4 Amauta Nombres de obras. Un indice? Es difícil Buscad en Romain Rolland, ante todo; en Barbusse (Clarté, por ejemplo. en Georges Duhamel que ha visto admrablemente el lado pueblo de la catástrofe del 14. 18, en Romains (Le vin blanc de la Vilette. en Vildrac (Le paquebot Tenacity. en Bloch, en Martinet, en Hamp (toda La Peine des Hommes. en la última generación, Jolinon, Chamson.
Pero nuestras resoluciones en la vida no están nutridas de cienComo veis, esta lista es bastante incompleta.
Luc Durtain.
LEON WERTH: ¿Quién puede creer hoy que la producción artística e intelectual sea un fenómeno puramente individual. Por poco curioso que sea uno de nuestros contemporáneos de las búsquedas de los sociólogos, no puede ignorar, cómo la noción del individuo, del absoluto individuo, del dios individuo, retrocede ante sus investigaciones.
Esto no disminuye el valor en calidad del individuo sino el número o la naturaleza de los caracteres con los cuales podemos definirlo. El individuo se había adornado demasiado largo tiempo con las plumas de lo biológico y de lo social.
El vasto problema que vosotros planteáis no es, pues, sino un aspecto de este problema más vasto: las relaciones de lo individual y lo collectivo. Pero para precisarlo, no es bastante decir que una vida humana no sería suficiente. Hacen falta siglos de ciencia para que alcancemos si nó verdades, al menos, aptitudes de verdad.
Pero nuestras resoluciones en la vida no están nutridas de ciencia pura.
Yo pienso solamente que no hay que contentarse de los procedimientos de la amplificación literaria. Es demasiado fácil redactar una especie de defensa donde se opondrían y se balancearían lo individual y lo social. Se logra así esta verdad de abogado, suficiente a las disertaciones escolares y a las crónicas.
Por el instante, no podemos intentar precisar las relaciones del arte y de la sociedad, sino por una observación escrupulosa de las obras y de las condiciones en que éstas fueron concebidas. Es un trabajo diverso del pequeño juego de Traine, trucado como una lotería de feria, más al revés; de ese pequeño juego en el cual se gana todos los golpes.
En resumen, no pienso que la obra de arte pueda o debe ser el reflejo de las grandes corrientes. pienso que simplemente lo es.
Pero. cómo precisar esta relación en tan poco espacio. Es evidente que es infinitamente compleja. El arte es un lenguaje. Comporta una trasmisión de signos. estos signos no nacen y mueren al mismo tiempo que se operan las revoluciones y que se transforman las sociedades. Estoy demasiado mediocremente informado desde hace algunos años para responder con precisión a vuestra segunda pregunta.
Pero creo firmemente en el nacimiento de una literatura revolucionaria. lo que me hace creerlo más, es nuestra literatura revolucionaria.
lo que me hace creerlo más aún, es nuestra literatura actual de decadencia burguesa, esta curiosa mezcla de saldos de la cultura jesuita, de