AnarchismAnselmo LorenzoCommunismPrivate PropertyWorking Class

TIERRA LIBERTAD NÚMERO EXTRAORDINARIO Esclavo ya, humillado y vencido, nadie intentó salir en su defensa, y cayó el paria, cual despojo humano, en la más baja y abyecta tutela. uno que fué ¿Acaso algún superior derecho que distinguida cualidad encierra, dió facultad al rico potentado para que tales actos cometiera?
tralmente opuestos a nuestra vida y libertad; engendro de ese inónstruo de bárbara inhumanidad que aniquila y destruye a los pueblos: tal es la fatal trilogia en el orden cronológico.
Si, imitemios al maestro Anselmo Lorenzo, el hombre probo, liumano, activo y consciente fundador de La Internacional, que arrostrando todos los peligros consagró su vida para la redención de la humanidad.
Todos los que sufrimos las injusticias de esta inluumana sociedad: todos los que sentimos vibrar en nuestro ser ansias de lucha y dignificación huniana, no hemos de cejar en el diario batallar para que desaparezca el dualismo antihumano, el derecho de accesión, las artificiales fronteras y esa antinomia de leyes que nos esclavizan y oprimeni, hasta llegar al triunfo de lo que tanto amo Lorenzo: a la implantación de la mueva sociedad comunista anarquista.
Palafrugell.
José Beya No, fué tan sólo la ambición malvada la que movió a una minoria necia it convertir la hunianidad naciente en antros de dolor y de miseria.
Han transcurrido siglos incontables desde que el mal eii este mundo impera, mas no cesó un 110mento la injusticia, ni el privilegio dió a los honibres tregua. cada rebeldía del esclavo el señor reforzaba sus cadenas, y apelando a continuas restricciones predominaba la ley que da la fuerza.
Anselmo Lorenzo Religiones, Ejércitos, Estados, todo tiende a iniponer la obediencia que afirma en su sitial al poderoso lucrándose en la labor ajena.
Mas llega ya el niomento en que el esclavo adivina la causa de sus penas, y arrinconando viejos prejuicios quiere vivir una existencia nueva.
Una apreciación inglesa No tuve el honor de conocer a Lorenzo personalmente, pero habiendo recibido el encargo de Bowman y de Tarrida el año pasado de traducir al inglés la obra de Lorenzo «Hacia la emancipación. cuyo libro se hubiera publicado ya a no ser, primero, por una enfermedad y dos operaciones quirúrgicas que me tuvieron incapacitado durante muchos meses, y segundo, la guerra europea, quiero expresar mi apreciación del gran luchador español juntamente con la de todos los obreros conscientes de aquí.
En estos tiempos de arrivisme, es una cosa que infunde respeto y cariño el ver a un hombre que, durante medio siglo, ha sido fiel a las doctrinas de La Internacional.
La niuerte de este patriarca revolucionario constituye una pérdida inmensa para todo el proletariado mundial. Percy Friedberg Londres.
Unido a sus hermanos de infortunio adquieren presto el valor de una idea, y cual bella y espléndida alborada se lanzan a la lucha intensa, recia.
Queremos libertad. todos exclaman; queremos destruir tanta vileza que humilla nuestra condición de humanos y el brazo y el cerebro 1105 enervan.
muerto siempre los anarquistas, como murieron los de Chicago, como Henry puso el cuello a la guillotina, como Ya sé que no me oyes, compañero; ya sé que mi voz ofreció Angiolillo la garganta al garrote, como cayó Ferrer.
no será jamás oída por ti; ya sé que tu cuerpo está dis Le dió el Destino una muerte patriarcal y así fué su gregándose en el seno de nuestra madre común, de la entierro. Lleno de flores el ataud, llevado a hombros por santa tierra. Mas, a pesar de esta dolorosa convicción que sus fieles, y detrás, por el medio de la ciudad un poco tengo, te hablaré como si me oyeses, es más, como si me asonıbrada, todos nosotros, los que tenemos a orgullo escuchases. Te ofrendo esta corona de sentidos pensa haber sido anarquistas, dejando de serlo después de niientos, no por lo que tu talento haya valido, sino por febriles angustias espirituales, y los que aun lo son.
