Amauta 29 Después de las últimas deserciones de los que se titularon generales nacionalistas, pero que en realidad no abrigaban más propósito que hacer carrera política y militar, la revolución social ha comenzado a transformarse principalmente en revolución agraria. Hasta entonces la revolución se había manifestado más en las ciudades. Las operaciones militares y los movimientos políticos y económicos de los obreros, eran las características esenciales de la Revolución.
En el capítulo correspondiente hemos expuesto la importancia tan fundamental que el problema agrario tiene en aquel país.
Por eso se explica que la Revolución en China adquiera en lo sucesivo un carácter nacional. La revolución agraria constituye el eje del desarrollo ulterior del movimiento revolucionario. Solamente haciendo la revolución agraria, es decir, social, pueden acabar los chinos con el viejo aparato estatal de los propietarios terratenientes y de los usureros.
La parte sana de la izquierda del Kuomintang, que no ha querido seguir a los jefes en sus traiciones y que además los ha combatido con las armas en la mano, comienza incluso ya a organizarse en movimiento agrario. comienzos de junio de 1927, Deng Janda, director del Comité agrario del Komintang, presentó la dimisión de su cargo de jefe de la sección política del Kuomintang.
Deng Janda ha formado una nueva izquierda en el partido nacional. En su programa preconiza la destrucción del antiguo sistema económico, la edificación de una nueva vida económica y social, y señala que uno de los puntos esenciales de la doctrina de Sun Yat Sen, es la revolución agraria.
Los campesinos, durante el curso de la revolución nacional, han mantenido sus propias organizaciones. La ofensiva contra el Norte dió un gran impulso al movimiento agrario en Hunan, Tientsin y Hupé. La sublevación de Nantchang fué también una consecuencia política de este despertar de las masas campesinas.
LA SUBLEVACION 0BRERA DE CANTON Puede decirse que el Kuomintang ha dejado de existir como organización política que englobaba el total de las masas chinas partidarias de la independencia de su país. El Kuomintang ha dejado de existir víctima de sus contradicciones interiores y de las traiciones de sus directores. El sunyatsènismo. concepción política de carácter liberal, ha sido superado por el mismo curso de los acontecimientos de la Revolución. El que fué programa del movimiento nacional chino, no puede ya hoy satisfacer las necesidades políticas de las grandes masas obreras campesinas de aquel inmenso país.
Como consecuencia de estos hechos, la Revolución toma una nueva orientación más radical. Las masas de las ciudades y de los campos, que habían unido sus fuerzas al Partido nacional, se se