Russian Revolution

6 AMAUTA LA UNIVERSIDAD OFICIAL ES SOLO UN ORGANISMO BUROCRATICO CANCION DE NOCHE Si la universidad oficial no es capaz de reformarse, fijémosle, de una vez por todas, papel de organismo burocrático, expedidor de diplomas, y su función de impartir el conocimiento técnico, necesario para ejercer profesiones u oficios, y, en lugar de perder nuestro esfuerzo procurando reformarla, creemos otro organismo espontáneo y desinteresado, que nazca de nuestra iniciativa cordial, que reciba el calor de nuestra sangre joven, que lleve el sello de nuestra espiritualidad y que ponga a prueba, en esta hora histórica, la verdadera eficacia de nuestro dinamismo renovador y constructivo.
Ninguna acción es más fecunda en sugestiones y enseñanzas que la realizada cooperativa y solidariamente por un esfuerzo común, producto de afinidad selectiva, y tendiente a una finalidad común, por encima de los intereses particulares inmediatos. El esfuerzo popular espontáneamente concertado tonifica, depura y fortalece la conciencia social, y debemos buscar en él la influencia saludable que nos haga abandonar definitivamente la tradicional obsti nación también hereditaria de pedir todo al gobierno, de exigirlo todo del gobierno, de echar al gobierno la culpa de todo.
Ha venido el ave tenue, de la luna mensajera; se columpia en los jardines de Malvina soñadora.
Ha venido tenue el ave, la celeste maromera; y a la niña, clara entona los andantes de la noche.
Canta el ave selenita la canción de las linternas, el lunaje donde ríen las sonámbulas figuras: trova el ave candorosa de esperanza las lunelas, el amor en los azules y luceros pensativos, del espacio los bateles invisibles y las malas; a Malvina va tejiendo sus maromas fantasmales; sube lívida, y se apaga en la noche de la luna.
LA UNIVERSIDAD LIBRE FORJARÀ HOMBRES Jose EGUREN.
Dejemos librada a las universidades oficiales la tarea de formar ingenieros, médicos, abogados, etc. más disputémosles de frente la altísima misión de formar hombres, de formar grandes hombres. Dejemos a las universidades oficiales la tarea pedestre y exigua de enseñar la ley, mas disputémosle la misión de rectificarla en nombre de la justicia, sin contemplar los intereses creados que traban el libre juego de la voluntad social. Dejemos a las universidades oficiales el triste privilegio de enseñar la ética en los libros, más disputémosles la misión de enseñarla en la vida, en el amplio escenario de la vida. Dejémosles impartir el saber, dosificado y lastrado burguesamente, más disputémosles la orientación de la cultura puesta al servicio de la sociedad y penetrando su intimo sentido. Dejémosles la multitud anónima, dispuesta de antemano a marcar el paso, con la renuncia anticipada de su personalidad, más disputémosles los altos espíritus y los grandes caracteres, Dejémosles la masa amorfa de los inscriptos por obligación y por interés, más disputémosles, por último, a todos los que busquen un ambiente homogèneo de labor cordial, de solidaridad activa y efectiva y de fecundo amor.
Que sea ese el anverso de nuestra medalla. Emancipémonos de la tutela burocrática y construyamos con nuestras manos nuestro propio hogar espiritual, si queremos ser los obreros forjadores de un nuevo ciclo de cultura.
El dilema es terminante, perentorio: o estamos llamados a orientar, creando, o nos conformamos con ir a la zaga de los que nos preceden, disimulando nuestra impotencia bajo el razongo de comadres, que será pronto nuestra inútil protesta. termino, compañeros y amigos, formulando votos para que la próxima ocasión en que nos hallemos reunidos departamos largamente, no sobre lo que vayamos a hacer, sino sobre lo que hayamos hecho. Por ahora, enarbolemos el estandarte de la cultura frente a la Universidad y contra la Universidad. La dictadura y el imperialismo huirán a nuestro paso, como dos sombras. Conferencia leída por su autor en la Universidad de Montevideo, el 22 de Junio con motivo del Centenario del Congreso bolivariano. Dzerchinsky agonista de la revolución rusa fallecido recientemente,