86 Amauta en no puede olvidar que fué atacado por Francia y por Inglaterra inmediatamente después de la guerra. Es éste un hecho histórico olvidado este momento por ustedes; pero, sin embargo, es un hecho histórico de la más alta importancia.
EL IMPERIALISMO FRANCES CONTRA LA REVOLUCION RUSA fe es sia no posee todavía. esto lo saben todos aquí.
Cuando Rusia os ha ofrecido desarmar su ejército de 400. 000 o 500.
000 hombres. no puedo deciros la cifra exacta. por qué os habéis negado a admitir que su ofrecimiento era perfectamente leal y sincero. Aplausos en la extrema izquierda comunista. Os ha ofrecido el desarme inte.
gro. Es ésta una prueba de su deseo de paz. Por qué empleabais vuestra ironía a este respecto?
El pueblo ruso ha llevado a cabo, al terminar la guerra, el acto que sabéis. Ha abandonado las trincheras. Siente un horror instintivo hacia la guerra. Por qué sospecháis de ese pueblo cuando os ofrece el desarme. Aplausos en la extrema izquierda comunista. No. Su buena absoluta.
Quiere dedicar todos sus esfuerzos a la realización del socialismo. Sabe, una vez más, que la guerra puede impedírselo, y esta simple reflexión le hace más odiosa todavía la gue.
rra.
Desearía vivamente consagrar la totalidad de sus recursos a la construcción de la economía soviética. Pero se ve obligado a mantener su ejército, puesto que en frente ve grandiosos ejércitos y armamentos de una extraordinaria importancia; puesto que siente en torno suyo una verdadera atmósfera de dio general, universal.
Es muy comprensible: Rusia constituye un islote en medio del capitalismo mundial. Es muy natural que sea el blanco de todos los ataques y se vea amenazada por todas las agresiones. Rusia las espera, presiente su legada, y nada es más exacto. Puede constatarse en el pueblo una gran tensión contra la guerra. Pero por muy inclinado que esté hacia la paz, por mucha que sea su pasión hacia ella, no puede, sin embargo, olvidar el pasado ni desconocer el presente.
El pasado es necesario que yo os lo recuerde. El proletariado ruso ¡Cómo! En noviembre de 1918 había terminado la guerra. En Salónica había un ejército francés. Acaso se le licenció. Fueron enviados los soldados a sus hogares? Nada de eso. Ya sabéis lo que se hizo de este ejército; fué expedido a la Besarabia, a Crimea, a Odesa y a la región meridional de Ukrania.
El Gobierno francés de entonces invadió Rusia, sin haberle declarado la guerra, sin decirle una palabra al Parlamento, sin consultar a la Cámara o al Senado. Incluso el encargado de hacer el informe sobre el presupuesto de la marina, de Kerguezec, afirmó que el propio Consejo de ministros no había sido prevenido de la operación.
En una palabra: la guerra había terminado, y una antigua aliada, por haber cambiado su Gobierno, la Francia republicana la hizo ocupar por un ejército de 100. 000 hombres, invadió su territorio y trató de hacerle la gueNo se contentó con ocupar el suelo. Le dirigió sobre el Mar Negro una escuadra formidable, comprendiendo 70 navíos de guerra, representando el conjunto de las fuerzas de la marina de guerra francesa.
He aquí lo que hizo la Francia de la República democrática y burguesa.
Ya sabéis lo que sucedió.
En aquel momento tuvieron lugar aquí sesiones cuyas reseñas releía yo ayer mismo.
Se pronunciaron discurOs aconsejo que los releáis a su vez. Habló de Kerguezec, habló Ch. Meunier, hablaron los socialistas, hablaron los radicales.
La cólera de estos hombres fué rra.
ruso sos.