CommunismExtremistSocialism

Amauta 91 el bochorno de otros días. Es en es tituyen en sí mismos una bandera, tos momentos que se plantea el proble símbolo de una ideología, no hay más ma prošidencial. Quién sucedería a remedio que abordarlas.
Calles? Entonces Serrano se entrevis Debemos reconocer como cierto el ta, con Obregón y le pide su compro hecho que nos consta a todos los que miso de no aceptar una nueva procla nos interesamos por las cosas mexicamación para la Presidencia de la Repú nas de que Obregón posee dominios blica, y de apoyar, en cambio, su can en el Estado de Sonora; pero entiendidatura. Obregón se niega. Repli do que ello no puede afectar el buen ca que si la opinión nacional lo pro nombre de Obregón ni la probidad de clama, aceptará su candidatura. Serra su apostolado. Bien es sabido que no invoca entonces el principio anti Obregón nació en Sonora, de humilde releccionista de la Constitución y orígen, y que allí, gracias a su esfuerbregón, argumentando con sobrado zo y a su tesón, aunque sin duda alfundamento, manifiesta que lo que el guna favorecido por su influencia poprograma del partido y la Constitulítica posterior, logró transformar ción prohiben son las reelecciones campos fecundos y regiones de vida consecutivas, no pudiendo reputarse social primitiva en vastos cultivos con reelección la que tiene lugar después grandes obras de irrigación y en cende transcurrido un período presiden tros de civilización y de progreso. Por cial. En una palabra; en este de lo demás, mediante la formación de bate privado se esgrimen los mismos Cooperativas de producción y de conargumentos que desde la fundación sumo, el prestigioso caudillo asoció del Antireeleccionismo han dividido a a sus negocios y a su obra de prolos hombres de la revolución mexicagreso a muchos campesinos y colonos na en dos sectores, cada uno de los del lugar y de otras localidades de Mécuales interpreta a su manera el le xico, con lo que se justificaría el présma común: Sufragio electivo, tamo de 000. 000 de pesos de que nos reelección. bajo el cual combatieron habla Vasconcelos.
juntos a Porfirio Díaz.
Finalmente, no debe olvidarse que Comprendiendo Serrano que por las Obregón no formó nunca en las fivías legales no habría de alcanzar la las del comunismo agrario ni en la de Presidencia, pues Obregón era el hom ningún otro partido adherido a las bre de mayor prestigio cívico en el doctrinas económico políticas llamapaís, se lanza a la revuelta. Venci das extremistas. recordemos que do por las fuerzas del gobierno, es tanto Obregón como Carranza, como ejecutado de acuerdo con las disposi Vasconcelos y como el propio Madeciones del Código Militar mexicano, ro combatieron a Emilio Zapata, el porque Serrano no es un civil sino leader del agrarismo extremista. Porun miembro del ejército.
que, en efecto, es preciso que se sepa que la revolución mexicana no se He aquí el relato aproximado de los hechos; pero aún cuando de ellos se ha inspirado nunca en los principios desprendería la absolución en favor económico políticos del socialismo mardel gobierno de Calles prefiero abste xista a pesar de las acusaciones de nerme de juzgar, en definitiva, el epí izquierdismo que los reaccionarios o logo de este doloroso episodio de la los ignorantes han dirigido al régivida política mexicana.
men actual de México sino en la tácHe dicho que debemos rehuir las tica política conciliadora de un labocuestiones privadas. Sin embargo, rismo liberal, lo que es perfectamente cuando estas se ofrecen íntimamente lógico dadas las condiciones del meligadas a las cuestiones de interés pú dio mexicano, en que el único partido blico, y cuando, además, se refieren extremista posible sería el agrario; a la conducta de hombres que cons pero que, por carecer de organización no