16 Amauta vital que estaba pugnando y madurándose en todo el continente. Prueba de ello es su fulminante repercusión y contaminación ecuménicas. 1) Véase en el No. 14 de Amauta ¿Cuál es la cultura que creará América? y en el No. 13 El Gran Destino de América. por Antenor Orrego.
POEMA TURISTA DEL MAR ATLANTICO, por Xavier Xavier Abril Mi poema mide el Atlántico hasta la marejada de las islas Azores.
Las Bermudas tienen un raro sabor de pipa inglesa; de buen veraneo; de máquinas Kodacks; de amores ingleses largos y muy delicados; de perros lobos cuidados por lores, pareciéndose mucho más los lores a los perros lobos que los lobos a los perros lores.
La niebla ha establecido en las Bermudas un veraneo exótico para las noticias de los alambres eléctricos, telegráficos. Manera agradable de gozar de los londinenses desde la ancha Inglaterra.
La Habana me invita a veranear en el trópico con una Yanque experta en dollares.
Xamaica está bien en el mediodía del mar; después de leer un libro con portada amarilla donde sucedió una cosa muy seria. Xamaica queda necesarimente en uno. Al salir de Xamaica ya se ha hecho el contrato para regresar.
Las palmeras más altas se quedan con mis divagaciones y paseos de las noches calurosas.
Una negra hace conmigo buena inteligencia de senos para lo que durará el largo viaje a Europa.
Xamaica es el seguro en la vida del hombre cosmopolita. Xamaica nos dá la pauta de la flora alegre; nos hace especialistas en eso de saber lo que viaja en las maletas seguras de cierre americano. Xamaica nos hace un infinitud de cosas. Xamaica, buena novia que dejamos de pronto. Isla de amor de pantallas modernas. Línea de vapores Paul Morand Giraudoux hacia los puertos sin nombre. Xamaica, dirección espléndida para una carta contemporánea. Xamaica, enfin, tierra mineral de la dicha que yo visitaría otra vez pero con el ensoñado y largo de Lord Dunsany.
Xamaica: un negro delgado, alto y feo, tan feo como una cáscara de plátano era por el sol. Pero todo el cuadro precioso. negritos y perritos; pero los perritos blancos como es natural. Con el movimiento de las palmeras en Xamaica, yo veo hacia el Pacífico que tu casa se mueve. Cuidas las vidas delgadas de las palmeras cuando llega tu mirada por los cielos que voy. El Trópico te lo fumas cuando vamos de viaje a Europa.
Tus perros blancos se quedan sin tu amor, rabiando furiosamente a los espejos y útiles de concha de tu tocador.
Los novios siguen el curso de nuestros deseos. Pero cuando hace tanto calor al pasar el trópico, tengo la sensación de los celos precipitados. Yo soy on cornudo aunque no sea sino por satisfacción emotiva. Sospecho que para los buenos maridos esto sería un consuelo.
Todos los maridos y amantes son cornudos al pasar el Trópico. esto es natural. Lo otro, también es natural.