Amauta 15 su casa con la hija de Clavo de Olor. Una biografía de Eguren exigiría para su aristocracia, que yo lograra entrever la pluma y clave de amor. Las miniaturas azules de niñas flores me cuentan la ternura de su adolescencia amorosa. En Paisaje de Garzas, Eguren sueña un amor en vuelo, en nube. Eguren tiene en los ojos la pena de lo que pasa en otros países. Pena infante. Lejos de él, hay una flor que nieva demasiado. Es al Norte de su Estética que él siente la música curva, lenta de las aves.
Conocí a Eguren en mi primera aventura a las porcelanas del Norte. El estaba en paisaje de venados, de cornamentas. Los ojos de los venados: fijos, muertos, siguiendo el itinerario gobelino de Eguren. La luz de las playas nórdicas aseguraron para siempre la mirada lejana de Eguren, la niña de su mirada.
Después de la visita de Eguren a Carl Kiermeieren Danmark, se sabe que irá a conocer el Polo. Eguren es inventor de una pequeña máquina de fotografía para pájaros, ángeles y flores. El nos traerá en cine la flora inédita del Polo. Lo que se fuga del mundo en perfume, en color, en mirada.
EGUREN, éter. Naríz, Cabellera, Pestaña!
EGUREN LOCO se Como nos cuenta Cocteau de Chirico, de tía y tíos locos sorprende en Eguren, que sus poemas son locos, que sus dibujos son locos, que su cabellera, sus ojos y su mundo, es loco. Eguren ha ido creando una manera de su nueva vida: su locura. Sospecho que Eguren juega cartas entre medias luces verdes de espejos y sombras, con reyes y sotas, con ases de copas. Eguren tiene el terror del hombre que desentrañando sombras ha encontrado sangre, crímen. El ha visto algo en el mundo que ha hecho correr lo blanco de sus ojos. Desde sus primeros años hasta su locura no ha hecho sino ver cosas, cosas, cosas.
París, 1927. América, 1929.