se cruelmente desgarrador, la prostitu. han apiquitado sus voluntades y sus ción, el presidio, el suicidio y el ca inteligencias, se han castrado sus eper dalso.
gias, y hoy ya desconocen las alas del milano de la fábula de Goi ki, y dobleHoy bafia el suelo de Europa la san. gan la cerviz ante el mundo de la infa.
gre que a torrentes se está vertiendo mia de los poderosos y van en la co.
en los campos de batalla. Dos grupos rriepte brutal de destrucción, arras.
de pueblos igualmente inocentes en su trando por el ciero de la ignomioia, de masa de habitantes e igualmente col la cobardia, su bistoria y su obra.
pables en su extructura orgágica, cops. sigue la tromba exterminadora titutiva de uoa monstruosa organiz soplando como el huracán sobre los ción social que ductua sobre un Ocea pueblos, y siguen las masas de plebis.
no de sangre y lágrimas, se están citarios aniquilápdose con la metralla trucidando, degladiando, apiquilando que ellos construyeron, y sigue el se con sats de feroz crueldad, solo mundo vil de los poderosos rigiendo porque triunfeo estos o aquellos tira. sardonicamente desde los suntuosos nos, y lo más doloroso es que es salones de sos reglos Alcázares, y sigue matapza que subleva el ánimo, tiene el crimen cristalizando el dolor, las sos proselitos, sus panigeristas, que lágrimas y la miseria de viudas, de basándose en tópicos de una cruel iro. huérfanos en el arroyo, de ancianos nia, glosan la justicia, la libertad y el desamparados, y los hombres que se derecho, con el nombre destilante de llamaron ecuádimes y defensores de la humana sangre, de batallas, de trinpaz, siguen declamando contra este o cheras, reductos, líneas de fuego, aquel grupo de los pueblos en guerra acorazados que se buodep y barcos y queriendo justificar lo iniustificable: y queriendo justificar lo injustificable; mercantes que son torpeados por los y yo sigo diciendo y afirmapdo, que si centuriones bárbaros de las potencias Grammoptagne dijo que bacía falta en guerra, una revolución en que la sangre de los