Amauta 39 doamérica dice sin la ciencia y el pensamiento europeos occidentales. Luego agrega El socialismo no es ciertamente una doctrina americana. Pero ninguna doctrina, ni ningún sistema contemporáneo lo es, ni puede serlo. el socialismo aunque haya nacido en Europa como el capitalismo, no es tampoco específica ni particularmente europeo. Es un movimiento mundial al cual no se sustrae ninguno de los países que se mueven dentro de la órbita de la civilización occidental.
Frente a estas conclusiones se debate la gama de oportunistas y diletantes burgueses que agrupados al rededor de un indigenismo. más o menos, reaccionario, destilan su ignorancia en cuestiones sociales. El populismo se diferencia profundamente del socialismo. Mariátegui, las contesta: el problema no es racial sino social y económico; pero la raza tiene su rol en él y en los medios de afrontarlo.
Por supuesto que el autor de El Alma Matinal y otras estaciones del hombre de hoy no pudo tener sino una excesiva tolerancia para las aseveraciones audaces de todos los pensadores de diversos matices que pululan en América. Les opuso resueltamente la teoría y la praxis del proletariado mundial. Por eso Mariátegui no fué un escritor puro y antes que un literato y un apóstol fué un militante consciente del socialismo marxista. Había reclamado un puesto responsable en la lucha social. si algún mérito hay que reclamar para la obra de Mariátegui es éste precisamente y es seguramente el mejor, elogio que puede hacerse de él. Mientras Mariátegui metió toda su sangre en sus ideas, mientras su vida y su obra constituyeron un único proceso, todos los intelectuales pegueño burgueses que sirven a la feudalidad tanto como el capitalismo llorarán su muerte, pero no realizarán su obra. Al proletariado organizado y a los escritores proletarios es a quienes toca esta herencia, es a la Confederación General de Trabajadores del Perú. a la con tanto fervor sirvió, es a los sindicatos revolucionarios, es a las Ligas campesinas a quienes queda toda la responsabilidad de esta labor inmensa. Estamos seguros que los intelectualoides tomarán lo formal y lo contingente de la obra de Mariátegui, estamos convencidos que hoy que ya no existe serán los primeros en desviar su pensamiento.
Frente a la acción negativa de los oportunistas estará siempre alerta la vanguardia organizada del proletariado y su órgano central haciendo realidad su gran sueño de hacerse oír en su invitación a la vida heroica y hoy más que nunca el pensamiento del líder, del jefe agrupará en un solo haz las fuerzas socialistas del Perú que agitarán su nombre como bandera de acción revolucionaria.
SEGANDO MALEZA, por Ratto Ciarlo.
70 pretendo, en pocas palabras y menos con mis modestos medios, agregar nada a lo que fué, es, la múltiple activa figura de José Carlos Mariátegui. Quiero sencillamente contribuir a limpiar el terreno para que los venideros, sobre la Jesplanada libre puedan construir el sólido monumento recuerdo, hecho de doctrinas realizadas, de actos combatidos, de iones conquistadas.