SandinoVíctor Raúl Haya de la Torre

32 Amauta camarada Mella del Comité Continental Organizador, autorizándolo para desenmascarar esta maniobra.
Les ruego, camaradas, que tomen las medidas necesarias para informar a la colonia latinoamericana en París.
GIBARTI. Firmado. El Libertador No. 13. Agosto de 1927. Aquí, también, el ARPA se presenta reaccionaria, pues ha pretendido romper la unidad internacional si es que lo que no existe puede romper a lo que es sólido y fuerte como la Liga Internacional Contra el Imperialismo, surgida en Bruselas por la voluntad de los revolucionarios de un medio centenar de naciones. Por lo menos, lo que al pie de su nombre en la tesis sobre la América Latina ella presentó como reservas. no indica nada más que divisionismo, propósitos individuales y mezquinos. No es lo que se dice, ni lo que se piensa lo que valoriza el papel de los hombres, sino los resultados prácticos de acción, y la del ARPA ya está calificada por el Congreso de Bruselas.
HAYA DE LA TORRE COMO FISCALIZADOR DE UN PAR DE TRAIDORES. QUIEN DARA LA RAZON?
Cuando se tiene una base tan falsa como la del programa arpis.
ta se ha de caer en muchos errores. La posición arpista frente al caso de Nicaragua es una prueba de ello.
Todo el mundo sabe que Díaz es un agente del imperialismo, lo mismo que todo e! Partido Conservador. Después de la capitulación a Stimson y de su viaje a Washington a mendigar el apoyo de la Casa Blanca, Moncada y los liberales que lo siguen son también unos agentes del imperialismo y unos traidores. Entre estos dos farsantes se va a llevar a cabo la lucha electoral. Solamente hay un hombre en Nicaragua que representa al pueblo nicaragüense y los intereses de su sobesanía. Este es, como todos reconocn, Augusto Sandino. Este hombre dicen los bandidos de Wall Street que es un bandido. Ante esta situación, véase cómo actúa el ARPA. Prepara una supervisión de las elecciones y se dispone a realizar un fantástico viaje. Si Moncada es un traidor y Díaz algo peor. qué va a supervisar esa Comisión, si ya todos están de acuerdo con la Casa Blanca y los únicos garantizadores del sufragio son los marinos yanquis que dejarán salir electo a quien más les convenga? Si no existiera Sandino, esa supervisión sería útil como propaganda, para desenmascarar después la farsa de los candidatos. Pero existiendo Sandino, dar esa supervisión arpista no tiende más que a desorientar, a pretender dar quizás, un carácter legal a una farsa. En otras palabras: los que no apoyan a Sandino y establecen relaciones con sus enemigos, adolfistas y moncadistas, son prácticamente sus enemigos y unos traidores a los intereses de las clases oprimidas en el continente.
He aquí por qué estamos de acuerdo con la declaración sincera y realista que sobre este asunto hizo la UCSAYA y dirige el revolucionario venezolano doctor Carlos León. Nuestra Unión cree que ese nombramiento constituye una aprobación de la política imperialista de la Casa Blanca, tanto más cuanto