82 son: Amauta hechos más notorios, desde el punto de vista de estas modificaciones, a) Despedida de los viejos obreros y sustitución cada vez más frecuente de los obreros calificados por peones especializados, mujeres y jóvenes. Reducción sistemática de la aristocracia obrera, agravación de los antagonismos entre ella y las grandes masas obreras, a causa de la diferencia sistemáticamente aumentada entre los salarios de unos y otros. pesar de la reducción del número absoluto de empleados, es preciso observar que, en la industria, el número relativo del personal de oficina, contramaestres y vigilantes, ha aumentado; b) Licenciamiento de un número cada vez más considerable de obreros, y notablemente de los trabajadores llamados improductivos. tales como porteros, guardianes, obreros del entretenimiento de las fábricas, etc. despedida de empleados en el comercio, en los bancos y en las compañías de seguros; así como en las administraciones. Los trabajadores que pierden su empleo, así tienen muchas dificultades para colocarse. Una parte de ellos pasan a ser parados temporales; otra parte viene a aumentar las filas de los parados parciales, y, en fin, el resto entra para siempre en la categoría llamada de la mano de obra superflua.
Una de las consecuencias directas sociales y económicas de la racionalización capitalista es que ha creado un ejército permanente de parados que no desaparecen ni siquiera en períodos de prosperidad económica. Una parte de estos parados caen completamente en el pauperismo.
40. La racionalización de las empresas produce un desgaste más intenso del organismo del obrero. La prueba de esta aserción es el número creciente de accidentes del trabajo y notablemente del número de accidentes mortales, y el crecimiento de las enfermedades profesionales y de los casos de invalidez prematura. La racionalización ejerce una acción particularmente penosa y destructiva sobre los obreros.
50.
Es preciso sostener una lucha enérgica, en el terreno de las reinvidicaciones concretas, contra todas las consecuencias de la racionalización capitalista funesta para el proletariado. es preciso señalar que, paralelamente a la racionalización, se adoptan medidas ideológicas y políticas especiales contra la clase obrera. Indiquemos aýn que el reformismo sostiene integralmente la racionalización capitalista y se hace incluso el ejecutor de las tareas fijadas por el capitalismo para la racionalización.
60. Las principales reinvindicaciones concretas dirigidas contra la racionalización capitalista, son las siguientes: 1o. Jornada de siete horas sin reducción de los salarios, como duración máxima del trabajo; jornada de seis horas para los trabajos de fondo en la industria minera, en las industrias particularmente insalubres y fatigantes y para los jóvenes obreros menores de 18 años.
Supresión del sistema de las horas suplementarias; reinvindicación de la cesación del trabajo más pronto en vísperas de días de fiesta y domingos, vacaciones anuales de 14 días como mínimo pagadas con el salario integral, y un mes de va nes al menos, pagadas, para los obreros del fondo en la industria minera, así como para los 20.