AMAUTA 20 DE TENTATIVA DEL HOMBRE INFINITO los árboles interesantes como periódicos los caseríos los (rieles ay el lugar decaído en que el arco iris deja su pollera enredada al huír todo como los poetas los filósofos las parejas que se aman yo lo comienzo a celebrar entusiasta sencillo yo tengo la alegría de los panaderos contentos y entonces amanecía débilmente como un color de violín con un sonido de campana con el olor de la larga distancia.
PABLO NERUDA.
LA POESIA DE PABLO NERUDA veo una abeja rondando no existe esa abeja ahora pequeña mosca con patas lacres mientras golpea cada vez (tu vuelo inclino la cabeza desvalidamente sigo un cordón que marca siquiera una presencia una si(tuación cualquiera oigo adormecerse el silencio con olas sucesivas revuelven vuelven ecos aturdidos entonces canto en alta voz párate sombra de estrella en las cejas de un hombre a la (vuelta de un camino que lleva a la espalda una mujer pálida de oro parecida a (si misma todo está perdido las semanas están cerradas veo dirigirse el viento con un propósito seguro como una flor que debe perfumar abro el otoño taciturno visito la situación de los naufragios en el fondo del cielo entonces aparecen los pájaros como (letras y el alba se divisa apenas como la cáscara de un fruto o es que entonces sumerjes tus pies en otra distancia el día es de fuego y se apuntala en sus colores el mar lleno de trapos verdes sus salivas murmullan soy (el mar el movimiento atraído la inquieta caja tengo fresca el alma con todas mis respiraciones ahí sofoco al lado de las noches antárticas me pongo la luna como una flor de jacinto la moja mi lá(grima lúgubre ahito estoy y anda mi vida con todos los pies parecidos crío el sobresalto me lleno de te or transparente estoy solo en una pieza sin venianas sin tener que hacer con los itinerarios extraviados veo llenarse de caracoles las paredes como orillas de bu(ques pego la cara a ellas absorto profundamente siguiendo un reloj no amando la noche quiero que pase con su tejido de culebra con luces guirnalda de fríos mi cinturón da vueltas muchas veces soy la yegua que sola galopa perdidamente a la siga del (alba muy triste agujero sin cesar cuando acompaño con mi sordera extre(meciéndose saltan como elásticos o peces los habitantes acostados mis alas absorven como el pabellón de un parque con ol(vido amanecen los puertos como herraduras abandonadas ay me sorprendo canto en la carpa delirante como un equilibrista enamorado o el primer pescador pobre hombre que aislas temblando como una gota un cuadro de tiempo completamente inmóvil Neruda es de los artistas que no admiten reservas. Es de los que llegan y desde que principian a hablar dicen palabras definitivas.
Lírico noble, poeta de la más fina estirpe. En su canción hay empuje de mar; vértigo de urbe contemporánea y agitaciones de puerto en su hora meridiana y sin sabor en su hora de herradura abandonada.
Para Neruda no hay secretos en el universo. Porque el Universo entró en él por los caminos de sus sentidos y sus pasos estuvieron en todos los caminos del Universo. En sus pupilas, las cosas se transforman, se alucinan de estraña manera: la urbe es en la hora nocturna y junto al gran océano de su tristeza: Arbol de estertor, candelabro de llamas viejas distante incendio.
Después de Crepusculario y Veinte poemas de Amor. su poesía tenía que empinarse hasta tentativa del hombre infinito.
Nombre, poema ya, que tiene el ímpetu y la sugerencia necesarias para ser anuncio de un nuevo acontecimiento.
En Crepusculario. la voz de Neruda se vierte fácil, sencilla y comprensible para todos. En Veinte Poemas se sutiliza hasta hacerse casi inaprehensible. Pero en tentativa del hombre infini.
to el espectáculo adquiere lejanías imposibles, vértigos, luces, sombras. solo subran de esa vida los ojos elegidos.
Para entrar él es necesario ajustarse bien todas las facultades y saber llegar al extremo límite de las posibilidades y jugar en las aristas cortantes de todos los equilibrios.
Es necesario tener sabias las pupilas y los timpanos amaestrados para poder distinguir el jadeo azul del viento encima de los mares y los colores íntimos de las voces que hablan, porque aquí la luz tiene filos y la sombra martillea sobre el gran yunque de la noche.
Mundo enteramente nuevo, al acabar de leer el libro viene a nosotros un divino cansancio y las cosas que vimos nos persiguen pegadas a nuestros sentidos, se agitan, se arratran con el ritmo de nuestra propia vida. a tu árbol noche querida sube un niño a robarse las frutas y los lagartos brotan de tu pesada vestidura nos invade la delicia de un cinturón de frutas De las manos de Pablo Neruda, saltaron tantos caminos. Por ellos siguen hoy muchos poetas de su patria. gran parte de la poesía americana está signada con los signos de él.
Ahora, Neruda está en la luz como el mediodía en la tierra y todo lo quiere y lo puede cantar con la más honda y limpia de las ternuras humanas.
Armando Bazán el mes de junio se extendió de repente en el tiempo con se(riedad y exactitud como un caballo y en el relámpago crucé la orilla ay el crujir del aire pacífico era muy grande los cinematógrafos desocupados el color de los cemente(rios los buques distraídos las tristezas encima de los follajes encima de las astas de las vacas la noche tirante su trapo (bailando el movimiento rápido del día igual al de las manos que (detienen un vehículo yo asustado comía oh lluvia que creces como las palabras oh vitrolas ensi(mismadas personas de corazón voluntarioso todo lo celebre en un tren de satisfacciones donde mi retrato tiene detrás el mundo que describo con pasión