haber tenido las dos cualidades que, para mí, más avalo Eramos dos mil, pero éramos pocos. Porque en Barcelona, ran la existencia de un hombre: ser bueno y ser conse todos los que en 1890 y en 1900 tenían veinte años, cuente.
aprendieron en Anselmo Lorenzo, o al menos en él se Un día me decías, en cariñosa y fraternal carta, que apoyaron más de una vez, a querer y a luchar por las tendrias gran gusto en abrazarme; yo también hubiera liberaciones sociales. esos no estaban en su entierro.
querido gozar esta dulce sensación; yo también anhelé El más significado de ellos, ese hombre que ha hecho de aproximar mi pecho al tuyo para, con los ojos cerrados y la austeridad la filosofía de la «tranquilidad y buenos el pensamiento en el porvenir de la Humanidad, sentir el alimentos» y que se llama Pedro Corominas, tal vez creyó latir unísono de nuestros corazones. creo que a un mismo que su presencia entre sus antiguos compañeros hiciese tiempo se hubieran dicho, deslumbrados por la visión del memoria en los burgueses de despacho y mostrador que mañana. Compañero. Compañero. No pudo ser. Qué le dan los votos, de lo que fué.
importa?
Debimos ir todos y no fuinios. Yo busqué entre el Muchos leerán tus libros, tus folletos, tus artículos re gentio las caras de aquellos que liabían tenido hermandad riodísticos para ilustrarse; hacen bien. Yo veré si consigo espiritual con Anselmo Lorenzo y no las hallé. Ahora tal parecerme a ti en aquello que a mis ojos te hizo grande: abogado distribuye prebendas y óbolos en lugar de palaen ser bueno y consecuente. Si te imito en lo primero bras exaltadoras; tal dramaturgo dormita sobre sus lauhabré logrado vivir tranquilo; si en lo consecuente te igua reles que ya no se renuevan; tal escritor fabrica humorislo, podré caminar con la frente levantada, en esa actitud mo; tal estudiante hojea, ya jurisconsulto, el código, que muchos iicuántos. no pueden hacerlo.
confiando extraer de entre sus hojas aquellas otras que ¡Hasta luego, compañero!
dan el bienestar. Todos dejaron que el cuerpo de AnselEmilio Carral mo no llevara tras si el ainor y el recuerdo de unas geneSantander.
raciones que únicamente tuvieron honrada y fresca el alma cuando sentían en ella las efervecencias anarquistas.
Yo sabía que con el cadáver de Lorenzo enterraba un trozo de mi vida, pero aun veía que eran anchas las alas de mi chambergo, aun mis amigos eran los combatientes Había recogido en su alma, Anselmo Lorenzo, el alma y los perseguidos, aun el viejo himno puritano cantaba de los caballeros del Greco. Como ellos era toledano, dentro de mí y me senti libre y bueno, no tanto como el místico y fuerte. Nada más que en él, la pasión católica que enterrábamos, pero más que el abogado, que el drase había convertido en la pasión anarquista, pero Anselmo niaturgo, que el escritor, que el estudiante que no se Lorenzo con su mirada de voluntad, con su mandíbula habían enterado que dentro del ataud iba también a recisaliente, con sus gafas ¿no habría podido ser aquel car bir tierra algo suyo.
denal Don Fernando Niño de Guevara, retratado por Mario Aguilar (Helenio)
Theotocópoli? Muerto Salvochea, era Lorenzo no olvidemos, no obstante, a Ricardo Mella. el más puro y férvido guardador de la fe anarquista. no es original que este hombre fuera nacido en la ciudad de los hidalgos espirituales, de los pintores locos y de los capitanes que llevaban en el corazón el temple de sus espadas tamUna sola vez ví al gran Anselmo. Fué en Barcelona, cuando en 1911 se celebró en Bellas Artes el primer Congreso Sillbién toledanas?
