BourgeoisieStrike

48 Amauta piedras se abren camino. En mitad de esta calle se produce una nueva carga que es igualmente rechazada por los obreros victoriosos. Así, en todo el recorrido, la fuerza armada fracasa cada vez que intenta cerrarles el paso.
En la Plaza de Armas se estacionan mas de dos mil personas en el atrio de la Basílica. Nicolás Gutarra se dirige a los obreros protestando del atropello. Hablan también en este sentido, Carlos Barba y algunas obreras. Piden el castigo de las autoridades responsables.
La caballería custodia el Palacio de Gobierno. El camarada Gutarra somete a la aceptación de los presentes. Que el comité oficie al Poder Judicial para que no se de curso a los desahucios por haberse declarado la huelga de inquilinos y hasta que no se dé por solucionado el conflicto con los propietarios.
Carlos Barba lee las siguientes conclusiones, aprobadas con grandes aplausos. Las mujeres de Lima, pueblos circunvecinos y campesinos reunidos en gran comicio público el domingo 25 de mayo de 1919 en el Parque Neptuno, teniendo en consideración: Que no es posible tolerar por mas tiempo, la situación de miseria a que la carestía de las subsistencias y alquileres de habitaciones y todo lo necesario para la vida ha reducido al pueblo; Que la mujer peruana, al igual de la de todos los pueblos civilizados, ha comprendido su alta misión de intervenir en la resolución de los problemas económicos sociales que le afectan; Han acordado: 10. Hacer suyas las conclusiones del mitin popular realizado en la Alameda de los Descalzos el del pte.
20. En caso de no ser aceptadas dichas conclusiones, proclamar un paro general femenino en todos los ramos, dejando la fecha a juicio del Comité masculino Pro Abaratamiento de las Subsistencias.
Los manifestantes se disuelven, dando fin al acto. Segun relacion de los periódicos de la época, fueron muchas las mujeres heridas de bala y sable.
EL PLENO DEL Terminado el mitin, el Comité en pleno se reune COMITE. en el local de la Sociedad Hijos del Sol, donde sesióna con asistencia de todas las delegaciones.
La actitud de sus miembros es de airada protesta. Se improvisa discursos atacando a la burguesía que confiada en la fuerza de que dispone, atropella una manifestación de obreras indefensas, porque piden ser mejoradas económicamente. Es una sesión cálida, arrebatada, frenética. Los músculos de estos hombres estan contraídos de justa cólera. Se forman inmediatamente decenas de subcomités distribuídos en las distintas zonas de la ciudad y alrededores, a las órdenes de la central de Lima, listos para secundar las actividades encaminadas a la organización del movimiento.
Toman los siguientes acuerdos: 10. Redactar una protesta por los sangrientos sucesos ocasionados por el comisario Montes de Oca.