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Op La Tragedia de Chicago 110So discurso que duró más de dos horas y media, cuyos puntos principales lueron: dirigirmie a este tribunal, lilago como representante de una clase enfrente de los de otra clase enemiga y empezare con las mismas palabras que un personaje veneciano pronunció liace cinco siglos ante el Consejo de los Diez, en ocasión semejante: Mideiensa es vuesi tra acusación: mis pretendidos crímenes son nuestra victoria.
Se me acusa de complicitari en un asesinado y se me crindëna it pe: sar de 1103 presentar el Ministerio úlilea prueba alguna de jure yo conože al ne arrojó la bomba, ni siquiera de que en tal asunto Tiaya tenido intervención alguna; Solo ci testimonio del rocurádor del Estado vile Bonfield is contradictorias declaraciones de Thomson y del Gilmer, testigos pagados por la policia, pueden 11a.
ocrine pasir como criminal si no existe un liecho que pruebe mi participaciono mi responsabilidad en el asunto de la bomba, el ve.
redlicto su ejecución no son máis que un crimen maquiavéliconenle combinado y friamentejecutado, como tantos otros que registra la historia de las persecuciones políticas y religiosas. Se han cometido muchos crímenes jurídicos cun alirando de suena le los representantes del Estado, crevendo realmente dinerentes a los sentenciados En esta ocasión ni esa escusa existe. Por sí mismos, los represeritantes de Estado horrlalricado la mayor parte de los testimonios, ilan elegido un jurado, siciosos en su origen. Inte este iribunal, ante el pública, o acuso a rcurador del Esdo a Vonfield de conspiración infame para itsesinar nos. Referire mincidente que arrojará hastante luz sobre la cuestión. La tarde del nitin de llarmarket; encontré neso de las ocho a un tal Legner. Este joven me acomSigue en la pág. 1) Samuel Fielden trabajó en algunos talleres a lin de poder liacer una intensa labor en las ideas socialistas. En 1869 se trasladó a Chicago) y con el mismo deseo de contribuir al mejoramiento de sus compañeros, trabajó como jornalero, Algiin tiem.
po después ingreso a la Asociación Internacional de los Tra.
bajadores prestando a ésta eminentes servicios en unión de Spies y Parsous, habiendo corrido por tanto igual suerte que sus companeros. OSCAR NEEBE. Oscar. Neebe, americano por na: cimiento; tui hijo de padres alemanes, desde muy niño demostró sentir en su corazón un gran cariño para las clases desheredadas y fué tal su entusiasmo que se distinguió en su país como propagan.
distas de las ideas socialistas y como organizador de secciones de oficios. Fue uno de los promotores de la huelga general de 19 de mayo, liabiendo sido condenado por el tribunal de Chicago a la pena de 15 anos de presidio, a pesar de rue el pidió insistentemente que se le sentenciara a la misma pena que a sus compañeros. AUGUSTO SPIES. Alemán de origen Augusto Spies, eangró a los Estados Unidos a la edad de 17 anos, fijando su residencia en Chiicago, un año más tarde. De carácter rectes, firmie zenérgico supo fustigar la explotación capitalista y defender los derechos del proletariado Desde muy joven ingresó a un. taller de imprentar y cuando 22 años de edad se aflió al Partido Socialista al que presto grandes servicios Entro como redactor del periódico Arbeiter Zeiting y algún tiempo después asuinió ta dirección del mismo, aún ocupaba tal puesto cuando lue detenido.
Cirando se presentó ante el tribunal que la burguesía capitalista había designado para que como un remedio de justicia los eniviara al patíbulo, pronunció un lier.
Oil Oscar Neebe.
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