dicalista Nacional. Serían las dos y media de la tarde. Poco Ya no hay místicos en España. se dice. Tal vez antes de dar comienzo a la tercera sesión del citado Congreso.
sea verdad y mejor que lo fuese, pero ¿no habrá tomado Lorenzo amaba y quería a Zaragoza. La amaba, porque en ella el misticismo otros derroteros y las viejas ciudades como contaba con amigos de su juventud. La quería, porque en ella Toledo, no producirán en vez de cardenales, estos hon propagó sus humanitarios ideales en tiempos difíciles para la bres que, como Lorenzo, arden en fe, poniéndola en la propaganda anarquista.
tierra y no en el cielo y creyendo en vez de en la bondad Curioso Anselmo Lorenzo por conocer noticias de aquellos de Dios en la del Hombre? Como místico vivió y ha a quien aniaba, preguntó por los delegados de la Federación inuerto Anselmo Lorenzo. Para él no existió ni lo real ni Aragonesa.
lo inmediato. La Anarquía estaba lejanísima, el camino Alguieni vino a buscarnos. Lacort y yo corrimos a saludar al venerable anciano. Su fisonomía simpática nos pareció la era largo, el dolor para llegar siempre presente y él miarfisonomia de un apóstol. Había tanta dulzura en sus palabras chaba como un poseso, dándolo todo al ideal. No murió y taı ardiente fe a pesar de los años. por él porque no quisieron matarlo, pero si en uno de Le saludamos. Habló de Zaragoza, de los amigos, de las aquellos días en que los escribas y fariseos sienten el luchas obreras. Nos preguntó también por Aguado, su intimo ansia de alzar un calvario, Anselmo Lorenzo hubiera sido amigo. Es un buen anarquista. nos dijo.
llevado a la crucifixión, muriera serenamente, como han Sono una campanilla. Era el presidente que nos llamaba Los que todos los frutos producimos, los que creamos todas las riquezas, vivimos eni perpetuas mezquindades en tanto que el señor se regodea.
El entierro de Lorenzo Veniinos a exigir nuestro derecbo al disfrute de todo cuanto el hombre crea; 110 queremos ser siervos del salario; sólo anhelamos nuestra independencia.
La alborada Bajo el yugo opresor yacia el paria maldiciendo su inisera existencia; poder que explota la energia liumana; lamnento que no rompe las cadenas.
En vano buscarán los inconscientes un paliativo a tan hondas crudezas, esperarán en vano los ilusos la fusión de las dos opuestas fuerzas.
Los pretéritos siglos de ignorancia destruían su espíritu rebelde, matando en ellos el noble entusiasmo que es atributo de voluntad férrea.
Mientras un hombre explote a otro hombre jamás habrá justicia verdadera; mientras rija la propiedad privada no reinará la equidad en la tierra.
Anselmo Lorenzo hundido totalmente su cerebro en las tinieblas de una noche eterna, sufrió la usurpación vil e implacable que entraña la injusticia más suprema.
Marchamos hacia nuevos horizontes, Varios a rediinir la humana especie y a unir los seres en estrecho lazo de amor inmenso y de igualdad eternia. Hombres como él, acaso sus hiermianus, guiados por tua ambición perversa, arrebatáronle todos los frutos que él extraía de la madre tierra. Utopia. gritan los poderosos. Ofuscados. los débiles agregan. mas el paria, resuelto y convencido, va realizando la magna empresa.
Mercadearon con sus energias hasta inculcar en su débil conciencia que debía al señor su propia vida para acallar la voz de su protesta.
Poder que arrolla lo falso y lo caduco, rayo de luz que invade las tinieblas, a su impulso caerá lo carcomido venciendo al potentado en la peleil.
Despojáronle de hermosos derechos que a todos diera la Naturaleza, el derecho a vivir la vida libre que el amor rige tornándola bella.
Es tan firme el valor de sus principios, es tan bella y sublime su tendencia, que a detener su avance 110 bastaran todos los privilegios de la tierra.
Federico Fructidor 28 29