Amauta 81 veo de acque la gena. admiro el resurgimiento del ni ellos nos dan personalidad, ni campo mexicano, obra de los indios. constituye características y patente de Me apasionan y admiro, con fervor, personalidad, para la nueva poemática todo hecho vivo, palpitante que en es indoamericana, valerse de un anecdote orden de cosas se produce, porque tario proletario, o temas sociales, toen él los gérmenes, las posibili mándolos como elemento y valor esdades, el futuro de la cultura indo téticos, mas que humanos. Insisto aqui americana.
en uno de mis anteriores puntos de Concuerdo con usted, entrando ya vista: una cultura y todas sus mania otras esferas mas limitadas de crifestaciones, entre ellas la literaria, es tica y especulación, en que las que poalgo mas que una simple cuestión fordríamos calificar como manifestaciones mal, de pura preceptiva artística.
propiamente cultas del arte americaCultura es creación, es decir, exno hispano o latinoamericano, ya que presión y revelación una no, aun, indoamericano. de nuestros titud profunda y esencialmente humana.
días, no son mas que un triste calco, Por ello, creo yo que una pobrísima manifestación, que emotividad estética, en el campo arun eco inoriginal, sin valor propio, de tístico y literario, tiene que arrancar las últimas excentricidades del occide una fuente vital, humana, no de dente deadente, agotado. he aquí, una simple curiosidad artística a la algo, a mi manera de ver y entender, cual nos asomemos sin otro interés y paradógico y contradictorio; generalotro móvil que el de esa curiosidad, mente quienes mas usan de esos calPuede surgir, y es de esperarse que cos y remedos, quienes siguen perpesurja, una poemática y un arte social tuando el colonialismo americano, en indoamericano, y que estas sean mael orden cultural, son aquellos que nifestaciones propias y típicas de la más dicen aspirar a un arte amerinueva cultura indoamericana: pero cano y a un autoctonismo americano.
está muy lejos de serlo; una poemaEn mas de una ocasión me he protica que pretende ser indoamericana nunciado, por lo que respecta a su tomando como temas, un anecdotario pretendido y cacareado americanisproletario, aspectos de la lucha social mo, contra esa poemática al uso, tany anti imperialista, echando mano de fáciles tópicos, sin ver en esas fuento que por su creciente difusión y cultivo ha podido llegarse a afirmar que tes mas que un motivo y una posibilidad de orden estético, pero no una encierra en si la posibilidad de una nueva poesía indoamericana, en que posibilidad y una gran pasión humana.
se unen y convergen el cosmopolitismo construído con invocaciones a las Creo que, aisladamente, surgen, urbes de fierro, a los rascacielos y cuajando, algunos destellos y maniartefactos de última invención, a la festaciones de nueva literatura poeaceleración mecánica del siglo. cuán mática genuinamente americana; he lejos, cuán distantes estamos, en creído descubrirlos en algunas cosas nuestros países indoamericanos de to del cubano Juan Marinello, en algo do esto, y cuán ageno nos es subs sumamente sutil de usted, en algo de tancialmente, como cosa vivida y pró los mexicanos Torres Bodet y Ortíz xima a nosotros, este orden de sen de Montellano, que recuerdo (no presaciones. unidos a tópicos proleta tendo hacer una enumeración. Esto, rios, que suenan a arenga barriotera. no habiendo nada anecdóticamente, No es eso, la nueva literatura indo pintorescamente local, de autoctonisamericana: será, indudablemente, al mo topográfico, en esa poesía. Pero go mas profundo, mas nuestro, mas hay en todas llas, como antes le dearraigado, que todo esto. Nuestra cía, una categoría superior esencial, América no es la de los rascacielos, es decir, una superación viva y laten