Trotsky

AMAUTA 17 CUENTOS DE LA CABALLERIA ROJA A A T POR BABEL He aquí la carta que Kurdjukov me ha dictado para su pueblo. No merece el olvido. La he copiado sin arreglarla y la trasmito literalmente de acuerdo con la verdad.
Querida mamá Eudokia Feodorovna: En las primeras líneas de esta carta me apresuro a informaros, que gracias a Dios estoy vivo y sano y que deseo saber lo mismo de vos. también os saludo profundamente con la cabeza inclinada hasta el suelo.(sigue la relación de parientes, compadres, etc. Querida mamá Eudokia Feodorovna Kurdjukova.
Me apresuro a escribiros que me encuentro en el ejército rojo de caballería del compañero Budienny y que aquí se encuentra también vuestro compadre Nikon Vasilievitch, quien es en este momento un héroe rojo. El me ha tomado consigo, en la expedición del politotdiel (1) para distribuir en las posiciones los libros y los periódicos: Las Noticias de Moscú, La Verdad de Moscú y nuestro despiadado periódico El Jinete Rojo. que todo combatiente de las avanzadas quiere leer, después de lo cual con espíritu heroico bate a los polacos bribones. Yo vivo magníficamente con Nikon Vasilievitch.
Amada mamá Eudokia Feodorovna Mandadme lo que podáis según vuestras fuerzas y posibilidades. Os ruego que matéis al chanchito manchado y me enviés un paquete dirigido al Politotdiel del compañero Budienny, a Basilio Kurdjukov. Todos los días voy a dormir sin comer y sin vestido así es que tengo mucho frío. Escribidme una carta sobre mi Stiopa, si está vivo o no. Os ruego cuidarle y escribirme si todavía se golpea una pata con otra o si no lo hace más y también si tiene aún el prurito que tenia en las piernas anteriores y si ha sido herrado o no. Os ruego querida Eudokia Feodorovna que le lavéis las piernas anteriores con el jabón que he dejado detrás de los íconos y si papá se lo ha gastado, comprad otro en Krasnodar que Dios no os abandonara. Puedo escribiros también que este lugar es pobrísimo. Los campesinos se esconden con sus caballos, huyendo de nuestra águilas rojas, en las florestas.
Se vé muy poco trigo y del que hay, menudísimo, nos reimos.
Los patrones siembran trigo y también avena. Sobre las pérticas crece el lúpulo, de modo que se tiene la impresión de que todo esté muy bien ordenado. Con el lúpulo se hace el vodka casero.
En las segundas líneas de esta carta me apresuro a escribiros que papá ha matado a golpes de sable al hermano Feodor Timofeich Kurdjukov hace un año. Nuestra brigada roja asaltaba la ciudad de Rostov, cuando en nuestras filas ocurrió una traición. Papá en este momento estaba con Denikin como comandante de compañía. Los que lo han visto decían que portaba medallas sobre el pecho como se usaba bajo el viejo régimen. Ya causa de esta traición hemos sido hechos prisioneros todos y el hermano Feodor Timofeich ha caldo bajo los ojos de papá. Papá comenzó a golpear al tio diciéndole: bestia, perro rojo, hijo de perra y otras cosas. comenzó a golpearle hasta que vino la noche, hasta que el hermano Feodor murió. Yo os escribi entonces para deciros que vuestro hermano Fedia yace sin cruz. Pero papá me sorprendió con la carta y dijo: sois hijos de vuestra madre, sois de su misma raiz de prostituta, pero soy yo el que la he fecundado y lo haré todavia, mi vida está arruinada, por la verdad destruiré mi simiente, y otras cosas. Yo aceptaba de él los sufrimientos como Jesúcristo. Pero pronto escape y alcancé a mi brigada comandada por el compañero Apanasienko. Nuestra brigada recibid orden de marchar a la ciudad de Voronez para tomar refuerzo. Tuvimos los refuerzos como también los caballos, las bolsas y todo lo que nos correspondía. De Voronez os puedo decir, amada madre Eudokia Feodorovna, que es un pueblo magnífico. Será más grande que Krasnodar, los hombres son muy hermosos y hay un riachuelo adecuado para los baños. Nos daban dos libras de pan al día, media libra de carne y también toda el azúcar necesaria, así que al levantarnos tomábamos el té dulce y aún cenábamos y habíamos así olvidado el hambre y a la hora de la comida yo iba donde el hermano Semion Timofeich por las frituras y después me dirigía a reposar. En este tiempo Semion Timofeich, quería ser, por su temeridad, comandante de todo el regimiento y el compañero Budienny dió una orden y el recibió dos caballos, buen vestuario, un carro separado para el equipaje y la condecoración de la bandera roja. Yo era considerado como su hermano. Ahora si algún vecino se permite ofenderos, Semion Timofeich lo podrá desollar sin más ni más. Después hemos comenzado a rechazar al general Denikin, hemos degollado a miles de los suyos y los hemos arrojado al Mar Negro. Pero a papá no se le veia por ninguna parte y Semion Timofeich lo había buscado en todas las posiciones porque estaba muy triste por la falta del hermano Feodor. Pero come vos conoceis, querida mamá, el caracter obstinado de papá, os diré que había hecho esto: se había teñido descaradamente la barba de un color rojo o castaño oscuro y se encontraba en la ciudad de Maikop sin uniforme, así que ninguno de los habitantes sabia que el era el más fiel de los servidores del viejo régimen. Pero la verdad salé siempre a flote y vuestro compadre Nikon Vasillevitch lo encontró por casualidad en la casa de un habitante del lugar y escribió una carta a Semion Timofeich.
Montamos a caballo y caminamos doscientas vestas po, el hermano Senka y los voluntarios del campamento. qué cosa vimos en la ciudad de Maikop? Vimos que las retrovías no simpatizan con el frente y que en todas partes se encuentra traición y una banda de hebreos, como bajo el viejo régimen. Semion Timofeich ha reñido mucho en la ciudad de Maikop con los hebreos porque éstos no querían entregar a papá y lo habían encerrado en una prisión bajo llave, diciendo que había llegado orden del compañero Trotzky de no matar a los prisioneros: Nosotros mismos lo juzgaremos, no os molesteis, recibirá el cas.
tigo que merece. Pero Semion Timofeich se salió con la suya. Demostró que era el comandante del regimiento y que el compañero Budienny le había otorgado todas las condecoraciones de la Bandera Roja y amenazó con acabar con todos los que discutían por papá y no lo entregaban. Del mismo modo amenazaban los muchachos del campamento.
Así Semion Timofeich obtuvo a papá. Apenas lo tuvo comenzó a fustigarlo. Luego alineó a todos los combatientes en orden militar y, entonces, echó agua a la barba de papá Timofei Rodionovich y de la barba cayó lavado el color. Senka preguntó a Timofei Rodionovich. Os encontrais bien en mis manos, papá. N6, dijo papá, me siento mal.
Entonces Senka preguntó. Feodor se sentía bien en vuestras manos cuando lo habéis cortado en pedazos. Nó, respondió papá, Feodor estaba mal.
Entonces Senka preguntó. no habéis pensado, papá, que también vos estaríais mal. No, dijo papá, no he pensado que estaría mal.
Senka se volvió a los hombres y dijo: