Amauta 25 res; contra el gaseoso populismo de las pequeñas burguesías radicaloides y oportunistas, que también pregonaban una confusa fe en la justicia social. contra el socialismo adocenado, ramplón e inepto de los reformistas y revisionistas. Mariátegui sostuvo siempre la vigorosa teoría marxista de la lucha de clases. El proletariado tiene una misión política primordial en nuestra época; y debe realizar y hacer cuotidianamente su política. Era la enseñanza leninista que orientó la organización y la táctica de la social democracia rusa, antes de la célebre Revolución.
Por eso, nuestros anarco sindicalistas, nuestros populistas. nuestros reformistas. nuestros nacionalistas. opusieron a su modo, la tacha de que Mariátegui era un importador de exóticas doctrinas que la idiosincracia de nuestro medio las haría impracticables. Así tacharon la obra de Mariátegui de europeizante. Pero el criollo argumento no esperó, no reparo, en el contenido sugerente, en el desmentido rotundo que hay en éstas palabras del que había comenzado su prédica instándonos a peruanizar el Perú: No faltan quienes me suponen un europeizante, ageno a los hechos y a las cuestiones de mi país. Que mi obra se encargue de justificarme, contra esta barata e interesada conjetura.
He hecho en Europa mi mejor aprendizaje. creo que no hay salvación para Indo América sin la ciencia y el pensamiento europeos occidentales. Sarmiento que es todavía uno de los creadores de la argentinidad, fué en su época un europeizante. No encontró mejor modo de ser argentino. Cuando la imbecilidad o el engaño, adopten el disfraz de nacionalismo y se denomine nacionalista a lo que es ignorancia, explotación y abuso, éstas palabras de Mariátegui repercutirán siempre en todos los que entienden su labor, como una obra de verdadero nacionalismo Frente al bárbaro gaucho, a Rosas o a Quiroga, estarán Sarmiento y Alberdi, aunque los salvajes unitarios no hayan llamado nacionalista a su propaganda; como en el Perú, frente a la aceitosa y hueca retórica de los que se titulan nacionalistas para encerrar al país en una muralla china, estarán esas palabras de Mariátegui, sencillas y llenas de verdad.
Mariátegui, el europeizante que explicó el desarrollo de la política del mundo con su ESCENA CONTEMPORANEA. cuando nuestro ambiente intelectual eran como signos incomprensibles, cabalisticos, las noticias del cable que publicaban los periódicos; el defensor del marxismo que orientó las ideas y aspiraciones del proletariado evitándole el seguir, con la fe del carbonero, creyendo en la sofistería y los artiluguios de los revisionistas. el sociólogo de los ENSAYOS DE INTERPRETACION DE LA REALIDAD PERUANA. realizó además, una labor educadora con sus variados estudios sobre el arte y la literatura de éstos tiempos. Siempre atento y acertado en la apreciación de los acontecimientos artísticos y literarios de nuestros días, su labor superó a la lenta y retardada nutrición que se hace en los claustros universitarios. No tuvo la opinión incolora y anodina de los comunes glosadores de hechos ideas de nuestro tiempo. Sus observaciones estuvieron siempre teñidas del color vivo de sus ideales. Mis juicios dijo se nutren de mis ideales, de mis sentimientos, de mis pasiones. Ageno a la técnica profesoral y al espíritu universitario. según afirmó, sin embargo fué entre los universitarios, como entre los ebreros, donde éste escritor tuvo las más caras adhesiones; donde más se le admiró y comprendió. Por eso los estudiantes, con toda justicia en