:27 ¡Estamos cogidos. y corrió hacia il Packard La Sombra caminó basta el centro del camino y se planto alli de pie esperando que el auto se acercara más con su ametralladora en posicion, El auto se acercaba rápidamente, pero de pronto disminuyó la velocidad a una distancia cercana al hombre pa rado en el camino.
Con mucha hạbilidad, La Sombra!
saltó hacia un lado, y apuntando al conductor con su arma, le ordenó que se detuviera. Su mirada acostumbrada a la obscuridad, había descubierto que el auto venía ocupado solo por un individuo. Cuando el aute se detuvo, ordenó brutalmente. Manos arriba!
Acercándose más al conductor del anto, apuntó el cañón de su arma a la cabeza del que manejaba, y con voz agria y amenazadora, le dijo. Le voy a enseñar a seguirnos!
La voz atemorizada de Strewl se oyó en la obscuridad. No mate a ese hombre.
que conducía el coche, ya se había preparado para echarse pobre hacia adelante para evitar las balas que esperaba Abrió la boca para ha.
blar, pero antes de que pudiera emitir Algún sonido pudiera emitir.
Las flechas señalan a Emma Reiño y a Eleanore Russo cuando fueron. capruradas en la casa de La Sombra Distólica.
puñando su pistola, había poem.
en Hounü lisco.
un fuerte golpe con la culata, sobre la indefenga cabeza del conductor, La tervención los detalles del pago del su destino. Cuando su compañero lo sangre corrió inmediatamente, bananrescate; también sabía que la policía indicó, La Sombra detuvo el auto do el volante y la parte interior del de Nueva York esta teinoviendo el y apagó las luces Lanzó sus miradas carro. Strew lanzó un grito de boa cielo y la tierra para descubrir a los a través de la oscuridad que los rodea. rror.
criminales y libertar a John Con ba descendió del vehículo y se paró Abriendo brutalmente la puerta del nell, Jr.
sobre el camino. No se veía a nadie, auto, La Sombra nusos puso su ametra.
Many Strewl se encontraba en una Strew) volvía sus ojos hacia todos la lladora sobre el estribo del coche y ja situacion muy comprometida: si la dos como esperando a alguien. De re ló brutalmente hacia afuera al hombre policía estaba vigilando el camino, se. pente, sacó otro cigarro de şu bolsa y desmayado. Lo puso sobre el pavi ría atrapado en compañía del autor lo encendió nerviosamente, raspando mento del camino, y entonces ordenó: material del plagio, y muy di el cerillo con violencia.
le sería Venga a ayudarme, quién es este. Ja que viajaban en el mismo vehículo. Además, Sombra en voz baja pero enérgica, Despacio y torpemente Strewl crutenía un gran temor del hombre cor Enséñeme por donde está la casa. zó el camino pulento que iba a su lado, y del plan Mientras hablaba extrajo su sub. Es Arturo Davis. dijo. es el que había concebido. Cuando el Pac ametralladora de la parte trasera del chauffeur de Delaney. El Procurador kard negro en que viajaban los dos auto. No se oſa ningún ruido y Strewl del Distrito le encarga que haga inveshombres se acercó al cimpn Helder. hizo esfuerzos para encontrar la casa tigaciones especiales.
berg, Strewl encendió cigarro tras ci. en medio de la obscuridad Al fin, pu: Callese! la orilla de la carrete garro. De cuando en cuando, miraba do ir con la mano y dijo: All furtivamente hacia su compañero.
ra había un preu como de 300.
está la casa pero en ese momento pies de hondo. Las. La Sombra sentado al volante aparecieron en el camino dos luces a la orilla y trató de mirar hacia abajo; fijuba siis ojos en el caminn; se man pequeñas amarillas, los dos hombres su corpulenta figura se destacaba en tenía silencioso. largo: intervalog se volvieron rápidamente. medida silueta contra la semi obscuridad del encontraban un anto que se dirigía a que pasaba el tiempo, se iban agran cielo. Que tan bondo está esto. Albany. Era ya más de media noche, dando las luces y al fin se oyó el ruidando las luces y al fin se oyó el rui Como 300 pies. contestó Streal ciando a una indicación de Strewl, do producido por la poderosa máquina con voz temblorosa.
tomaron un camino secundario que de un automóvil.
Muy bien. Regresando hacia donde bordeaba una coluna y estaba cercado La Policía! murmuró Strewl Sigue en la página 21 41. 18