19: LA VIDA TRAGICA DE LOS TRABAJADORES Por el Dr. Feydoux.
LOS CONDENADOS Los señores León y Maurice Bonnerf ella. Dos cunas hay arrimadas a la xa Es la enferma. Se incorpora, sonríc, se fueron encargados, por el Gobierno. ma. Junto a la mesa, arde fuego en una. turba; se seca las manos en su delanfrancés, de hacer una información hornilla.
tal y llania a sus hijos, que; en cuatro acerca de las condiciones en que traEsta mujer es madre de cinco hijos patas; casi desnudus; andan por entre bajan los obreros ile las distintas in. El mayor de ellos, una niña, tiene siete mestras piernas; y parecen, más que dustrias, en Francia, años. La infeliz está aquí, junto a su criaturas, animalillos deformes.
En el curso de este trabajo informa madre, despeinadi, con ojos de mirada habitación en queentramos constivo, vieron tantas y tan terribles cos salvaje. Jamais ha ido a la escuela; tie tituye toda la viviend. Una cania sas, que el libro que publicaron, il ne que estar aquí, cuidando a su miure, hay en el fondo; más is! lá, una cina: terminar sus indagaciones, es uno de respirando el mismo aire que la enfer: Aquí viven ocho personas: padre, malos más completos en su materia. Para ma, bebiendo en el mismo vago. secuna ire y seis hijos. La mujer ha ido solaconocer la vida del obrero francés, nin o sus labios con el mismo guiñapo. mente una vez al Preventorio.
gún libro acaso más recomendable que El padre tiene treinta y dos años. Es Nuestro acompañante le dirige alel que ellos escribieron.
carretero en una fábrica de tejidos de gunas preguntas que ella contesta sin vacilar.
Traducimos, de él, uno de los capí marcha a las cinco ile la mañana, puis tulos más dolorosos, y que se refiere a que antes de empezar el trabajo tiene Tiene treinta años. Sus hijos tienen la vida miserable que arrastran los que cuidar los caballos, y vuelve a las once, nueve, seis, cuatro, dos años y trabajadores de Lille: siete de la noche. Gana tres francos nueve meses el más pequeño. Ha perdido uno, muerto de meningitis tuberAcompañados por una persona cu. por jornada, lo cual son 18 francos seculosa, va obligación es visitar a estas pobres manales, contando con que en la semaEl marido es peón de una fábrica de gentes, hemos recorrido el barrio de na no haya ningún día festivos. estos Moulins. Lille son los únicos recursos con que cuenta tejidos. Gana dos francos y medio por diez horas de trabajo. No tiene más Estamos ahora en la calle de Phi esta familia. lippe. ide Comsnines. Una calle La madre. el padre y los cinco hijos ingresos que este jornal, ni recibe vincompletamente ilena de barro y de pe viven todos en esta habitación. En ella gún auxilio, de modo que con este dinero tienen que alimentarse, vestirse y queñas lagunas de agua sucia. Por un se duerme, se cocina y se come. En la tener casa, ocho personas, pasillo estrecho y obscuro, donde los cama, duermen la moribunda, el mari En esta habitación, que sólo recibe aire codos tocan en ambas paredes, entrå do y dos niños. Los otros tres en las y luz por una ventana que da al sucio inos en una casa; subimos una escalera; patio, no sólo viven, comen y duermen, obscura también, como una cueva y al Antes, también se lavaba aquí mis. sino que también lavan. Hay ropa colllegar al rellano llamamos en una puer mo, y la ropa de los sanos se mezclaba gada de una cuerda amarrada al techo.
ta de las dos que hay. Sólo un murmu con la de la enferma.
que gotes sobre el suelo.
llo oímos, que parece responder. Abren.
El Preventorio (de donde es eni Padre e hijos duermen en la misma Entramos. Un olor extraño el indefini pleado quien les acompaña. cuyos cama, y los demás pequeños en la cuhle olor de la enfermedad penetra en recursos son muy escasos, lava ahora na. En verano, se extiende en el suelo nuestros órganos respiratorios; también la ropa de esta familia; además le da el colchón y algunos duermen alli. Los sentimos su influencia en la garganta, un litro de leche, por día y dos kilos de. demás sobre un jergón. Se nos ocurre y no obstante haber una ventana, en carne por mes.
levantar el cubrecamas: no hay sába treabierta, sentimos como si nos aho Esta mujer está tuberculosa de ternas.
gáramos en la habitación hay una cer grado y su muerte es inminente. Cuando nació el cuarto hijo dice mujer. Nuestro guía nos dice, en voz Es una antigua hiladora de lino. Las la mujer que ha visto nuestro gesto, baju: causas de la enfermedad: exceso de vendimos las sábanas; luego no hemos. Qué edad creen ustedes que tiene trabajo por una parte, privaciones por podido comprar otras.
esta mujer?
otra. Qué comen ustedes. Qué come. Cuarenta cinco o cincuenta años Otra calle, llamada de Robleds. En su marido?
le respondemos.
ella, una especie de túnel que da a un Guisos. si, guisos de patata, de Tiene solamente veintiséis. patio, encajonado entre paredes de la nabos, y algunas veces de col y de guiSobre una silla sin asiento, la mujer, drillo, lleno de basuras de las casas y santes machacados.
vestida de harapos; tose y escupe sin atravesado por un hilillo de aguas. Carne, no?
interrupción. Está tan extremadamente grasientas, espesas y malolientes. La. Jamás.
flaca la columna vertebral se dibujan bajo tán inontadas de cualquier modo, almer grado. Bien alinienta y sin que los huesos de la espalda y de casa tiene tres pisos y las escaleras csEsta mujer está tuberculosa de pri siis ropas.
a poya en una mesa llena azar. Alexiremo superior, en una puer al aire libre, con menos fatigas y sin de frascos y botes de medicamentos ta abierta, arrodillada, hay una mu preocupaciones seguramente se salvaNo puede tenerse en pie.
jer pequeña, flaca y bonita, que frota ría. Pero nada de esto tendrá; quedaLa habitación mide cuatro metros con un cepillo los agujeros cerrados de rá en este cuchitril y morirá bien por dos. Una cama ocupa la mitad de una jabonera, Sigue en la página 31)
Cunas,