28 Amauta El apoliticismo de Ortega y Gasset se ha mostrado, con luz singular, frente a la actual Dictadura española. De la teoría ha pasado a la práctica o, mejor dicho, la práctica ha buscado racionalizarse y justificarse en la teoría. El caso de Ortega no es único en España ni en Europa.
REFLEXIONES FINALES Estas notas de andar y ver no abrazan, no pueden abrazar todo el paisaje. Se trata solo del aspecto negativo, de las resistencias que la obra y el pensamiento de Ortega nos ofrecen a los americanos.
Pocas obras españolas han tenido más repercusión y más difusión en América, que la obra de Ortega, ya por acción o ya por reacción. Le debemos, sobre todo, el habernos puesto en contacto con ciertas zonas considerables del pensamiento europeo contemporáneo. Ha sido un acicateador y un suministrador inteligente de nuestra curiosidad intelectual. Pero este aspecto ya es el aspecto positivo de Ortega. Lo dejamos para otro día y para otra oportunidad.
Trujillo, diciembre de 1928. de la Este ensayo estaba destinado por Antenor Orrego a un número polémico sobre Ortega y Gasset que proyectábamos publicar a su paso por Lima. Pero Lima no estaba en el itinerario de viaje del filósofo español, quien no pudo aceptar la invitación de nuestra Universidad. nuestro proyecto quedó aplazado.
PANORAMA DE LA MODERNA PINTURA EUROPEA, por Sebastián Gasch. pintura mexicana pone especial interés en aparecer como una manifestación autóctona, insobornablemente racial, y desposeída de toda influencia del extranjero. Antes lo había constatado en las reproducciones de las obras de los pintores. Lo afirma ahora ese admirable 130 301, ágil y vibrante, valiente y trepidante, en su trayectoria inicial. ni qué decir tiene cuán justo y razonable me parece este criterio, y cuán favorable es para el logro de una plena resonancia internacional.
En efecto: todo arte que ha conquistado una alta categoría internacional, ha sido siempre un arte eminentemente nacional. Todas las vedettes del arte internacional han sido siempre esencialmente raciales.
El arte llega a ser internacional a fuerza de nacionalismo, a fuerza de racialidad.
Detrás de todas las épocas de Picasso, detrás de todas las aventuras pseudocosmopolitas, del genial malagueño, vive siempre aquella