AMAUTA 17 NA NO CHE TERRIBLE POR MIGUEL ZOSOHENKO AUTORETRATO he aquí el desnudo elenco de los acontecimientos que me conciernen: Arrestado: veces; Condenado a muerte: vez; Herido: veces; Homicidio frustrado: veces; Golpeado: veces.
Todo esto no me acaeció por aventurerismo sino simplemente porque sì. No he tenido fortuna. Ahora he contraído un mal al corazón y talvez por esto me he vuelto escritor. De otro modo sería todavía aviador.
He ahí todo.
Si, por poco no lo olvidaba: he escrito un libro. Cuentos Rasnotyk (no impreso, talvez editaré una parte. Otro libro mío, Los cuentos de Nagar Iliich, señor Sinebriuchov está en venta. Se vende, creo en los almacenes de artículos alimenticios, porque no lo he visto en las vitrinas de los libreros. el libro se ha agotado en dos ejemplares. Uno lo ha comprado una buena persona, Zoe Gatskevitch, el otro ciertamente Moghilanski, para su recensión. Un tercer ejemplar lo queríá comprar Guber, pero después lo pensó mejor.
Termino.
Entre los escritores modernos solo puedo leer a mí mismo y a Lunatcharsky. Entre los poetas modernos, me gustan más que todos Olenka Siv Neldichen.
Pero de Guchov no se nada.
UNA NOCHE TERRIBLE CAPITULO Mi padre es pintor, mi madre actriz. Digo esto porque en Poltava, existen todavía otros Zoschenko.
Por ejemplo: Egor Zoschenko, sastre para señoras. en Melitopol, un ginecólogo Zoschenko. Declaro que de estas personas no soy pariente, no las conozco y no tengo ningún deseo de conocerlas. Por su causa, lo digo claramente, no deseo siquiera devenir un gran escritor. Sin duda vendrían a buscarme. Me ha llegado ya una tía de la Ukrania.
En general ser un escritor es muy difícil. Hasta por la ideologia. Hoy se reclama al escritor una ideología. He aquí que Voronski, que es una buena persona, escribe: Los escritores deben precisarse a sí mismos ideológicamente. Esto verdaderamente es para mí un fastidio. Qué ideología puedo tener yo a quién ningún partido atrae enteramente?
Desde el punto de vista de los hombres de partido, yo soy un hombre sin principios. Pues bién, así sea. Yo mismo lo digo: no soy comunista, no soy socialista revolucionario, no soy monarquista, sino simplemente ruso. Y, además, políticamente inmoral.
Doy mi palabra de honor de que no conozco todavía, pongamos, a Guchov. qué partido pertenece Guchov?
Lo sabe el diablo. No es bolchevique sino socialista revo: lucionario o cadete. No lo sé y no lo quiero saber, pero aunque venga a saberlo, continuaré amando a Pushkin como antes.
Muchos están irritados contra mí por esto. Qué inocencia, dicen, se ha conservado después de tres revoluciones. Pero es así. esta ignorancia es una alegría para mi.
No odio a nadie. he aquí mi precisa ideología. Pero. todavía mas precisamente? Más precisamente todavía, por impulso general, los más vecinos a mi son los bolcheviques. Estoy de acuerdo con ellos en el bolchevizar.
Si. Quién puede ser bolchevique sino yó? Yo no creo en Dios. Me hace hasta reir, me es incomprensible cómo un hombre inteligente vaya a la iglesia y se ponga a rezar delante de una imagen pintada. No soy místico. No amo las vejeces. No reconozco la parentela de sangre y amo la Rusia campesina.
En esto estoy sobre la misma vía de los bolcheviques.
Pero no soy comunista (mejor, no soy marxista) y creo que no lo seré jamás, Tengo veintisiete años. Olenka Siv, piensa que tengo menos. Pero es así.
En 1913 entré a la Universidad. En 1914 parti para el Cáucaso. Me bati en duelo en Kislovodk con el abogado Después de esto sentí derrepente que era un hombre éxtraordinario, un héroe y un aventurero y merché voluntario a la guerra. Fuí oficial. No cuento más, porque me perjudicaría. Escribo ahora las memorias de un ex oficial, no de mí mismo, se comprende, pero ahí estará todo. Estará también como una vez, durante la revolución, me encerraron con el maestro Chorun en el frigorífico de la ciudad.
Después de la revolución hé vagabundeado por diversos lugares de Rusia. He sido carpintero; he ido a la nueva Zemlia a trabajar en la industria de la caza. He prestado servicio como telefonista, luego como soldado, he sido agente de la policía criminal y actor y después he estado de nuevo en el frente como voluntario del ejército rojo.
No he sido doctor. En 1917, después de la revolución los soldados me eligieron viejo doctor, aunque fuese coman, dante de batallón. Esto sucedió porque el viejo doctor del regimiento era varo de permisos a los soldados enfermos.
Yo les parecí más complaciente.
No bromeo, Hablo en serio, Escribes, escribes, y no se sabe porqué escribes. Apuesto que el lector aquí sonreira. el dinero? dirá. No te guardas el dinero, hijo de una gallina? Hasta qué punto, dirá, engorda la gente. Eh! respetable lector. qué cosa és el dinero? Está bien, recibirás el dinero, comprarás por ejemplo leña y a tu mujer le regalarás zapatos.
He ahí todo. En el dinero no está la tranquilidad del alma ni una idea universal. Además si se prescindiese de este cálculo mezquino, interesado, el autor rompería con toda la literatura. Dejaría de escribir y quebraría la pluma.
Ni más ni menos.
El lector, se ha vuelto ahora, algo terrible. Se arroja sobre las novelas francesas y americanas, pero la literatura rusu, literatura patria, no la toma siquiera en las manos.
En el libro quiere encontrar un vehemente vuelo de la fantasía, un asunto así, y así el diablo sabe cual. Pero. dónde encontrar todo esto. Donde encontrar este vuelo vehemente de la fantasía, si la realidad rusa no es así? En cuanto a la revolución, se encuentra en ella una fantasía majestuosa. Pero intentad describirla. Dirán: no es exacto, no es verdad. Dirán: no hay el fundamento científico de la cuestión. La ideología, dirán, no es nada de extraordinario. donde hallar esta ponderación. Donde tomar esta ponderación científica y la ideología, si el autor ha nacido en una familia de pequeños burgueses y no ha logrado todavía sofocar en sí los intereses burgueses y el amor, pongamos, por las flores, por las cortinas y por las poltronas muelles?
Eh respetable lector. Es una fea cosa ser il escritor ruso. El extranjero escribe y no se preocupa más del asunto. Te hablará de la Luna y dará curso a la vehemencia de su fantasía y escribirá en torno a las fieras y mandará a su héroe a la luna en algún proyectil. esto importa.